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Era momento de volver a casa, mis padres tenían que estar ahí, no me sentía lista para afrontar esto sin ellos.

—¿Crees que podamos llegar a casa? —pregunto Zayn un poco preocupado.

— Espero, pero será peligroso, ¿no lo crees? —mi voz se quebraba.

— No, no si podemos ir en automóvil —sonrió.

—¿Sabes conducir?

— Aprenderé —golpee su brazo, mi mirada lo asusto —no es cierto, se manejar, tranquila.

Corrimos al parqueadero de la primaria, para nuestra suerte, habían algunos carros.

—¿Y las llaves, genio? —era obvio las necesitábamos.

— No es necesario, mira esto —retrocedió y tomó un extintor de fuego.

—¡Espera no! —grite un poco tarde, la alarma del carro se disparó haciendo un ruido que podría escucharse a kilómetros de aquí. Me miro, sus ojos reflejaban terror, Nana se aferró de mi pierna.

—Ellos vendrán —dijo con sus pequeños ojos azules —escuche a un señor en la radio, dijo que los ruidos los atraían —suspiro.

—Tranquila— la tome por el hombro — ¡Zayn apaga esa maldita cosa!

—No sé cómo hacerlo.

—Demonios, apártate — él un poco molesto se apartó del auto, levante el capo, "oh por dios, que es esto" pensé y mis ojos se abrieron como platos al  ver el interior de ese auto, era algo complejo con tubos y cables. El sonido era molesto mis oídos zumbaban, podía escuchar ruidos fuera del estacionamiento.

—Vamos déjame ver —objeto Zayn.

—Yo puedo —dije.

—Basta Smith, no seas orgullosa —con un empujón muy suave me sacó del medio, realmente no sabía lo que hacía, él en menos de dos segundos paro el ruido,desconectando un par de cables —Oh mi Dios, entren al auto ahora —Fernanda giro su rostro, la tierra se abrió y sepulto sus pies, no se movía.

—¡Nana! —No respondía — ¡Vamos, Fernanda! —grite nuevamente tres seres se acercaban a ella y otros seis, según lo que conté, se aproximaban a mí. Zayn corrió a ella, la cargó en sus brazos y sin pensarlo dos veces la subió en el coche.

—Ahora tú, Bella al auto —sin dudarlo entre él arranco y paso por sobre los seres, atropellando a todos los que pudo —te dejare en tu casa, tengo que ir con mis padres, no puedo dejarlos solos.

—Pero... —me detuve. Era muy egoísta de mi parte obligarlo a salvarme a mí, él tenia a sus padres —está bien —sonreí forzadamente.

— Prometiste protegernos —intervino Fernanda.

-No, Nana, Zayn tiene que ir con sus padres —dije, cuidando que mi tono fuera dulce y calmado.

—Lo prometí, tengo que cumplirlo, hermosa, sólo iré a ver que mis padres estén bien —la miró y con su sonrisa tranquilizo el ambiente —Isabella, si necesitas algo sabes dónde queda mi casa te dejare el coche, ¿crees que puedes llegar? —Asentí —Estas molesta —¿eso fue una pregunta? 

—No, ¿por qué lo estaría?

— No lo sé no has hablado desde que te dije que debo ir a casa —Dios, soy una tonta egoísta lo ha notado.

— No Zayn, sólo que tengo miedo, ¿cómo llegaras a tu casa desde la mía?, es lejos —baje la cabeza sentía una vergüenza enorme. Él asintió sin responder y comprendí que la conversación había terminado.

Llegamos, las calles estaban vacías, los vidrios de las casas estaban rotos algunas puertas tenían huecos de disparos. Era realmente aterrador, salí del auto lo atravesé y saque a Fernanda. Zayn salió tras nosotras.

— ¿Quieres que entre? —Negué —¿segura?

— Sí, ve a tu casa, puede que después sea tarde —le sonreí.

— No lo pienses dos veces si algo sale mal, sólo corre al auto, vuelve a mi casa, estoy seguro de que aún no puedes manejarlo.

—¿Manejarlo? ¿El auto?

—No Bella — Algo ocurre, su tono es sombrío y lento.

— Ve a casa, nada saldrá mal —después de todo ya había matado un ser, podría con otro. Espere un segundo él no se giraba, me lance a sus brazos y lo abrace —sólo prométeme que no te mataran — él sonrió —te quiero, eres... eres mi mejor amigo.

—Y tú eres la mía —beso a Nana en la frente y partió tomando una de las palas que dejamos en la parte trasera del auto. Pude verlo hasta que doblo en  la esquina.

—Entremos, pero no hagas ruido, si la cosa... si la cosa se pone fea no grites, quédate junto a mi —tome la segunda pala en mi mano derecha con la izquierda sostuve la mano de Nana caminamos por el jardín, para mi desgracia la puerta estaba abierta.

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Espero que les guste, así de largos van a ser todos (: me alegran sus comentarios


La Profecía |Zayn Malik|en ediciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora