BRAD ©

Capítulo 26

Bajé tan rápido como pude, pues parecía ser algo importante. Bajé en sandalias blancas, las que ocupaba todos los días para hacer los deberes de mi casa. Como todas las buenas hijas en este mundo.

—Brad...— suspiro de alivio bajando las escaleras de la entrada. Su llamado pareció importante, y por esa razón mis pies estaban desnudos.—¿Qué pasó?— miro a la persona que estaba recargada sobre el cofre de su coche, después vuelvo la mirada a él.

—Quiere hablar contigo.— señala a su hermana.

Niego con la cabeza.

—Sé que estás enojada, porque te conozco y sé que querías romperle la cara y realmente agradezco que no lo hayas hecho, pero por favor, sólo escuchala.

—Brad...— niego con la cabeza cansada—
no está siendo un buen día ¿entiendes?

—¿Qué pasó?— peina mi cabello detrás de mi oreja y me mira con atención.

Niego con la cabeza resignada a contarle.

—Okey, hablaremos de esto después ¿está bien?

Asiento con la cabeza y lo abrazo, sintiendo su trabajado cuerpo junto al mío, su aroma me hacía respirar tranquilidad.

—Emma...— escucho a la niña, me separo de Brad y lo miro a los ojos.— sólo quería disculparme.

Doy dos pasos hacia atrás y aclaro la garganta.

—Sé que es estúpido poner de pretexto a mi madre, pero, sé que tú me entenderías si a ti te pasara algo similar.— se encoje de hombros.— ¿No es así?

—Te entiendo, y realmente lo siento muchísimo pero considero y quizá la mala aquí sea yo pero, lo que hiciste no estuvo bien. Su madre murió y sinceramente no sé como se sienta, pero pienso que lo que ahora más que nunca ustedes necesitan es sentir a alguien junto a ustedes, y me parece que yo no me estoy "cogiendo"— dibujo comillas con los dedos— a tu hermano, si yo estoy con él no será sólo una maldita noche, si yo estoy con él será por mucho más, para apoyarlo en momentos como estos, por ejemplo...

—Yo no lo veía así...— me interrumpió— yo no te veía así Emma, y realmente lo lamemto, como también lamento haberte golpeado y dicho todo lo que dije, sólo que, me duele ver que mi hermano sea feliz aún a pesar de que mamá murio. Me duele que él si logre seguir su vida después de todo.

Niego con la cabeza.

—¿Pretendes que él se encierre de la misma manera que tú?— sonrío irónica— escucha, si tú eso es lo que quieres hacer, está bien, tú decisión se respeta completamente. Sin embargo, si él quiere seguir con su vida para que su madre desde donde quiera que esté esté orgullosa de él, respetala también.

—No puedo ser tan fuerte como lo es él.— lo señala.

—Él es él, tú eres tú. No intentes ser como él, porque eres completamente distinta, sólo intenta salir de esta siendo completamente tú, como tú lo harías, como te enseñaron a hacerlo y vas a lograrlo, porque ahora tienes una gran motivación, la cual es tu madre.

Sus ojos le brillaban y no justamente porque tenga lindos ojos, sino que esa niña estaba llorando.

—Lo siento, de verdad lo lamento.

—No importa.

—¿Puedo... darte un abrazo?

Abro los ojos más grandes de lo normal y miro a Brad, quien me miraba sin reflejar nada.

Asiento con la cabeza y ella da dos paso grandes hacia mi para abrazarme y llorar un poco sobre mi hombro. Abrazo su espalda y siento su corazón latir a una velocidad rápida.