Cuando desperté estaba de nuevo en unacelda, pero diferente a la anterior. "¿Dónde estoy?" Me pregunté. No recordaba mucho pero supuseque había conseguido llevar a Rey a la Resistencia, no era unainstalación de la Primera Orden. Algo que comprobé en el momentoque noté a Leia mirándome desde un rincón, de brazos cruzados, elceño fruncido pero con los ojos de una madre mirando a su hijoenfermo.
-Ha habido un momento en el que losmédicos pensaban que no saldrías. Esas heridas tienen muy malaspecto y has perdido mucha sangre. – Informó sin modificar laexpresión contradictoria de su rostro al verme abrir los ojos.
-¿Cómo está Rey? – Conseguíresponder, es lo único que me importaba en ese momento. Saber si lahuída había servido para algo
-Bastante mejor que tú, salta a lavista.
-¿Despertó? – Ella afirmó y latranquilidad del trabajo realizado recorrió mi cuerpo.
-Despertó, volvió a dormirse y se hadespertado otra vez, estará comiendo por la hora que es – Mimirada extrañada le indicó a mi madre mi confusión, ¿cuántotiempo llevaba durmiendo? – Día y medio apróximadamente lleváisaquí. ¿¡Cómo se te ocurre hacer el esfuerzo de sacarla en brazosen la condición en la que estabas!? – Se queja ahora acercándosea mí. Noté como mi cuerpo se tensaba y miraba a Leia de reojo, noquería que se acercara más de lo necesario. Por otra parte siquería que lo hiciera, que se sentara en el borde de la cama y mediera un beso en la frente como cuando de pequeño tenía fiebre.Pero aún no estaba preparado para ello, para hablar con ella, paravolverla a sentir mi madre. Todavía no estaba preparado para que seacercara. A ver mi reacción se quedó quieta, podía sentir suconfusión por mi reacción, su alegría por tenerme allí con ella,aunque fuese en esas circunstancias y el rencor por haber matado aHan.
-Si hubiese salido solo me hubiesendisparado – Ella torció el gesto dándose cuenta de lo evidenteque era esa respuesta
-Avisaré para que te traigan algo decomer, necesitas reponer fuerzas. Están esperando a que te repongaspara hacerte unas preguntas. – Asentí y mi madre avisó para quele abriesen la puerta por la que salió.
Quedé mirando al techo, tampoco podíamirar mucho más ya que cualquier movimiento me dolía. De reojoobservé como habían convertido la celda en una enfermeríaimprovisada. Una maquina registraba mis signos vitales así comointroducía algún líquido en mis venas, seguramente suero con algúncalmante que hiciera que no me doliese demasiado. Nada más irsellegó una enfermera para desconectarme la vía y poder levantarme,sin decir nada se fue. La puerta no tardó mucho en abrirse de nuevo,por ella entró alguien que conocía bien, aunque con otro nombre yque estaba completamente seguro que sería la última persona enalegrarse de que estuviese allí, quien yo conocía como FN2187
-Quería comprobar con mis propios ojosla noticia de que Kylo Ren se encontraba aquí – Dice colocando unabandeja en una mesa junto a la cama. – Rey me ha dicho que lasalvaste, dos veces, no sé con qué fin lo harías pero gracias porhacerlo. – No sabía qué decir, ni siquiera me esperaba a que élquisiese saber algo de mí, así que decidí no hacer más que unsimple asentimiento. La verdad es que toda esa situación estabasiendo muy extraña. Y sin una sola palabra más se retiró volviendoa dejarme solo y buscando la manera de incorporarme para poder comer
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Caminos entrelazados (Reylo)
FanficA veces una acción puede cambiar tu destino, tu percepción del mundo, y, en general, tu vida.