𝐀𝐬𝐢𝐬𝐭𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐒𝐞𝐱𝐲. (Sana&Tú) "G!P"

Capítulo 38.

-¿Y si ella se va y me deja?-. Dije mientras fregaba mi cara con mis manos.
-Yah, T/n-. Jimin me tomo por los hombros e hizo que lo mirará. -Ella no es así, tranquila-. Acarició mis hombros, yo solo suspire.
-Tengo Miedo, Jimin-. Me sente en la silla.

Habían pasado unos 2 meses mas desde que le propuse matrimonio a Sana, todo había salido a la perfección, solo había un problema. La última vez que visitamos al doctor para ver si el bebé era niño o niña, resulta que mi querido y querida hija no se dejaba ver.

Sana tiene 8 meses de embarazo, mi familia y yo estamos muy felices por la llegada del nuevo miembro, Sana cada vez que se le antoja algo, siempre se lo compro, pues al parecer al pequeño o pequeña le gusta comer mucho.

-¿Estas lista?-. Jimin toco mi hombro sacandome de mis pensamientos. Lo miré y negué, tenia miedo. -Vamos, ambas han luchado hasta aquí, estoy seguro que ella no se ira, ella esta esperando un bebé tuyo-. Me dio una sonrisa que me tranquilizo.

Me levanto y me llevo al espejo completo, el traje que llevaba era precioso.

Jimin, volvió a acariciar mi hombro y me sonrió.  -Estas perfecta-. Sonrió.
-¿Listos?-. La voz de papá hizo que lo mirara, el llevaba un traje negro al igual que mio pero un poco mas moderno. -Estas preciosa-. Me tomo de las manos y me abrazó. -Me haces muy feliz, hija mia-. Beso mi frente y volvió a abrazarme. -Bien, Vamonos-. Me tomo del brazo y salimos.

Llegamos al auto adornado y me hizo sentarme enfrenté mientras que Jimin iba atrás. Llegamos a donde seria la boda, era una boda pequeña sin muchos invitados, algunos amigos mios e amigos de mi papá, de mi suegro.

Mi padre me acodo hasta el frente donde había un señor de saco con una sonrisa y una libreta enfrente de el, me miró con una sonrisa. A mi lado estaba Jimin y Suga quienes me daban ánimos, mis nervios aumentaron al ver entrar a Nayeon con Mina y Chaeyoung con Tzuyu, aquella parejas eran las damas de honor de Sana. Eso significaba que Sana estaba a punto de aparecer.

Mis nervios aumentaron y comencé a balancearme en mis talones mientras controlaba mis nervios. Volvi a mirar atrás y vi a mi suegro quien estaba muy feliz y había extendido su brazo a alguien... Ahí la vi, ella tenia un hermoso vestido, se veía perfecta. Sana conectó mirada con la mía y me sonrio, aquella sonrisa hizo que me mis nervios desaparecieran.

Nichkhun llego hasta donde estaba yo y me extendio la mano, se la di y me acerco a Sana.

-Ella es feliz contigo, asi que sigue así-. Me guiño el ojo y beso la frente de Sana.

Tome la mano de Sana y le Sonreí.

-Mierda, estas perfecta-. Bese su mejilla y después su pansa. -Tú también-. Acaricie.

La boda dio inició, nos demoramos unos minutos,  hasta que llego la parte que todos habíamos esperado.

-Ok T/n, aceptas  amar, protejer y cuidar a Sana en la Salud y en la enfermedad, en las buenas y en las malas, hasta que la muerte las separé-. Dijo aquel hombre.
-Si acepto-. Dije con una sonrisa, poniendo el anillo en su lugar correspondiente.
-Minatozaki Sana, aceptas amar a T/n en la salud y en la enfermedad en las buenas y en las malas hasta que la muerte las separe-. Volvió a repetir las  mismas  palabras.

Sana me miro y me sonrio, poniendo el anillo en mi dedo.

-Sí, acepto-. Acarició mis nudillos.
-Entonces por la ley de corea del sur, puedo decir que estan oficialmente casadas, pueden besar a la novia-. Dijo con una sonrisa.

Lleve ambas manos a la mejillas de Sana y nos fundimos en un tierno beso. Los gritos no se dieron a esperar.

Nuestras familias llegaron y comenzaron a felicitarnos, yo abrazaba a Sana por la espalda mientras repartía pequeños besos en su cuello, hasta que la mano de mi padre hizo que me detuviera.

-Felicidades amor-. Me tomo de los brazos para abrazarlo y luego depositar un pequeño beso en mi cabeza. -Al fin dejaras de fastidiarme-. Bromeó.
-¡Papà!-. Intente zafarme del abrazo, pero papa apretaba mas.
-Ya eres toda una mujer, me hace feliz-. Habló con voz cortada. -Me hace muy feliz que puedas tener una hermosa familia, cuida a Sana, ella es muy feliz contigo-. Se separo de mi y se limpió las lágrimas. -Te amo hija-. Beso mi cabeza.
-Yo también papá-. Lo abracé.

Nos quedamos unos minutos asi, hasta que Sana llego y me sonrio, sea tiempo de irnos.

-¿Lista?-. Me miró con una sonrisa.
-Vamonos-. Tome su mano y miré a mi padre. -Cuidate, nos vemos después-. El asintió y beso en la frente a Sana.

Ambas subimos al auto donde había llegado Sana, y manejamos hasta la casa en la playa. Al llegar bajamos y caminamos hasta la orilla del mar, el aire soplaba en ese momento. Tome la mano de Sana y comenzamos a caminar, por toda la orilla de la playa.

-Es el mejor día de mi vida-. Dije mientras dejaba de caminar y miraba la playa, con una mano en el bolsillo y una sonrisa.
-Lo sé-. Sana me abrasó de lado y beso mi mejilla. -Estoy ansiosa de que nazca-. Dijo tocando su vientre.

Baje la mirada hasta aqule lugar y me incline.

-Hola pequeñin-. Dije mientras dejaba un beso en el vientre de mi mujer. -Espero conocerte pronto, mamá y yo estamos lista para darte mucho amor-. Acerqué mi oído para escuchar, pero en vez de escuchar sentí una patadita. -Oh, no quiere que me acerqué-. Reí y me levante, abracé  a Sana y pegue mi frente con la de ella.

-Te amo-. Y bese sus labios.

Habíamos pasado por tanto y ahora estoy casada con la persona que mas amo y esperando y bebe de ella, ¿No podría ser mas feliz?