El movil me vibra en la cartera.
Jack abre el frigorifico para sacar una de sus cervezas y vino para mi, lo sirve en una copa y la boca se me hace agua, no por el vino, sino por las verdades que pronto iban a salir vomitadas de la boca de Jack.
Me da miedo ¿y si lo que dice no me hace aclararme? ¿Y si lo empeora todo?
¿Y si? ¿Y si que?
Las interrogativas se llenan de frustración y mi cerebro las acoge con empeño a todas, pero tengo que ser fuerte si quiero cerrar esta puerta en mi vida, y si quiero.
Se ve más atractivo con la poca barba que se deja y pelo despeinado, está un poco más palido y se nota que sigue en el gimnasio.
Jack aclara su garganta.
—Te he pillado
Lo veo a través de mis pestañas y sonrió confundida.
—¿Pillado? ¿Haciendo el que?
Ríe bajito.
—Seguramente pensando en lo guapo que soy. Si quieres puedes decírmelo en voz alta, no me importaría en lo absoluto.
Siempre dejando lucir su gran ego de niño pijo, y su parte inmadura.
—Si quieres creerlo, no destrozare tus ilusiones—Él se sienta a mi lado y me ofrece el vino, lo cojo gustosa...no, no a el, al vino...aunque...
—Vamos Jade, no pienses en mí y en esas cosas ahora, estoy tratando de ser serio.
Por mi santa madre ¿Cómo lo ha sabido?
Dejo el tema archivado en mi cabeza porque esto no me lo puedo pasar, medio ladeo la cabeza y empiezo a beberme el vino y el su cerveza, en silencio, casi sin respirar, movernos o pestañar.
Estamos nerviosos.
Las cosas lentamente se están poniendo incomodas, Jack hace ruido molesto con su garganta, se me tensan los dedos y busco algo con que distraerme.
—Naturalmente te he dicho que hablare con la verdad—Dice él, mientras cruje sus dedos, frunzo el ceño porque parece realmente doloroso—nunca habría querido que te dieras cuenta de las cosas que estaban pasando, no de esa manera... pero supongo que las cosas no se pueden planear así a la ligera y yo no merecía que las cosas se manejaran de la forma más tranquila, porque de verdad necesitaba que esto pasará, para abrir los ojos y salir del sueño...
Está inclinado, mirando al suelo abochornado. Es la primera vez que se ve tan indefenso y trastornado, me incomoda, me atemoriza.
Bebe de su cerveza y de repente se pone erguido, con color y expectante. Sigue hablando.
—Te preguntarás como conocí a Ellen, te lo diré , no quiero que estés enfadada con ella y no lo digo para defenderla pero su pasado es bastante trastornado, lo suficiente para que ella sea así...
Respiro profundamente, sé que no la está defendiendo pero de verdad me molesta que él sepa lo más mínimo de ella, que él sepa los secretos que Ellen tal vez le confió, su pasado, incluso su futuro. Me molestaba porque si ella hizo eso es porque Jack le dio su confianza ¿Qué cosas tendrán escondidos ellos? ¿Qué secretos? ¿Qué intimidades?
—Quita esa cara, ya te dije que no la estoy defendiendo—Me lo asegura convencido, eso no termina con mis inseguridades— Ellen desde muy pequeña sufrió abusos de... de un amigo de la familia...cuando digo pequeña me refiero a menos de seis años, ella siguió con esta tortura hasta los catorce...sus padres no hicieron nada cuando lo supieron...
—¿Y eso por qué?—Pregunto confundida, ¿qué clase de padres harían tal cosa?
El rostro de Jack se endurece, aprieta la mandibula pero aun así me ve con ojos llenos de amor e imploración.
—El monstruo que abusaba de Ellen era el dueño del restaurante en el que el padre de ella trabajaba, de allí sacaban todos los ingresos que su familia necesitaba, comida, estudios y lo necesario para llevar una vida aunque solo fuese un poco digna, ellos no se podían permitir acabar con esa fuente de dinero, es por eso que se quedaron callados, ni una palabra a las autoridades, ni una palabra entre ellos mismos. Mandaron a Ellen donde su tía aquí en Los Angeles donde termino sus estudios y empezó a trabajar en el club, es allí donde la conocí gracias a Nate.
Estúpido Nate...
—Al principio fuimos grandes amigos, ella fue la primera a la que le conté sobre ti. Sonará casi una mentira pero ella me dio consejos para conquistarte—Hace una pausa y logra reírse con alegría—me decía que contestarte en los mensajes y qué hacer cuando venías los primeros fines de semana...fue una gran amiga porque sin importar mi dinero ella no estaba detrás de el cómo algunos colegas que han pasado con el tiempo, me dio confianza y empeño y eso por eso que yo le pedí saber su pasado.
Se levantó del sillón y camino hacia el ventanal, tal vez estaba esperando que dijera algo de lo que él estaba confesando pero la verdad no podía, mi estómago estaba hundido y mi lengua cortada, de pronto ya no quería saber nada más, tome un largo sorbo de vino y me a recosté en el sillón, una jaqueca prometía venir y quería estar lista para cuando se difundiera en mi cabeza, el siguió hablando.
—Me lo conto todo Jade, no se saltó ningún detalle, llorando me imploro que no dejara de verla a como estaba acostumbrada, decidí ayudarla como lo haría con cualquier amigo, compre anónimamente el restaurante y metí a ese idiota en la cárcel, sus padres siguen trabajando ahí y francamente no me dieron ganas de sacarlos adelante, no después de lo que le hicieron a su propia hija...cada mes visitaba el lugar con Ellen para que ella viera a sus padres. Pero eso no importa, supongo que quieres saber cómo empezó la relación.
No fue una pregunta, y si lo hubiese sido yo me habría negado mil veces.
—Imagino que pensó que tenia que pagarte de alguna manera—Respondo sin ganas.—y como no tiene dinero o alguna otra cosa que haga bien, te ofreció sexo y tú aceptaste ¡Felicidades Jack! ¡No me has hecho hacerme sentir bien, solo has empeorado las cosas!
Me levante rápidamente y huí hasta el baño que estaba a simple vista. Cerré la puerta con fuerza y lloré.
Lloré en silencio por lo que fueron varios minutos.
Nada y todo tenía sentido.
Jack toco a la puerta cinco veces pausadamente, susurrando me dijo que abriera la puerta y yo le obedecí. Afuera él se encontraba con el pelo despeinado y con las mejillas rosadas, en cuanto salgo él me besa con fuerza.
Sujeta mi nuca y no me deja apartar, ni siquiera cuando necesito respirar, no me suelta. No quiero que lo haga.
Cuando se quita me coge de la mejilla y me da un besito corto en los labios.
—Te amo, te amo más que a nada, te amo más de lo que creí que podía amar a alguien, te amé incluso sabiendo que estábamos lejos y que esto era casi imposible, te amo y contra el amor no se puede hacer nada. Y te extraño, más de lo que alguna vez me extrañaras. Y te añoro y te espero todos los días, ahora mismo, quiero lo de antes, nuestra vida antes de esto. Por favor Jade, dame una oportunidad, solo una y te prometo que no la desperdiciare, la cuidaré con mi vida...
Con mi última respiración exhale todo el aire de mis pulmones, estas palabras hacían ciertamente que mi corazón se derritiera en menos de segundos.
Entonces de la nada me dí cuenta.
Yo tambien lo amaba.
Y con los ojos llorosos, en mi cabeza llena de cosas sin sentido y revueltas encontre mil sentimientos, pero sobretodo encontre los pensamientos y recuerdos que me ayudaron a tomar la decision.
Me acerque a él y lo bese, pude ver una sonrisa en sus labios, estaba claro que no se habia cuenta de que aquello era una despedida.
Antes de que pudiese reaccionar fui hacia la sala de estar y cogí las llaves del coche, abrí la puerta y mire hacia atras, lo vi con una mirada de desesperacion , con una mirada perdida, la mirada que hace unas semanas yo misma tenia. Sali de alli, y me pare para respirar. Claro que lo habia perdonado por engañarme con Ellen, lo amo demasiado como para no hacerlo, pero no le habia perdonado por hacerme sentir como lo hizo, le amo algo menos que a mi misma.
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Rejected. | Jack Gilinsky |
Fiksi Penggemar❝Lo rechacé todo por el, el me rechazó por todas; y eso, si que duele.❞ All right reserved 2015.