En la mañana siguiente pasé por el centro comercial y compré comida, en realidad Mark me pidió que lo dejara cenar en mi casa y yo no reproché. El tiempo había pasado rápido a las 2:30 era mi cita y ahí estuve puntual
-Jade Thirlwall- Anunció la secretaria, yo asentí y pasé al consultorio
-Buenas- Dije sentándome en el cómodo sillón
-Hola, hola mi pequeña saltamontes- Yo reí y ella se dio cuenta de que su comentario había sido chistoso y se rió también
Hablamos un rato y le comenté de mi renuncia- Pues me alegra mucho la decisión que tomaste, eso es seguir tu instinto- Admitió orgullosa; con vergüenza también le comenté sobre mi relación con Perrie, ella no me quitó de encima la expresión de picardía y mi rubor tampoco creo que haya dado tregua
-¿Cómo se conocieron?- Preguntó acariciando su barbilla
-Bueno- tomé postura en la silla y suspiré pesadamente- Ella es la mano derecha de Mark, fue su pupila, ella es la mejor de todos- Recordé a Jed y me interrumpí, Danielle me miró extrañada así que continué- Me pareció extremadamente sexy y cuando eso yo recién había terminado mi segunda especialización, así que salíamos cuando le quedaba tiempo y en ocasiones después de reuniones con mi tío, íbamos al parque o a comer por ahí, así comenzó nuestra relación...- Me detuve un momento a buscar una palabra para describirla- Complicada. Teníamos miedo de aburrirnos la una de la otra y por eso nunca formalizamos, ella puede estar con más personas al igual que yo, esas eran las condiciones- Danielle tomó despacio su vaso de agua atenta a lo que decía, yo me ruboricé- Yo la quiero mucho- Terminé
-Tú sí que disfrutas tú vida- Rió- ¿Andas con alguien más?
Negué con la cabeza, cambiamos el tema y hablamos acerca de mi nuevo trabajo hasta que se acabó la cita.
La tarde estaba muy linda, había olvidado la cena con Mark, así que manejé rápidamente hacía mi casa y empecé a buscar que cocinar, quería hacer lasaña pero terminé haciendo pasta. Antes de las 7:00 pm me di una ducha rápida y me puse cómoda, casi a los 5 minutos sonó el timbre y yo aproveché para prender el horno
-¿Tú?- Pregunté confundida
El asintió sonriente- Mark tuvo emergencias en la clínica, nada grave- Aclaró- Me pidió el favor de reemplazarlo- Yo me sentía un poco desmotivada, pero sacudí mi cabeza y lo hice pasar. Jed se veía atractivo, estaba totalmente vestido de negro, un saco y bajo el una camisa, pantalones ligeramente ajustados y zapatos formales.
-Espero y te guste la pasta- Le dije bajando los platos
-Así es- Respondió
-Por favor, siéntate- Le dije con amabilidad, se acomodó en el sillón y yo seguí sirviendo
Comimos tranquilos y hablábamos de temas variados, era entretenido, incluso el silencio era cómodo, hablamos hasta las 11:30 pm
-Bueno, ya está tarde- Anunció el- Y mañana hay trabajo- Se estiró y tomó su bolso- Muchas gracias por la comida- Me dio una sonrisa que al instante fue devuelta por mi parte
-Cuando gustes, Jed- Le respondí
Mi semana terminó igual, me veía a veces con Perrie y casi todos los días con Jed, por parte de la rubia en los días que la vi, íbamos a comer cerca del hospital ya que todos sus turnos eran de noche, y con Jed por otra parte, caminábamos y hablábamos, de esa manera invertíamos el tiempo, nos deteníamos en algún parque o plaza y empezaba la charla.
-¿Con que me vendrás hoy?- Pregunté abriéndole la puerta
-la séptima temporada de Game Of Thrones- Yo me emocioné tanto que di un saltito y le abracé