Estaba en el auto de Harry e inútilmente trataba de aprenderme un discurso que había escrito, mis manos entrelazadas empezaban a sudar y mis pies no paraban de moverse, en verdad esta ansiedad me mataría.
-Hey, tranquila- Dijo mi acompañante sin quitar la vista de la carretera- Estás hermosa y te aseguro que un discurso no te hará gran competencia- se rio y yo le quería pegar pero en ese instante llegamos al lugar y mis nervios aumentaron.
-Lo harás genial- Besó mi mano y salió para abrirme la puerta.
Habían 2 guardias de seguridad en la puerta y varias parejas entrando y deteniéndose un momento para tomarse la foto, esto más que en honor a una clínica parecía un desfile de modas u otro tipo de evento. Tomé aire y enlacé mi brazo con el de Harry para entrar. Luego de pasar por la puerta nos detuvimos para la foto, no quería nada, estaba nerviosa y mi sonrisa no salía con naturalidad.
-¡Sonrían!- Nos dijo una mujer a través del lente, yo miré al joven a mí lado y él hizo lo mismo, me sonrió y yo no pude evitar corresponderle, tomaron la foto y miramos a la señora extrañados, ella hizo gestos de disculpas mientras nos indicaba que sonriéramos de nuevo, obedecimos y gracias a un par de pellizquitos en mi espalda pude sonreír con naturalidad.
Entramos al salón atenuado con luces cálidas pero oscuras, era muy bueno el efecto. Buscaba con la mirada a mis ex compañeros de trabajo pero había tanta gente en el centro que no distinguía.
-¿Nos sentamos por allá?- Preguntó con amabilidad, yo pestañeando un par de veces para recordar lo que me había dicho asentí.
En las mesas habían tarjetas que decían "Esperamos que les agrade nuestro homenaje" decorado con la firma de Mark, varias copas que champagne y en el medio un centro de mesa junto a una hielera.
-Cariño- Me saludó mi tío, yo me levante y besé sus mejillas- Disfruta, por favor- Me dijo con ternura, yo le sonreí.
-¿Recuerdas a Harry?- Le dije mientras mi acompañante se levantaba ofreciendo su mano
-General- Dijo Mark sonriéndole y apretando su mano con bastante animo
-Señor- Mi acompañante hizo una reverencia con su cabeza
-Me alegra mucho volverte a ver- Dijo el hombre mayor antes de irse
-Tu tío sigue muy joven- Comentó el chico de ojos verdes
Yo asentí y le pedí que se quedara mientras buscaba a algún conocido para acompañarnos, él asintió y quedó revisando su celular, yo le sonreí de lejos y seguí.
Me encontré a Leigh y le pedí que se sentara junto a nosotros luego de darle unas indicaciones para encontrar la mesa, ella asintió y dijo que iba a llamar a mi hermano para que también acompañara.
Tenía fortuna de conocer gente tan buena.
Observé de lejos mientras saboreaba mi copa, estaba Perrie con una mujer que no era su esposa, se le veía seria mientras la mujer le hablaba incluso su mirada se veía hundida en los pensamientos, yo me recosté en la pared y le sonreí de lejos. La rubia se veía preciosa, llevaba un vestido rojo, su cabello estaba elegantemente recogido, pero algunos mechones se escapaban de su cabello. Sus labios carnosos estaban decorados por una fina capa de labial rojo y quería morderlos y hacer que recorrieran toda mi piel.
-Ya casi es tú discurso- Me susurró Mark haciéndome asustar
Yo asentí sin quitarle la vista a Perrie quien ahora se reía- Uno no puede dejar de amar en un año, Jadey- Continuó él, desvié mi mirada y mi tío también estaba recostado en la pared con una copa en la mano.
