No todas las personas son buenas y no todas ellas merecen seguir viviendo. Respirando en este mundo y contaminando a las demás personas buenas para convertirlas en malas; aunque si una persona buena se vuelve mala ¿Realmente fue buena alguna vez?
El hecho era que Vanessa nunca fue buena, fue una buena mentirosa y actriz que era muy diferente.
Llevaba cerca de dos años casando a mi madre, por lo que le había hecho a papa, a mis hermanos y a mí. Carter y Tessa, ellos era una historia que no tenía ganas de recordar. De ellos ni yo me había encargado, Matt se había posicionado como mi mano derecha después de que Vanessa me dejara a cargo del negocio y había contactado a Hunter, explicado todo y por más que no lo quisiera mentirle.
Poner en sus manos información falsa sobre Carter y Tessa, pero aun así ellos eran culpables y al negarse al arresto la policía los mato. Me convecina día tras día que ellos nos habían mentido durante años, que ellos merecían eso; eso no aminoraba la culpa.
Pero aun así ellos ya no estaban y aunque le contamos la verdad aRichard. Absoluta y cruda verdad, él había llorado a sus hijos y gritadodurante un mes entero.
Creí que jamás nos perdonaría, que jamás me perdonaría por ocultarle que Vanessa estaba viva y más aún porque había verificado que realmente me parecía a ella y ella lo había lastimado, cuando le contamos que ella era una mentira andante.
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-La encontramos, se encuentra escondida en Brasil.
Solté un suspiro, no me agradaba del todo darle caza a mi propia madre.
-¿Qué hacemos?
-Llamen a los gemelos, a Matt y Richard. Hoy mismo saldremos rumbo a Brasil.
-De acuerdo.
Pase una mano por mi rostro, esto sería malditamente difícil.
-Ahh. Y Rut, que la detengan. Enciérrenla y que no hablen con ella hasta que no esté yo haya.
Asintió y cerró la puerta de mi despacho.
Me sumergí en el papeleo y reportes que tenía en mi escritorio durante unos largos minutos hasta que alguien entro por la puerta y se colocó en mi espalda.
Unas manos se colaron por el cuello de mi blusa y bajaron hasta mis pechos estrujándolos. Luego unos labios besaron mi cuello succionando.
-No puedes llegar y hacer esto en mi despacho. – dije con un jadeo.
-Claro que puedo, eres mi esposa. Puedo hacer esto y más.
-Sigues siendo un idiota si crees que eso te da algo de poder.
Saco las manos de dentro de mi blusa y giro mi silla hasta dejarme frente de él.
Me encontré de frente con un azul demasiado oscuro, con el cual me había familiarizado en el último par de años. Jordan seguía siendo injustamente atractivo.
-No necesito ningún poder, el único poder que necesito es el de alterarte cuando te toco y te beso – me tomo del rostro y me beso. Un beso que me dejo sin aliento, me puse en pie y acerque mi cuerpo al de él. – Lo ves, ese es el único poder que necesito.
-Deja de ser un idiota sabiondo y bésame
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Los Bennett
General FictionAlexandra Bennett es uno de tres, ella tiene dos hermanos gemelos; Cameron y Ethan. Ellos son los Trillizos Bennett. Unos reconocidos corredores de Motocicletas en Londres, o eso eran en Europa antes de llegar al continente Americano. Estados Unido...