Capítulo 4.

31.9K 2.2K 123
                                    

¿Todo había sido parte de un sueño?

Recuerdo estar a los besos con Demian pero no se que pasó después.

Desperté a lado de Olivia y Helena las tres en la misma cama con un resaca de los mil demonios.

¿Por qué había bebido tanto?

Mi única respuesta era olvidar un poco lo mal qye me sentía.

Sólo quería olvidar a Demian por unas horas.

Pero cada vez se me hacía más imposible.

Estaba sentada en la cama observando como mis dos amigas roncaban hasta que un fuerte ruido de una bocina retumbo en todo el pasillo donde comunicaban las habitaciones.

¿Qué demonios?

- Los quiero a todos abajo ahora mismo! - el grito letal de Demian no sólo hizo sobresaltar a mis dos amigas sino que hasta el vecino de la esquina lo habrán escuchado.

Si Demian estaba acá lo único que significaba es que la fiesta había llegado a sus oídos.

Estábamos todos completamente en problemas.

Hemos sido descubiertos.

Esperen un momento ¿capas mis sueños fueron ciertos no?

Tenía que averiguar eso y salir de mis dudas.

- Puedo matarlo - murmura Lena tratando de volver a dormir.

- Dos minutos! - vuelve a grita Demian fuertemente.

- Matalo prima! - susurra Olivia tomándose la cabeza.

Seguiamos las tres en un trance de no saber que hacer hasta que escuchamos el gruñido de los chicos.

- Idiota! - la voz de Dante fue la que retumbo.

Las tres nos miramos confundidas hasta que la puerta de la habitación se abrió dejando a la vista a Demian acompañado del infeliz de Adam ambos cargando unos baldes de agua.

- Están despierta - nos dice mirándonos de la peor forma. - Dos minutos! - sentencia con firmeza retirándose del cuarto.

- Saben que yo me voy a levantar porque nos salvamos por estar con los ojos abiertos - declara Lana saltando de la cama.

Si ellos traían eso lo único que significaba es que los chicos no corrieron con la misma suerte que la muestra.

Conociendo a Demian y lo enojado que esta es más que seguro que los habrá empapado a los idiotas que dormían en el otro cuarto.

Luego de darnos un baño y nos tomaramos nuestro tiempo, nadie nos iba apurar porque con la resaca que teníamos ambas nuestro nivel de compresión era muy poco.

Al bajar todos los chicos nos esperaban.

Alex mi hermano y Dante dormitaban ambos cabeza con cabeza.

Ethan como siempre haciendo maldad les sacaba fotos a los chicos de esa manera supuestamente comprometedora.

En eso nos acomodamos en el sillon esperando a que nuestro verdugo aparezca.

Como si mis pensamientos fueran escuchados él apareció vestido tan jodidamente sexy que si no apretaba mi mandíbula tenía miedo que se caiga ante tremendo hombre.

Se detuvo enfrente nuestro acompañado de su perro fiel, el idiota de Adam que sólo miraba a mi amiga.

- Escuchen! - gruño.

- Juro que no hice nada papá - la voz de un dormido Dante se escucha mientras se levanta del sillón algo asustado.

Todos comenzamos a reírnos, siempre Dante nos hacía reír con sus estupideces.

¡No somos Nada! (5°SAI)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora