Afraid of love (Harry Styles)

Capítulo 26: Eres como una estufa

NARRA MARÍA

Pasamos toda la tarde en el jardín unos descansando, otros haciendo el idiota. A la hora de cenar, me puse a preparar la cena para todos, pero cuando iba a empezar apareció Harry por la cocina.

-¿Qué haces aquí?-pregunté

-Vengo ayudarte, que es comida para unos cuantos y así acabas antes que haciéndolo tu sola.

-Gracias, Harry.

-Déjate de gracias y vamos manos a la obra. ¿Qué tengo que hacer?-me contestó arremangándose.

-Vaaaaaleeeee. Pues a ver, vete pelando esas patatas de ahí y las lavas, después te digo lo que tienes que hacer.

Mientras Harry pelaba las patatas, yo fui haciendo la salsa para el pollo. Terminé y acabé de ayudar a Harry con las patatas.

-¿Ahora qué tengo que hacer?

-Ahora hay que cortar unas dos o tres patatas en rodajas para ponerlas con el pollo a asar y el resto cortarlas como cuando hacemos patatas fritas, pero como ya he acabado con mi parte, te ayudo.

-¿Entonces qué hago?-quiso saber.

-Enciende la freidora y corta las patatas para freír, yo voy a cortar las que van con el pollo.

-Vale.

-Yo ya he acabado, voy a coger las fuentes para las ensaladas y las patatas.

Fui hasta el mueble en el que estaban las fuentes pero era demasiado alto y yo no llegaba.

-Harry...

-Ya lo cojo yo-dijo en mi oído. Puso una mano en mi cintura y con la otra, cogió lo que yo no podía.-Aquí tienes.

-Gracias

-Ya te he dicho que no me las des, pero deberías crecer un poco, puede que no siempre pueda ayudarte yo, o el chico con el que vayas a pasar el resto de tu vida.

Esas palabras me hicieron pensar, e imaginarme mi vida con Luke, pero no se parecía a lo que quería ni de lejos. Me la imaginé también con Harry y eso ya se parecía más a lo que siempre quise.

-María!

-¿Eh? ¿Qué?

-Te has quedado pillada.

-Ah, ya, estaba pensando.

-¿En qué pensabas?

-Algún día te lo contaré, ahora vamos a acabar con esto, que los demás tendrán hambre.

Acabamos de cortar las patatas y mientras se freían unas, Harry me ayudó a colocar las otras en la bandeja para poner encima el pollo. Lo metimos al horno y hasta que estuvo listo, estuvimos preparando unas ensaladas para acompañar y sacamos las patatas de la freidora para ponerlas en una fuente.

-¿Crees que será comida suficiente?-le pregunté a Harry dudando.

-Yo creo que sí, aunque Niall va a intentar acabar con las existencias antes de que nos dé tiempo a servirnos a los demás hahaha

-Tienes razón. Bueno, esto creo que ya está-dije tras escuchar el sonido que hacía el horno cuando ya estaba la comida lista.

Sacamos el pollo del horno y entre los dos sacamos todo a la mesa del jardín.

-Que buena pinta tiene esto, María.

-Gracias, Niall, pero te esperas como todos, que ya veo o que va a pasar con la comida como no tengamos cuidado.

-María, huele genial. En serio, me acabas de recordar cuando estamos en casa y cocinas tu.

-Anda, Hel, no digas bobadas.