Las cosas con Perrie iban de la mejor manera, llevábamos dos meses comprometidas y manteníamos una muy buena comunicación. Nos veíamos por las tardes y dormíamos juntas para luego en la mañana prepararnos ambas para trabajar.
Era diciembre y ya el frío se empezaba a notar, las luces navideñas y cosas así. Por parte nuestra era la primera navidad en la casa nueva y todos estábamos entusiasmados por poner las luces, el arbolito de navidad y los demás detalles necesarios para vivir la mejor navidad en familia, porque eso éramos... Una familia. La relación de Leigh y Karl iba cada vez mejor y lo mismo podría decir con Jed y Ellie; por parte de Harry él pidió un traslado pero luego de rogarle miles de veces accedió a compartir esta fecha especial con nosotros.
-¿En verdad me tengo que poner esto?- Preguntó Perrie mostrándome el suéter que llevaba un reno navideño en él.
-Si quieres no lo hagas, amo verte solo en sujetador- Bromeé, ella me tiró una almohada- Pero no quiero que los demás te vean, entonces sí, ponte el suéter
-Jade...
-Habíamos quedado en que esta navidad combinaríamos camisas, Perrie, no cambies los planes ahora- Le regañé, ella resopló y se lo puso- Te ves estupenda- Dije riendo
-El tuyo es mejor, no me parece justo- Comentó
-Debiste prestar atención a las miles de veces en las cuales te pedí opinión acerca del estampado, pero ahí tienes por terca y descuidada- Ella torció los ojos- Ven acá, Pez- Pedí
Ella obediente se acercó protestando por la ropa que usaba, yo me reí y me levanté para buscar los verdaderos suéteres que usaríamos. Cuando ella los vio su rostro se iluminó y me miró a mí sarcástica
-¡No puedo creer que me engañaras con este suéter!- Exclamó con una sonrisa
-Deberías prestarle más atención a tu futura esposa- Me acerqué y me senté en sus piernas, ella me besó el cuello y lo mordió un poco- ¿Olaf o Elsa?- Pregunté perdida en sus labios contra mi piel
-El que quieras- Susurró lamiendo el punto de mi pulso haciéndome estremecer
-La última vez que me dijiste eso fue para lo que usaríamos en navidad y casi me matas cuando te mostré aquel horrible suéter- Ella rio y besó mis labios, yo me separé porque nuestros amigos estarían por llegar
Quité mi camisa al igual que ella y nos cambiamos ambas
-Ven, quiero una foto- Dijo ella, yo caminé en su dirección y sonreí a la cámara, pero en un momento Perrie besó mi mejilla y ahí tomó la foto haciéndome a mí sonrojar
-¡Eres la peor!- Dije riendo
-Te amo- Murmuró aprisionándome entre sus brazos
-Yo a ti- Susurré
-¿Vendrá Harry?- Preguntó ella ahora un poco más seria
Miré sus ojos azules y acaricié su mejilla- Quiero que te comportes, Edwards- Le dije mientras delineaba su mandíbula- Estas preciosa y no quiero que nuestro comienzo de navidad se vea alterada por su juego de niños
Ella asintió y ambas bajamos. Perrie se puso a hacer chocolate caliente mientras yo sacaba todas las cajas con Karl en las cuales solíamos guardar los objetos navideños. El polvo se esparció por el lugar haciéndonos a ambos estornudar para luego reír. Poco después sonó el timbre y pasaron todos, incluyendo Harry.
-¡Hola chicos!- Los saludé animada- ¡Muchas gracias por venir!
Besé las mejillas de cada uno y les sonreía.