ESQUIZOFRENIA 50

88 7 11
                                    

... Orihime ...
Todo estaba mal, absolutamente todo, desde que ellos dos aparecieron en el parque, mi corazón me dijo que algo malo pasaría, pero lo ignoré al ver que Tatsuki estaba tranquila con Uryu a su lado.
Maldito sea el momento en que decidí ignorar a mi instinto, jamás me había pasado, jamás le había ignorado, desde que era una niña y tenía que robar, jamás me había traicionado y yo jamás le traicione.
¿Por qué justo ahora tenía que darle tan poca importancia?
Ahora mí propio ser me repetía una y otra vez que este es mi castigo por ignorar a mi mejor amigo no ser vivo.
—Basta, Draco —Escuché decir a Lili a la vez que sentía un empujón.
Claro, había empujado al hombre que me tenía presa.
—¡Lárgate, mocosa! —Le grito este dándole un golpe en la mejilla haciéndola retroceder con un gemido doloroso.
Vi como Damon se acercaba a paso furioso como un animal a su presa y le asestaba un puñetazo a Draco que lo mando al suelo y sentí al vértigo de caer y no poder sostenerme de algo.
Pero Damon me detuvo de la blusa y me jaló con violencia alejándome de mi verdugo.
Traté de correr, alejarme, pero él no lo permitió, me dio la vuelta y me sujeto por lo brazos de la misma manera que lo había hecho Draco anteriormente.
—¡Orihime! —Escuche gritar a Ulquiorra mientras se separaba de Dereck y corría hacia mí o hacía Damon, qué más da, solo sé que se acercaba.
—¡Eres un idiota! ¡Maldito imbécil! No la vuelvas a tocar en tu asquerosa vida —Gritó Damon a la vez que pateaba en el estómago a Draco —Y tú, Ulquiorra, ¡vete de aquí! —Dijo mirando a Ulquiorra, pero este ni se inmutó.
—¡No la dejare cerca de ti! —Sé que se refería a mí
—¡Idiota! ¡Mil veces idiota! —Gritó y le golpeo el cuello.
Ulquiorra cayó inconsciente.
—¡No! —Grité por él —¡Monstruo! ¡¿Que le hiciste?! —Le demandé a que me dijera, que me asegurará que no lo había lastimado.
—Solo lo saque del juego, es un estorbo para mí.
Me soltó y caí frente a un Ulquiorra inconsciente.
Damon caminó alejándose de nosotros, ahora lo único que restaba era esperar a que el despertara y fuéramos a casa y olvidáramos este accidente.
Draco a mí lado gruño y maldijo, para después sonreír y levantarse, con dificultad, claro, había recibido una patada.
—¿A dónde vas? —Dijo y Damon se detuvo.
—A casa.
—¿Y qué pasa con lo que planeamos?
—Draco, ya basta, Damon no le prestes atención —Dijo Dereck —Esto está mal y...
—¡Cállate! —Le gritó Draco —Escucha Damon, Ulquiorra esta inconsciente, no nos será una molestia, este es el momento.
—Sera después.
—¿A caso tienes miedo?
—¡Qué has dicho?
—Lo que escuchaste.
Damon lo miró por largos segundos y le dio la espalda y siguió caminando.
Draco volvió a maldecir y me tomó por los brazos.
—Vamos Damon, ¿no me digas que tienes miedo de jugar un rato con esta pequeña? Pero si tú eres el gran Damon, el líder del grupo.
—No padre, por favor, déjala ir —Suplicó Lili que hasta ahora estaba siendo abrazada por Dereck.
Ella avanzó hacia nosotros, pero Draco la interrumpió.
—¡Tú cállate, mocosa! ¡Más respeto a tú padre! —Le gritó estirando el brazo hacia ella.
—¡Hey! ¡Deja a mi hija en paz! Lo que le haga a esta mujer no tiene nada que ver con Lilith —Le dijo Damon acercándose a él.
Sentí a Draco estremecerse y bajo el brazo que le impedía a Lilith seguir.
—Perdóname, Damon —Dijo sujetándome con fuerza.
—Suéltala idiota —Dijo Lili tratando de separarme de Draco —Padre, dile que suelte a Orihime y dejen que se vaya junto a Ulquiorra.
Damon lo medito por varios segundos.
—Dejemos ir a tu hija con su hermano y quedémonos con la chica.
Damon sonrió complacido.
—Lilith, váyanse.
—¡Oh! Gracias, padre, nunca podré pagarte este favor, hay que irnos, Hime.
Inconscientemente sonreí pensando que me había salido de este incidente.
—No me refería a esa mujer, Lilith, me refería a ti, a Dereck y Ulquiorra, esta mujer se queda conmigo —Dijo mientras me veía con una sonrisa de lado y esos ojos fríos, carentes de vida.
—¿Qué le harás? —Preguntó Lili con desconfianza.
—Nada de tu incumbencia.
—Pero... Padre, no puedo irme sin ella, no lo haré, no la dejaré sola.
—Vamos niña —Habló Draco —Obedece a tu padre, a la princesa le espera un juego muy divertido.
VIOLACIÓN, me iban a violar.
—Dereck, convence a mi padre, por favor, dile que nos deje ir junto a Orihime —Dijo arrodillándose ante los pies de Dereck.
Dereck trato de verla a los ojos, pero su mirada cayo con lástima al suelo, evitando a toda costa a Lili, ni él podía negarse a las órdenes de Damon.
—Damon, creo que esto es innecesario, piensa un poco, nos meterás en problemas, solo estás.. —Dijo tratando de ayudar a Lili, pero siendo interrumpido
—Cierra la boca —Escupió sus palabras con rabia, las drogas son tan malas.
Porque yo sabía que él había sido drogado por Draco, lo sabía, yo lo vi con mis propios ojos.
—Pero... —Volvió a insistir.
—Si tienes miedo, lárgate, ya te he dado el permiso, llévate a Lilith y a Ulquiorra.
—No me iré sin ella —Dijo Lili aguantando las lágrimas.
—Entonces, quédate a lo mejor, pequeña —Dijo Draco sonriendo.
—Déjala, Damon —Escuché a una voz decir, sabia quién era.
—¿Y si no lo hago, que harás? —Dijo retando a la voz.
—Te mataré.
—Oh, por favor, no me hagas reír, no podrás conmigo, ni siquiera me tocarás.
—Puedo con quien sea, ¿qué te hace pensar que contigo no podré?
—Tsk, ¡Idiota!
Me tiré al suelo por miedo, la mirada de los dos hombres era atemorizante.
Ulquiorra se veía un poco aturdido, pues apenas se había levantado, creí que no despertaría en unas horas.
Pero ahí estaba, tratando de defenderme, aun a pesar de que le costaba mantenerse en pie.
—Deja a Lilith y a Orihime —Demando Ulquiorra.
—Lárgate con Lilith —Dijo avanzando un paso —Pero a la princesa —Se agacho a mi altura y me tomo del cabello, acerco su mejilla a la mía juntándolas en un acto inocente, pero con diferente intensión —Ella se quedará conmigo —Dijo y rozó mis labios con los suyos.
—¡No la toques! —Gritó Ulquiorra y corrió hacia nosotros.
—¡Hey! ¡Hey! No interrumpas el espectáculo —Le dijo Draco poniéndose frente a él.
—¡Déjame! ¡Hazte a un lado! ¡Suéltala! ¡Cobarde! ¡Enfréntate a mí y déjala a ella en paz! —Gritaba y gritaba tratando de abrirse paso a Damon.
Podía ver su desesperación en sus movimientos y Draco le impedía avanzar con maestría.
Empecé a marearme, me aturdía la risa que soltaba Damon y los gritos de Ulquiorra, estaba asustada y mi cuerpo temblaba, ya no daba a más, mi vista se nublo y empecé a sentir que el suelo se movía, todo me empezó a dar vueltas, cerré los ojos y respiré profundamente, tenía que calmarme, no podía desmayarme en un momento así de crítico.
En mi cabeza retumbaba la "plática" que llevaban Damon y Ulquiorra, pero el mareo me impedía poner atención.
Finalmente cuando mis sentidos se agudizaron y el mareo se detuvo, abrí los ojos, y por fin pude concentrarme en ellos dos.
—¡Claro que lo haré! —Dijo Damon en respuesta a algo que le dijo Ulquiorra anteriormente —Que gran victoria que la princesa vea como su querido novio es vencido por mí —Dijo y se levantó y comenzó a avanzar a Ulquiorra.
—¡Ja! —Se burló Ulquiorra —Eso ya lo veremos.
—¡Padre! ¡Por favor! ¡Esto no te está haciendo nada bien! —Dijo Lili corriendo hacía Damon, tratando de que reaccionará.
Como si eso fuera posible, después de caer en los efectos de las drogas, nada puede detener al individuo, hasta que estos se pasen, eso lo aprendí en mi niñez.
—Dereck —Habló —Llévate a Lilith.
—Pero... —Le contestó.
—¿A caso piensas desobedecer? —Le respondió mirándolo con furia, ¿qué pensaba hacerle a Ulquiorra?
—Lilith, vamos... —Se acercó a ella con pasos sigilosos, como si estuviera caminando en una zona minada y que con solo un paso en falso esta explotará.
—Por favor, déjalos —Empezó Lilith a rogar situándose frente a el —Puedes castigarme, puedes encerrarme, puedes hacerme lo que te plazca, pero déjalos —Él ni siquiera se inmutó, estaba más concentrado en una guerra de miradas con Ulquiorra.
Los miré a ambos y parecían la misma persona, esa misma mirada que asustaba, ¿acaso pensaban matarse entre sí?
—Lilith, ven.. —Dereck le jaló el brazo con suavidad haciéndola apartar unos centímetros
Damon avanzó a Ulquiorra y Ulquiorra solo se quedó parado en su lugar esperándolo.
—¡NO! —Gritó Lilith, lanzándose al suelo y aferrándose a la cintura de Damon.
Él había perdido esa batalla de miradas, solo por distraerse con Lilith y eso le molesto.
—¡Dereck! —Gritó con rabia.
—Lo siento, lo siento, Lilith, por favor, te van a lastimar, hay que irnos —Le dijo aplicando más fuerza, sin herirla, por supuesto.
Pero ella no le obedeció, se aferró aún más a su padre.
—¡Por favor! ¡Deja de jugar! —Gritó soltando lágrimas —¡Ya no bromees! ¡Regresa a ser tú mismo! ¡Dinos que solo has estado jugando! ¡Regresemos a casa! ¡Y olvidemos esto!
El solo le pudo contestar con amargura:
—¿Crees que yo juego? —Y se soltó con brusquedad de su agarre.
Dereck aprovechó para sujetarla impidiendo que ella volviera a acercarse a Damon.
Me armé de valor y me levanté.
—¡Por favor! ¡No le haga nada! —Le grité en suplica.
Ulquiorra al verme se alarmó.
—¡ORIHIME! ¡NO TE MUEVAS! ¡QUEDATE DONDE ESTÁS!
—Deberías de dejar de preocuparte en tu novia, y preocupante de ti, ya que pienso y matarte y después divertirme con ella.
—¡YA DEJA DE HACER ESTO! —Gritó Lilith —¡SUELTAME, DERECK! —Le demandó con furia.
Dereck que ya había podido levantarla del suelo ahora luchaba contra el forcejeo que hacía Lilith.
Ella al no sentir la cooperación de Dereck comenzó a darle cabezazos en la cara, codazos en las costillas, le daba y lanzaba patas al aire, hasta hubo momentos en que le arañaba y mordía los brazos.
Se retorcía como si estuviera poseída por algún demonio.
—¡DRACO, AYUDAME! —Gritó cuando Lili se soltó y empezó a correr.
Pero Dereck alcanzó su brazo y la tumbó y acorraló contra la pared.
Pero fue peor ya que ella aprovechó para golpearle la cara y el estómago.
Draco se acercó y la tomo de las piernas y Dereck la tomó de la cintura junto a sus brazos.
La levantaron de poco a poco para no tirarla ya que ella se retorcía y arqueaba la espalda.
Dereck la veía con dolor, a diferencia de Draco que la miraba con satisfacción, entonces me pregunté: ¿qué hacía Dereck con personas como Draco y Damon? Él no era malo, todo lo contrario, ¿acaso solo estaba ahí para estar cerca de Lili?
—Deja de hacer tanto esfuerzo que te romperás la espalda —Le dijo Draco con falsa preocupación.
Por un momento olvidé a Ulquiorra y Damon por mirar la escena de Lili, en este momento ellos podrían estarse matando.
Reaccioné cuando Ulquiorra me llamó.
—Orihime, ¡VETE!

Esquizofrenia ~ulquihime~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora