veintisiete; como el club

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Y bueno, volvemos a situarnos en la escuela preparatoria AMLO (recuerden que en este universo paralelo éste don es el presidente de la República Mexicana).

n/a: esto fue escrito en 2017, preduje el futuro.

Dallon, Jack, Josh y Pete estaban en la cafetería comiéndose una torta de chilaquiles, aprovechando el descanso de quince minutos entre clase y clase.

-¿Dónde está tu chava, Pete?-quiso saber Josh.

-¿Dónde está la tuya, homosexual?

-Sepa-se encogió de hombros-La última vez que nos hablamos fue en la fiesta de su hermano.

-¿Y qué pedo?-preguntó Jack-. ¿Qué le hiciste?

-Chale, luego luego a echarme la culpa. -Josh se cruzó de brazos-. Pues al chile creo que no va a funcionar, ¿Saben? He estado viendo al Brendon, pero...

-No mames, ¡¿A Brendon?! - Pete casi escupió el bocado. Dallon frunció el ceño, recordando el por qué se dieron los hechos en la casa del frentón. Sin embargo no dijo nada.

-¿Y sin arreglar las cosas con el Toiler?-. Jack también estaba impactado.

-Ajá, igual y está mal, pero ¿Qué se le hace? -Josh le dio un trago a su boing! de mango (porque boing! nos patrocina ahr) -. Como sea, ya no hablemos de mí, cuéntanos Dallon, ¿Qué era eso tan importante de lo que querías hablar con Brendon como para correrme a la verga?

El mencionado finalmente despegó la vista de su Alcatel y se les quedó viendo sin saber qué decir.

No sabía si sentirse culpable o sentirse bien con lo que hizo. ¿Por qué culpable? Porque Brendon había ido a la escuela, pero ya había faltado a dos clases. En el fondo se sentía mal, pues había sido amigo de Brendon por ya algún tiempo, y en parte se arrepentía de haber reaccionado de ese modo.

-Cosas del proyecto de biología-mintió.

-Hola, chicos-saludó un güerito llegando a su mesa.

-Hola, Patrick-contestaron todos los presentes, arqueándole las cejas a Pete, quien se chiveó.

El morenazo se levantó de su silla y besó a Patrick en la mejilla. Se susurraron un par de cosas y de la nada se fueron de ahí.

-Vaya, el amor sí que te apendeja-dijo Josh.

-¿Tú qué vas a saber?-preguntó Jack.

-¿Ya andas con Alex?

-Cállate, Dallon.

-Pero ya terminaste con tu vieja-supuso.

-De hecho sí-respondió-. Pinche morra meca.

Mientras tanto, en otra mesa...

-Agh, míralo nada más-le dijo Tyler a Jenna-. Se divierte como si nada con sus amiguitos, y yo estoy aquí...

-¿Borracho y loco?-preguntó Hayley.

Sarah y Hayley estaban aprendiendo a convivir más con Tyler, a pesar de que no congeniaran del todo bien. ¿Por qué? Porque últimamente veían a Jenna un poco más sonriente y con menos ganas de matarse. Sabían lo que estaba sucediendo, lo presentían, pero no sabían cómo ayudar al par de amigos.

-Él no te merece, Tyler-le dijo Jenna-. Al chile que te mereces a alguien que te trate mejor.

-Pero personas como Josh me hacen perder mi último destello de fe-suspiró-. ¿A quién podría gustarle?

-Bueno...

-A todos se les olvida mi existencia-la interrumpió-. Y a los que no, parezco no agradarles.

-Pero, Tyler...

-Soy el último que escogen cuando hay que formar equipos. Nunca importa mi opinión, porque como soy el tímido e introvertido de seguro estoy de acuerdo con la mayoría. Dime, ¿A quién podría gustarle alguien como yo? Ni siquiera tengo un grupo de amigos como el de Josh o de cualquier chico normal.

Jenna se le quedó viendo, asintió con la cabeza, tomó sus cosas y se retiró de la cafetería antes de que Tyler pudiera decirle algo. Hayley y Sarah se miraron entre sí y negaron con la cabeza.

-Ahora sí la re cagaste, Tyler-dijo Sarah. Ambas salieron tras Jenna, dejando al pelón solo en la mesa.

El castaño permaneció sentado, tratando de averiguar qué fue lo que hizo mal.

-Me lleva la verga.

...

Era el ensayo general.

Como ya era el último ensayo, ahora sí estaban en el salón donde iba a ser la fiesta.

Gerard estaba sentado en una silla de esas negras plegables que se ocupan en las fiestas, al igual que Patrick, Ray y Alex (quienes habían ido a ver a sus chavos lucirse un día antes de los XV's). Frank se encontraba nuevamente a cargo del sonido (mejor dicho, del celular de la Breezy y la bocina del tianguis) y la quinceañera y sus chambelanes estaban en el centro de la pista.

Pero había un pequeño detalle. También estaban presentes los padres de la Breezy y su chingamadral de tíos que habían venido desde Oaxaca, Monterrey y Chihuahua para su fiesta. Ya ven que acá en México cuando cumples XV te hacen bailar hasta con tus tíos que no veías en 10 años y si no quieres que todo resulte un fail, deben ensayar un día antes y definir el orden y todas esas weas.

-Bien, escuchen todos-anunció Gerard a través de un megáfono -. Vamos a ensayar el vals familiar primero, ¿Vale? Todos a sus posiciones.

-¿Siempre es así de fresa tu amiga?

-Es hombre, ma-respondió la Breezy-. Bueno, más o menos.

A Dallon le incomodaba el hecho de que el papá de Breezy no dejaba de mirarlo como si se lo quisiera linchar.

"Si supiera que ya no ando con su pinche hija fea" pensó.

Después de unas dos horas finalmente terminaron. Gerard tenía fe en que su primer coreografía que pondía fuera todo un éxito.

Eso lo averiguaron al día siguiente.

...

¿alguien quiere sumarse al suicidio colectivo? a mi me toca llevar el galón de lejía.

la cita es mañana a las 6:66 am en la chingada. y si ya los mandaron para allá, pues qué mejor, ah.

qotd: ¿cómo es donde viven?

mi ciudad parece un rancho, porque literalmente no hay muchos lugares para ir, por ejemplo con amigos o así. a los mecos de mi escuela les gusta ir al centro nada más a dar vueltas (porque solamente hay negocios y ya), y la gente de más dinero (o que quiere aparentarlo) suele ir al único centro comercial decente que hay aquí. estamos al lado de la cdmx, pero aún así no está tan contaminado (aún). somos el estado con más viento de la república, es por eso que da tanto frío y hasta da hueva salir de tu casa xd.

eso.

esperen el cap de valley y un OS nuevo.

los veo en la chingada

-dan

emo trinity mexican |peterick; frerard; joshler; brallon|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora