24a hoja

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Pasó suficiente tiempo a solas pensando y reflexionando, tanto que llegó el momento en el que en vez de solucionar solo creaba más dilemas.

Aún sentía cierto recelo hacia el Uchiha por su actitud anterior, por lo que no se le antojaba volver todavía; aunque la noche ya había caído.

Se le ocurrió la remota idea de comprobar lo dicho por Kakashi, ir a ver a su hermano. ¿Cómo estaría? ¿Seguiría molesto con ella? Esas eran varias preguntas que se hacía.

No se había preparado mentalmente para lo que iba a encontrar, tenía esperanzas en que las palabras del peliplata fueran mentira. Aunque no solía mentir.

Llamó a la ventana de su habitación, esperando que su padre (quién suponía que estaba en casa) no se enterase.

—¿Lea? —tapó rápidamente su boca antes de ser descubierta.

—Shh. No quiero que nadie sepa que estoy aquí. —le dijo en voz bajita.

—¿Qué haces aquí? Pensé que no volverías... Aunque me alegro de que estés aquí. —la envolvió en un abrazo al que no supo reaccionar.

—Vine a ver cómo estabas. Sabes, aunque no compartamos opiniones, todavía sigo preocupándome por ti.

—Te echo de menos. —confesó el mayor. —La casa se siente muy sola desde que te fuistes. Papá pasa la mayoría del tiempo en la oficina. Hay noches incluso en las que no regresa y duerme allí..

—Los acontecimientos no deberían terminar así, no me gusta estar alejada de vosotros. Pero no me quedó más remedio...

—Lea, tienes que ayudarme. Puede que no termine de agradarme tú y ese Uchiha juntos pero, Danzō está manipulando a papá. Tienen pensado publicar unas leyes sin pies ni cabeza. Si sigue así, pronto expulsará a los Uchiha de la aldea..

—¿Cómo? —quedó estupefacta, sin poder creérselo. —Eso no p-puede ser.. Todo explotaría.. No, no..

—Es por eso que te digo que vuelvas. Sin ti por aquí, Danzō es libre de controlar a papá. Él está cegado completamente, sin nadie que lo ilumine.

Luego de meditarlo durante unos segundos aceptó que era la mejor opción que tenían.

Era volver o enfrentarse al inicio del fin de Konoha.

—Volveré.

(...)

Nadie la oyó atravesar la puerta principal de la casa del Uchiha. Sin esperar un saludo, se dirigió hacia la habitación donde guardaba la poca vestimenta que había utilizado para introducirla en una bolsa. Dejaría todo preparado para el día siguiente.

Por la mañana regresaría a su casa, junto a Asuma e Hiruzen.

—¿Lea? —la pelinegra giró su cabeza hacia la voz.

El azabache se tensó, lo que menos esperó fue ver a Lea empacar sus cosas. Lo primero que pasó por su cabeza fue disculparse, creyó que el motivo era su malinterpretación.

—¿T-te vas? —le costó pronunciar, no se imaginaba que su error tuviera semejantes consecuencias.

Lea siguió a lo suyo. Ante una falta de respuesta, Shisui se agitó.

—Lea, lo siento. Siento mi actitud y tono de voz antes, de verdad lo hago. —se disculpó mientras se acomodaba al lado de ella, intentando buscar su mirada. —No quise herirte, jamás sería mi intención. Me dejé llevar por ideas sin sentido, pensé que detrás del abrazo de Kakashi había algo más. Yo..

Los celos eran parte de su sangre Uchiha. Cuando amaban, lo hacían con todo su ser, haciéndolos más vulnerables que nunca. Y débiles ante el odio.

—Lea, por favor responde. —le pidió tratando de chocar sus ojos contra los suyos.

El silencio lo estaba desesperando.

—Shisui, no vuelvo a casa porque hayamos peleado. —por fin se decidió a hablar. —Mi hermano me necesita, y el Hokage también. Admito que me dolió que me hablases así, pero no voy a estancarme por eso. Fue un malentendido, lo entiendo. Todo está bien entre nosotros.

—Es por eso que eres la mejor novia del mundo. —ya estaban de pie y el muchacho aprovechó para achucharla.

—¿Novia? No recuerdo que hayamos hablado nada de eso. —picó la Sarutobi.

—¿Y estarías dispuesta a serlo?

—Hmm, quizás.

—Señorita Sarutobi, —habló, posando un mano en la cintura de la chica. —¿sería usted mi bella y valiente novia?

—Afirmativo, Shisui-kun.

No aguantó más y tomó los labios de Lea con ansia.

Poco a poco las manos de ambos comenzaron a volar junto a los besos. No existía nada más para ellos en aquel momento.

—Extrañaba esto. —dijo recostándose en la superficie mullida.

—Yo te extrañaba a ti, Uchiha. —le susurró en su oído.

Volvieron a unirse en un beso, y esta vez; estuvo seguido de más muestras de cariño y amor de el uno por el otro.

(...)

Yacían recostados y abrazados. La Sarutobi, ya que la respiración de Shisui era lenta y pausada, pensó que estaba dormido y se dispuso a escribir.

«Mañana volveré con Asuma y papá. Papá. Temo a su reacción. No quiero volver a verme en la calle, incapaz de encaminar su carrera como Hokage.

Mi pregunta es: ¿conseguiré algo?

A parte de eso, el día se acerca. Tarde o temprano deberé encarar a Danzō. Ese maldito no saldrá ileso. Después de vivir bajo sus amenazas, no dudaré en meterlo entre rejas por los que quiero.

Como si en otra vida hubiera estado en Raíz o sido pariente de ese vejestorio, crearía un gran problema. Estaba segura.

La única tranquilidad que me es otorgada es el chico que yace a mi lado. Mi pecho se infla de orgullo y felicidad cada vez que lo veo. Y puede que suene precipitado o exagerado, pero creo que he llegado al punto de cruzar la línea del 'te quiero' a algo más.

Jamás se lo dije con palabras, pues en la vida las pronuncié como tal a nadie. Siento pavor cuando las pienso. Pero esta vez es distinto, Shisui me da seguridad.

Definitivamente, lo quiero... con todo mi corazón. ¿Cuando dejó de ser un simple compañero? Estuvo en mis peores momentos y me ayudó sin pedir nada a cambio, siempre fue tan amable y bueno.. Se me hizo imposible no caer ante sus encantos.

Mi mundo se partiría si alguna vez desapareciese o esfumase de mi vida. Porque con su partida, se llevaría un trozo de mi corazón y parte de mi alma; y a medias no se puede vivir.»

Llevas escribiendo en ese montón de papeles desde nuestra primera misión juntos. —habló el muchacho asustando a Lea, quién evitó que este viese lo escrito. —¿Algún día me dejarás ver?

—Sólo cuando la situación lo requiera.

—Baka, anda vuelve aquí.

En lo que guardó todo el material, Lea volvió a colocarse pegada a él. Con su cabeza en el pecho desnudo del azabache, cerró sus ojos tranquilizando su respiración al ritmo de la masculina.

Finalmente con las caricias de Shisui en su espalda, cayó en los brazos del sueño.

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👋🏻 Holaaaa

¿Cómo estáis? Espero que bien. Por aquí hace too much calor..

Lea vuelve con su familia y Shisui preocupado, se va oliendo drama..

Lo que nunca te dije ↠ u.shisuiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora