Colores. "Larry"

Naranja.

La respiración se le hacía pesada.

Se obligó a sí mismo a mantener la calma. Se obligó a no soltar ni una sola feromona que indicara miedo o que diera a conocer su estado.

Simplemente, Louis permaneció sereno, serio, mirando a Patrick como si este fuera absolutamente nada. Por que eso era, nada.

- ¿Qué haces aquí?- Se atrevió a preguntar. Esta vez no le iba a demostrar debilidad, esta vez, iba a luchar por los suyos.

- Hey, pero que tono. Se más amable, cariño. Te he esperado ya un buen rato.- Sonríe. El omega siente a su estómago revolverse sin responderle viéndole relamerse los labios y acercarse un paso.

Enseguida retrocedió uno:- Solo quiero hablar.- Dijo levantando las manos en modo defensivo. Louis alzó una ceja ladeando le rostro.

- No te creo. Y aunque así fuera, yo no quiero hablar contigo, así que por favor, te pido que te vayas.

- ¡Oh, vamos, bebé!- Intentó acercarse a él, con Louis retrocediendo y rebasándole. Empezó a avanzar de prisa sintiendo su presencia seguirle, quiso gritar pero prefirió ser valiente. Quería ser valiente y demostrarle que ya no podía consigo. No más.

- ¡No me toques!- Gritó cuando sintió su mano tirar de su brazo. Retrocedió estando frente suyo, abrazándose a sí mismo. Apretó los labios viéndole despectivo. No podía guardar buenos recuerdos. No le había perdonado aún.- No entiendo... Me quitaste lo que más que quería en el mundo. No lo harás de nuevo. No sé qué haces aquí y no me importa, pero quiero que te vayas y no vuelvas.- Gruñó fiero. Aunque el alfa ni se movió, pero Louis seguía bien plantado. Intentó de nuevo retirarse al ver una cínica sonrisa por parte de Patrick.

- Louis...- Le llamó. Le ignoró caminando de nuevo, soltando un gritillo cuando este le tomó entonces con más brusquedad, jalándole hasta dejarle prácticamente inmovilizado.

Sus ojos le dejaron estupefacto haciendo que casi le diera un ataque. Quiso respirar con más claridad. Le miró entonces con suma cólera y amenazante.

- ¡Suéltame ahora mismo!- Gritó.- Suéltame y vete.

- Ah, no bonito. No, no. Parece que me recordaste tan bien aquella noche que quedaste paralizado a mi. ¿Te imaginas que impresionado quedé al enterarme de que estabas saliendo con un intento de alfa?, ¿tú?, mi omega...

- No soy tu omega, Patrick. Nunca lo fui y nunca lo seré. Y no te atrevas a insultar a Harry, él es mil veces alfa, más de lo que tú alguna vez podrás aspirar a ser.- Masculló entre dientes. El alfa sonreía aún así sosteniéndole con aún más fuerza, soltando feromonas que rodeaban al castaño. Sintió un tirón indicándole nauseas terribles, aguantando sin forcejear más y tratando de tranquilizarse.

- Te equivocas, bonito. Te he estado buscando por mucho tiempo ya. Al fin te he encontrado y tuve que fingir ser un fisioterapeuta para llegar a ti. Pero ya que he descubierto que te estás tirando al ciego ese, déjame decirte que me has decepcionado, amor...- Susurra acariciando su mejilla. Louis gruñe volteando el rostro. Traga duro intentando no echarse a llorar.

El nauseabundo olor de Patrick le asquea tanto. Solo quiere llegar rápidamente a casa y abrazar a Harry. Necesita a su alfa... Lo necesita tanto:- Oh, vamos, cosita. Deja de hacer ese llamado lastimero. El ciego no va a salvarte de esta. Vamos a rendir cuentas, bonito. Vamos a hablar y a solucionar las cosas. Yo sé que aún me amas, Louis. Tranquilo bebé, te perdono por que yo también te amo a ti.- Louis quedó estupefacto viendo al castaño con sorpresa. Su rostro mostraba completa locura. Estaba perdido.

- ¿De qué hablas?, suéltame.- Dijo desesperado. Chilló entonces cuando su cuello fue estirado de un lado, sintiendo el aliento del alfa en su cuello. Peleó entonces aún más. Patrick estaba loco.