❥ ᴋɴᴏᴡ ᴍᴇ {ғɪɴɴ ᴡᴏʟғʜᴀʀᴅ & ᴛú}

CHAPTER THREE "you're a nice idiot Wolfhard"

___(t.n) POV

El timbre sonó y el 90% de la clase se esfumó tan rápido como si el viento se los hubiera llevado, según el horario que me había dado el director era hora del almuerzo, recogí mis cosas y me levanté de mi respectivo pupitre para salir del aula pero repentinamente un chico se posicionó frente a la puerta obstruyendo el paso y sin darme tiempo de reaccionar la voz de una chica llegó fuerte a mis oídos pudiendo saber con claridad que se hayaba detrás mío. - Así que latina. - Me di la vuelta para que ella hiciera una pausa y tomara el descaro de recorrer mi cuerpo de abajo hacia arriba con la mirada. - ¿Por qué viniste aquí eh? ¿Acaso tus padres te abandonaron en un basurero y un Canadiense te recogió? - Instintivamente rodé los ojos, de alguna manera esperaba verme involucrada en este escenario, preferí mantener mi vista en otro lado y dejarla balbucear hasta que terminara con sus comentarios ofensivos. - ¿Qué?... ¿Acerté? - Sonrió engreída sintiéndose en un trono al no obtener respuesta de mi parte hasta que se dió cuenta de que en realidad estaba ignorandola, fruncio el ceño disgustada y en un acto de intolerancia me tomó del mentón con fuerza obligándome a mantener mi mirada en ella al estar nuestros rostros a centímetros de distancia. - ¿¡Qué eres sorda!? ¡Responde por un demonio! - Queriéndome dejar llevar por la furia cerré mis puños resignada a golpearla pero alguien fue más rápido que yo y la empujó haciendola tambalear y con ello soltarme.

- ¡Dejala en paz, Kara! - Exclamó una chica de menor estatura bastante molesta, responsable de anterior empujón.

- ¿O qué? - Habló desafiante sacudiendo su pantalón del polvo imaginario que se había impregnado al momento del violento contacto. - ¿Vas a llamar a tu manada de pulgas? - Rió sin deshacerse de su arrogante sonrisa siendo correspondida por otras chicas sentadas en los pupitres cuyo su único propósito era hacerla de público.

- No. - Conteste en defensa de la que irónicamente llamaban "pulga" logrando obtener nuevamente la atención de la abusiva. - Porque yo ya estaré aquí. - Continúo de mi frase de película golpeé a Kara con mi libro como distracción para tomar a la pequeña chica de la mano y empeñarme esos pocos segundos a escapar de nuestra futura paliza, debido al retardo del seguidor de Kara pude encargarme de quitarlo del camino con la facilidad de patearlo en la entrepierna y abrirnos paso. Sin más obstáculos que atravesar salí corriendo del aula junto a la chica que tomaba mi mano, por supuesto no sin librarme de un insulto a lo lejos, efectivamente del chico al que había pateado anteriormente en las bol-... En la entrepierna.

- ¡Vete al infierno perra latina! - Menuda frase contradictoria, ¿Qué acaso no sabe el infernal calor que hace en Latinoamérica?

Reí internamente por mis pensamientos dejando como rastro una media sonrisa en mi rostro, sin embargo no dejé de correr hasta estar a una distancia lo suficientemente lejana. Al instante de que la de menor estatura soltó mi mano comenzó a jadear como si hubiera hecho la carrera de su vida, yo ante su exageración no me limité a demostrar mi simpatía. - Jajajaja eres increíble. - Aún con las manos recargadas sobre sus rodillas viro la cabeza mirandome confundida para a los segundos devolver la sonrisa.

- ¿Qué dices? Fuiste tú la que golpeó a Kara en el rostro ¡Ah nunca creí ver que alguien le hiciera frente de tal manera! - Le di un golpesito en el hombro recibiendo su anhelar.

- Ay calla, me sonrojas. - Dije guardando la simpatía poniendo una de mis manos sobre mi boca fingiendo vergüenza, la contraria rió.

- Hahaha dime ¿habías hecho algo asi antes? - Preguntó entre cortas risas, yo negué con la cabeza asomando una expresión incrédula. - Eso pensaba, por eso eres genial... - Cortó con el tema tomándose unos instantes para iniciar una nueva conversación. - Ah por cierto, soy Catherine un gusto. - Se presentó ya mucho más tranquila.