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veintiocho; el día anterior / los XV's pt 1

El día anterior a los XV's

Las luces de la cocina aún estaban encendidas en la casa de Jenna Black.

La chica de dieciséis años se encontraba cocinando a las tres de la mañana mientras escuchaba su playlist depresiva. Abrió el horno para revisar si ya estaban listos sus cupcakes y, al confirmar que se le habían quemado sacó la bandeja y la aventó sobre la mesa de mala gana.

—Me lleva la chingada—se dijo—. Apuesto a que hasta Maire Wink se burlaría de mí.

Suspiró cuando Yo no nací para amar del JuanGa empezó en su playlist. Se ajustó los audífonos y se secó una lágrima.

—Jenna, ¿Qué haces cocinando a éstas horas, hija?—dijo su jefa entrando a la cocina con extrema cara de sueño—. ¿Qué se te quemó ésta vez?

—Sólo ando sad, ma—. Cerró el horno y se quitó los audífonos—. Déjame, ya se me pasará.

—Pero tienes unos quinces mañana, ¿No?—preguntó su mamá.

—Se me están quitando las ganas de ir—respondió.

—Pero, ¿Qué no ibas a ir con tu amigo Tyson? Y tus amigas...

—Por eso—. Entrecerró los ojos—. Además ya ni siquiera fui a comprar un vestido. No tengo vestidos.

Su madre negó con la cabeza.

—Mañana platicamos entonces—. Le dio un beso en la mejilla a su hija—. Y ya váyase a dormir, escuincla. Ya es tarde.

—Sí, ma...

—Pero me limpias todo tu cochinero mañana temprano.

Jenna se fue a acostar, no sin antes revisar su celular. Tenía un chingo de mensajes de Tyler, pero decidió ignorarlos.

—Puta, ¿Qué debo hacer? Chingu otoke —recordemos que la Jenna es bien kapoper. El otaku y la kapoper eran el uno para el otro, según ella; ¿por qué Tyler no podía ver eso?

Sabía que si ella no iba no habría gran diferencia. Tyler podría ir con Josh si eso era lo que quería.

¿Qué tenía Josh que no tuviese ella?

—Tal vez si fuera bonita todo sería diferente —pensó.

O tal vez si se tiñera el cabello cada mes, se hiciera expansiones en las orejas y un tatuaje enorme en el brazo podría gustarle a Tyler.

Pero no, no era tan pendeja como para cambiar algo de ella sólo para complacer a los demás.

...

Mientras tanto en la casa de Pete... Pues, todos estaban durmiendo, era de madrugada, ¿Verdad? Bueno, vayamos a un par de horas antes.

*Un par (un chingo) de horas antes*

Pete estaba planchando su pantalón del traje que usaría al día siguiente. El vestido de Breezy sería rosa mexicano, por lo tanto ellos también debían de llevar un moño rosa horrible. Frank estaba acostado en el sillón viendo Enamorándonos y la doña Dale estaba limpiando frijoles en la mesa.

Entonces le llegó un mensaje a Pete.

"Sal. Estoy afuera de tu casa"

Frunció el ceño. Desconectó la plancha y salió, tratando de no llamar mucho la atención.

Y ahí estaba Vic.