El infierno podría quedar pequeño ante la situación que estábamos viviendo en ese momento.
La sangre manchaba la nieve y el olor penetraba tanto en mi nariz que sentí que me quemaba. Los quejidos, los gritos de dolor y de guerra inundaban la noche. Veo humo a lo lejos, el fuego había alcanzado algunos de los árboles muertos.
La batalla, aunque prevista, aunque preparada, nos cayó encima por sorpresa. Los cuerpos, enemigos y aliados invadían el suelo, esparcidos como basura.
Otro cuerpo cae frente a mí cuando justamente voy a auxiliarlo y evito mirarlo. Odiaba ver morir a mi gente y, sobre todo, que sentía que todo esto era indirectamente mi culpa.
Un aullido suena detrás de mí. Saco la pistola de mi bolsillo trasero y apunto con rapidez, pero es demasiado tarde, el lobo se me ha arrojado encima.
El animal muerde mi brazo al intentar alcanzar mi rostro. No le doy tiempo de atacar de nuevo, muerdo su cuello y desgarro su carne. Su sangre inunda mi boca, su pelaje sucio en mi lengua. Lo arrojo a un lado como si fuera tan solo un costal de basura, y lo dejo que se termine de desangrar en el suelo mientras chillaba y gimoteaba, la nieve se manchaba de rojo.
Me levanto, me limpio los labios y busco el arma. Al hallarla a varios metros más allá, corro a recuperarla.
Entonces un gruñido me detiene.
Volteo despacio y veo un lobo blanco mostrándome sus filosos dientes. Yo sabía quién era.
Reconocería perfectamente esos ojos amarillos en cualquier lado.
Y no iba a atacarlo.
Pero él a mí sí.
Primera y única nota de autor hasta el final: Muy buenas, me gustaría agradecerles a quienes se les ha dado por pasar por acá. Esta novela la escribí con sudor, sangre y muchas trasnochadas XD
Para los que ya la habían leído, debo mencionar que le hice ciertos cambios, no muy significativos, pero aun así.
Esta novela, fue beteada por SyadWorld , la cual debí mencionar desde un principio.
Agradezco todo esto.
Ahora sí, disfruten la obra.
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Príncipe de sangre [Los Traidores #1] «TERMINADA»
Vampire«Una corona de huesos adornando sus cabellos. Tus colmillos brillando, mostrando que acabas de alimentarte. La sangre fresca, humana, caliente y deliciosa corriendo en tu interior. La traición, aquella por la que fueron juzgados y condenados... ¿Qué...