Veintitrés.

3.6K 289 20
                                    

Simon se estaba volviendo loco pues el haber retrasado una vez más la aprobación del divorcio, no lo contentaba como tenía pensado.

El abogado quería tener a Louis de nuevo con él pero su estrategia no le había funcionado pues su esposo seguía prefiriendo al tosco granjero, con el cual lo había visto a la salida de las Cortes y el que en su día le había negado que su marido estuviese con él en su granja.

Se los imaginaba follando y disfrutando, mientras se reían de él,con furia cogió la notificación de la apelación y rabia la lanzó al fuego pegando otro largo trago a su botella de whisky ya por la mitad.

...—¡Maldito seas Louis Tomlinson!, ¡no te dejaré libre nunca!, ¿me oyes?, ¡tú me perteneces!, ¡eres mío!... ¡solo mío!—gritó mientras se reía y caminaba tambaleandose por todo el salón de su gran y solitaria casona.

Hasta ese momento se había conformado con sólo verlo asustado y huyendo de aquí para allá pero al parecer eso se había terminado, su pequeño y hermoso marido y el granjero parecían amarse profundamente y eso le repateaba el hígado, por lo que ahora quería verle sufrir de verdad y quería hacerle sentir el ser más desgraciado y derrotado del mundo.

Aún quedaba un mes para la próxima vista del juicio, así que tenía ese plazo para conseguir que Louis cambiase de idea y regresara con él, por lo que debía pensar algo rápido y poder lograr su propósito.

—Debo minar su confianza... sembrar la discordia entre ellos. ¡Si eso mismo haré!—gritó bebiendo otro trago—..puedo dejarlos sin nada y así conseguir que entienda que yo soy su dueño... que yo soy lo mejor para él. Louis volverá a amarme como antes...Él volverá a mí —se dijo a sí mismo acabándose la botella.

Finalmente la lanzó con fuerza al fuego, donde ésta se rompió en varios de trozos y rió como un demente.

—Él volverá a mí…volverá a mí.

Lejos de allí, en la granja Styles el ambiente que se respiraba era totalmente diferente pues a pesar de haber vivido una segunda derrota, los ánimos no decayeron para nada, aunque Louis no dejó de matar sus nervios con un cigarrillo tras otro.

A su regreso, Harry y Louis habían  sentido todo el amor y el apoyo de su peculiar familia y como tal, tras todos los besos, abrazos y mimos que se mostraron, mayores y niños degustaron la deliciosa comida que Liam había preparado con tanto cariño como siempre y a la que se unió con gusto un positivo y esperanzador Lukas.

—Quería daros las gracias una vez más—dijo Louis levantándose—...sois las mejores personas que jamás pensé encontrarme en la vida y a las cuales cada día he aprendido a amar más y más. Realmente he tenido muchísima suerte al encontraros y que me aceptaseis como parte de vuestra familia... Estoy orgulloso e inmensamente feliz, por eso os diré que no descansaré hasta que logre ganar esta batalla...Gracias a vuestro apoyo incondicional y vuestro amor, sé que lo lograremos...os amo, familia.

Harry y los demás sonrieron y aplaudieron por las bonitas palabras del ojiazul, entonces éste también se levantó y lo besó, al igual que lo hicieron Liam y Zayn después, ante las miradas pillinas de los niños y las risas y bromas de Niall.

Lukas los observaba y asentía contento, en verdad era que sí  formaban una hermosa familia, la cual a cada problema y adversidad que le planteaba la vida, permanecía más y más unida.

—————

No olvidéis votar y comentar

9. La granja Styles.-Larry Stylinson. TERMINADA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora