Nuestra Historia Juntos. [Kookmin Fanfic]

ITALIA

Era la primera noche que dormía tan lejos de casa, me sentía extraño, dieron las 2:00am y no podía dormir JK había caído dormido desde hace una hora más o menos.

Fue difícil pero para las 3 de la mañana por fin pude dormir.

—  A las 9:00 la alarma de hotel sonó, teníamos que desocupar el cuarto para limpieza a las 10:00, nos duchamos, y vestimos para salir a desayunar, el hotel incluía desayuno buffet, así que comimos bastante bien y quedamos muy satisfechos.

— Ya no puedo comer más — mencionó JK después de terminar de devorar hasta el último bocado que había en su plato.

— Ni yo, estaba delicioso — agregué

— Mucho, ¿Qué haremos ahora? —  preguntó.

—  ¿Ahora? Primero reposamos la comida y después ya vamos y tú...

—Me parece una buena idea.. ¿Yo qué? 

—Tú... Tienes algo en tu boca —  se limpió con la servilleta sin acertar en la mancha —Justo... —me levanté del asiento tome una servilleta y me incliné hacia él para limpiarle, nuestras respiraciones se mezclaban y luego de unos segundos estáticos me aparte y me senté de nuevo en mi silla — Ahí, listo

—¡Oh!, Gracias Chimchim —  sobó su estómago, mientras yo buscaba actividades por hacer.

—  ¡Jungkook! Creo que encontré algo — dije emocionado.

—¿Qué encontraste?— su mirada se volvió sobre mi.

— Estamos en Venecia —  dije con obviedad.

—  Eh... sí

—  Hay un paseo que empieza por Venecia después va a Florencia, Roma, a los Nápoles, Pisa  y termina en Milán que es donde sale nuestro vuelo a Suecia.

— Perfecto y ¿cuántos días dura?

— Se termina en 6 días y ya solo nos quedaría esperar en Milán para tomar nuestro vuelo a Suecia.

— Esta Genial reservarlo — a pesar de ser una palabra en tono imperativo, me la dijo con tal dulzura que me hizo erizar la piel y solo obedecí.

—  Ya... Es-ta —  pronuncié mientras introducía los números de la tarjeta que nos habían dado para el viaje los organizadores del concurso.

— Okey y ¿A qué hora salimos?

— Tenemos que estar aquí de nuevo en dos horas.

— De acuerdo ¿Podemos salir? Me gustaría tomar unas fotos.

— ¡Oh claro! Olvide que eras artista — utilicé un tono altanero para burlarme de él.

— Jajaja no molestes — empujó mi hombro suavemente mientras reía.

— Vamos — Tomó su cámara que no me di cuenta en qué momento sacó de la habitación y fuimos a ver el paisaje.

Yo iba como embobado con toda la belleza mientras él tomaba muchas fotos que después obligaría a mostrarme.

—¿Qué haces?— voltee a verlo y me estaba tomando una foto mientras yo tenía la boca abierta sorprendido de la maravillosa infraestructura Italiana que tenía frente a mis ojos.

— Solo tomo foto — respondió.

—  ¿De mí?

— ¿Por qué no?

— Porque... emm... No me pediste permiso.

— Oh lo siento, ¿Puedo tomar una foto tuya? — la forma burlona en la que lo dijo me hizo molestarme o al menos actuar como si lo estuviera.