《 Capítulo 09 》

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¿Cuánto tiempo Johnny seguirá enojado con él? Ya le mandó mensajes, lo llamó, incluso llevo bocaditos de Wendy hasta su casa, lo había escuchado decirle a Irene que no quería hablar con él, pero ella le gritó que era un estúpido y lo dejó entrar. De nada sirvió, pues cuando subió a la habitación de John la puerta estaba cerrada con seguro y no le quizo abrir, probablemente Irene le daría un buen golpe en la cabeza por eso.

—Mark, campeón ¿qué te parece una mañana entre hombres? —Xiumin entra a su habitación incitado por Wendy que muere de preocupación al ver tan triste a su niño —Tú y yo haciendo el recorrido de bicicleta de la montaña, ¿qué dices?

Ya ha ido a hacer aquel recorrido con Xiumin antes, así que se sabe el camino de memoria, la tienda de pesca, la pequeña feria del pueblo, kilómetros de carretera, el viejo motel a las afueras, más kilómetros de carretera y luego un bosque encantador donde hacen la ruta de flechas verdes pegadas en los árboles, porque la de flechas azules es para los que van al lago a pescar y eso de sacar pececitos inocentes del río hasta que mueren con un doloroso gancho clavado en el paladar, no le gusta nada a Mark.

Al llegar a la montaña sus acciones son las habituales, a mitad de camino se detienen para comer la ensalada de frutas que Wendy les preparó y luego llegan al final, sintiendo el aire secar su sudor cuando bajan a toda velocidad. Botellas totalmente vacías sin ninguna gota de agua, fruta comida, recorrido terminado, están listos para volver a casa, no sin antes detenerse en el lugar de siempre.



***



Con dos tazas de té sobre la mesita de la sala Wendy e Irene conversan como si no se hubieran visto en meses, específicamente de la relación de sus hijos, sacan conclusiones de porqué están peleados, el ingenio de Irene saliendo a relucir cuando cuenta su hazaña de haber sobornado a Chittaphon con galletitas de chocolate para que le contara todo.

—Ten me dijo que John está celoso porque Mark pasa mucho tiempo con otro chico.

—¿Otro chico?

—¡El hijo de SeulGi!

—¡Oh! No sabía que Mark y él eran amigos —lamentablemente para ambas el chisme es cortado cuando Xiumin entra riendo junto a un Mark que lame con entusiasmo un helado —Al fin llegaron, miren quien nos visita —Xiumin se acerca a las dos mujeres y Mark se limita a saludar de lejos a su suegra antes de subir a su cuarto —¡Los llamaremos cuando esté listo el almuerzo!

¿Los? ¿A él y a quién más?

Johnny, verlo acostado en su cama mandando mensajes con el ceño fruncido agita su corazón por unos leves segundos, lo ha extrañado tanto durante los dos días que no lo ha visto, correría a abrazarlo si John no le hubiese lanzado una mirada llena de rabia.

—Mi mamá me obligó a venir —bufa John tragando algo de saliva al ver como Mark chupa su helado, se lo ve tan caliente —yo no quería, tampoco quiero verte ahora, vete.

Lo está hechando de su propia habitación y él muy obediente entra al baño de su cuarto para que no lo vea, está sucio, debe lavarse muy bien antes de tratar de entrar a la cama con Johnny y rogar bajito para que no lo eche, no importa si sus mamás están abajo junto al tío Xiumin preparando el almuerzo, cerrará la puerta con seguro y tratará de robarle un beso a John que ablande un poquito su corazón.

El albornoz bien cerrado, su cabello medio secado, Johnny siguiéndolo con la mirada cuando cierra la puerta con seguro y mordiéndole el labio inferior para empezar un rico beso, no, lo último no.

—Dije que no quiero verte —lo aleja regresando la atención a su teléfono —¿por qué no le dices a JaeHyun que te bese como siempre?

—¿Como siempre? —la nariz de Mark se arruga ante tal afirmación, está loco —Nunca he besado a JaeHyun.

—¿Por qué me sigues mintiendo?

—No lo hago.

—Quiero terminar contigo...

El corazón, pulmones, hígado, riñón, absolutamente todo su metabolismo se detiene cuando escucha a Johnny decir aquello, el castaño bloquea su teléfono y se sienta junto a él, desnudando sus hombros para dejarle un suave beso en cada uno de ellos.

—Pero no puedo.

Él manoseó a una chica delante de Mark, están a mano en infidelidades, ¿verdad?

No, sobretodo cuando está tan estúpidamente seguro de que Mark se acuesta con JaeHyun, sea cierto o no debe asegurarse de que ese imbécil sepa de quién es Mark, por lo que repasa las marcas en el cuello y clavícula del menor que empiezan a borrarse, chupa y muerde, gruñendo bajo por la falta de reacción del otro, la respiración de Mark no se agita ni sus labios dejan salir leves gemidos, ¿qué mierda le pasa?

—Si no te gusta dejaré de hacerlo —bufa alejándose de su piel para verlo a los ojos, su mirada está perdida en algún punto de la habitación, una lágrima silenciosa baja por su mejilla, ¿acaso fue demasiado brusco marcándolo? —Mark —lo agita levemente tratando de hacerlo reaccionar —Mark, oye, ¿estás bien? Mark... ¿pasa algo?

—¿De verdad vas a dejarme?

—¿Qué? No, ya te dije que no puedo.

—Johnny —lo llama sujetando una de sus manos para llevarla hasta su mejilla —no estoy listo para lo que tú quieres, pero puedo hacer otra cosa que te gustará.

—¿Qué cosa?

—Déjame mostrarte.

Tras acomodarse el albornoz lleva a su gigante novio hasta el borde de la cama, dejándolo sentado como un niño que espera un premio, cuando Mark se arrodilla frente a él y le desabrocha el jean es obvio lo que va a hacer, ¿y quién es Johnny para negarse ante tan buena oferta?, ansioso lo ayuda bajándose el pantalón y luego el bóxer.

Ambas manos de John hacen presión contra el colchón en busca de apoyo, la lengua de Mark toca la punta de su erección, recorriéndola como si de un helado se tratase. Johnny inclina la cabeza hacia atrás mientras sus ojos se cierran con fuerza y sus dientes muerden su lengua ante un desesperado intento para no hacer mucho ruido, lo último que quiere es que su mamá y Wendy lo escuchen.

Mmm, sí, sí, sí, joder... métetelo ya en la boca, amor, no hace falta que lo lamas tanto.

Lo está disfrutando, Mark ama eso, no importa que a él se le esté haciendo un nudo en la garganta y que sus ojos retengan desesperantes lágrimas, aún no empieza a chupársela en serio y ya siente que todo su ser se quiebra, no quiere hacer cosas así, pero debe, porque Johnny es su novio y no tiene nada de malo que se lo haga.

Como buen niño obedece y se mete todo lo que puede de la erección en la boca, rodeando con la mano lo sobrante para empezar a masturbarlo, su boca succionando y mordiendo de forma juguetona por ratos, la mano de John enredándose en su cabello mientras la otra le acaricia la mejilla. En pocos minutos pierde el control, John comienza a follarle la boca bruscamente y él se permite derramar unas cuantas lágrimas, seguro cree que es por las arcadas que se crean cuando su pene le toca el fondo de la garganta.

Trágatelo todo, bebé.... vamos.

El cuerpo de Johnny da los últimos espasmos cuando Mark se lo lame de la punta hasta la base masajeando sus testículos antes de metérselo otra vez a la boca para recibir toda su eyaculación. John cae exhausto sobre la cama, intentando regularizar su respiración rápido, Irene acaba de gritarles para que bajen a almorzar.

—Ve tú primero, debo vestirme.

—Quiero ver como te vistes.

—No seas morboso —frunce el ceño Mark ganándose una carcajada de John que le roba un beso antes de salir de la habitación.

Las cosas terminaron bien, Johnny parece haberlo perdonado y él encontró un sustituto temporal al sexo convencional, está bien, todo está bien, aunque más lágrimas bajen por sus mejillas está sonriendo, así que se supone que todo está jodidamente bien.








♡ Feliz 03 de abril

Vegetarià | JohnMarkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora