Epílogo.

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El sincronizado retumbar de los tambores hacían eco en mis oídos, el corset de mi vestido me apretaba las costillas, respiraba con mucha dificultad, batía mi abanico tratando de refrescarme y junto con el intenso calor juraba que me estaba sintiendo tal y como el día que me ahogué.

Comencé a recordar aquel día y una sonrisa apareció en mi rostro. Ese día fue el inicio de una aventura que cambió mi vida por completo, para mí suerte esa tarde Jack me salvó y gracias a él en estos momentos estoy aquí, pero lastimosamente está vez si eso volvia a ocurrir el no podría hacerlo ya que el ahora se encontraba en una tarima a pocos minutos de ser ejecutado.

Apreté con fuerza mi abanico sin apartar la mirada de la tarima, 5 días fueron los necesarios después de salir de la isla de la muerte para preparar la ejecución de Jack Sparrow. Cosa que no me pareció puesto que mi acuerdo con James había sido otro o eso es lo que él me había hecho creer, o mas bien lo que yo pensé.

Sacudi mi cabeza atareada  por todo lo que estaba pensando, tal vez eso me ganaba por no especificar muchas cosas en mi acuerdo de casamiento.

—Jack Sparrow sepa que se le a acusado por sus múltiples actos criminales contra la corona. Siendo muchos en cantidad y siniestros por naturaleza los más notables serán mencionados  a continuacion...

—No es justo— murmuró elizabeth mirando a la gran tarima donde Jack estaba llamando mi atención del hombre que estaba enumerando los crímenes de Jack.

Miré un momento a James y le suplique con la mirada pero el solo apartó la suya.

—El tiene que pagar según lo dicta la ley— dijo papá serio mirando a Jack.

Resiganda y ahora esperando lo peor miré nuevamente a Jack. Algo un poco adelante de mi llamo mi atención, perdí el aliento al reconocer a Adam el cual estaba vestido sin su uniforme, suspiré al verlo tan perfecto y tambien pude sentir a mi corazón estrujarse.

Deje de verlo cuando no muy lejos de el noté a Will entre la gente, lo miré atenta cuando esté comenzó a abrirse paso hacia nosotros. El me miró apenado cuando chocamos miradas, desde que descubrió lo que había hecho para salvarlo me miraba de esa manera y yo no podía evitar sentirme extraña ante su mirada.

—Gobernador swann, comodoro— saludo cordialmente llamando la atención de nosotros— davina— dijo mirándome mientras tragaba en seco.

Miré a Will atenta y solo le sonreí. El me sonrió con culpabilidad.

— Elizabeth— está vez se dirigió a mi hermana mirándola con una intensidad que nunca antes había visto— debí haberlo dicho desde hace mucho tiempo, tal vez desde el primer momento en que te vi pero ya no puedo callarlo mas. Te amo.

Papá y James miraron sorprendidos a Will, yo abrí mis ojos en sorpresa mientras una enorme sonrisa se plasmaba en mi boca. Elizabeth miraba a Will sorprendida pero yo pude notar el ligero rubor que cubrió  sus mejillas y como sus ojos brillaban cual estrellas.

Ella no lo dijo pero sus ojos lo hicieron por ella y era más que obvio que elizabeth también estaba perdidamente enamorada de Will.

Sin decir más con una última mirada Will se dió la vuelta y caminó hacia la el tumulto de gente, el al pasar a lado de Adam le dedicó una mirada la cual el respondió asintiendo.

Miré a ambos intrigada ante su extraña interacción, pero tomandome desapercibida los azules ojos de Adam se posaron en los míos por un momento pero eso fue suficiente para que mis piernas temblaron y casi logro caerme. El como sin nada hubiera pasado apartó la mirada mientras yo por otro lado sentia mi corazón doler.

Piratas del Caribe: La Maldicion del Perla NegraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora