Afraid of love (Harry Styles)

Capítulo 24: ¿En qué piensas?

NARRA NAT

Acabamos de comer y nos pusimos a ver la tele. Al cabo de media hora y viendo que los demás aún no llegaban, cogimos nuestras cosas y salimos de casa para ir al lago. Fuimos todo el camino de la mano y entre besos y risas llegamos donde estaban los demás. Las chicas estaban sentadas en mantas bajo un árbol mientras los chicos jugaban a subirse unos a otros e intentar tirarse. Nos acercamos a las chicas y nos sentamos junto a ellas.

-Muy buenas
-¿Qué hacéis aquí?- Preguntó María.
-¿Liam, tu no estabas enfermo?
-Si, de amor por Nat, pero eso creo que ha quedado zanjado.-Dijo mientras me miraba con una sonrisa y me guiñaba un ojo.
-AAAAAAHHHHHH ¿estáis juntos?-Preguntó esta vez Hel emocionada.
-Más o menos
-¿Eso qué significa?
-Pues que estamos intentándolo a ver si sale bien.
-Me alegro mucho por vosotros.
-Gracias, Bea. Bueno, yo me voy al agua con los chicos, os dejo aquí solas.
-Vale.

Me dio un beso en los labios, otro en la mejilla a sus hermanas y tras quitarse la camiseta y las zapatillas se metió al agua con los chicos, los cuales a los pocos minutos empezaron a aplaudirle como sabiendo que iba a pasar algo entre nosotros.

-Bueno, Nat-Me dijo Bea
-¿Qué pasa?
-Creo que tienes algo que contarnos.
-Bueno, está bien.

Les conté absolutamente todo lo que pasó con Liam, la manera en la que me dijo que me quería, todo. Y durante todo mi relato, no pude evitar mirar al agua para ver al chico que hace mi corazón latir más rápido de lo normal, así como tampoco pude evitar que una sonrisa apareciera en mi cara y no se borrara en todo el día. Cuando empezaba a anochecer, volvimos todos juntos a casa. Pedimos comida china y una vez nos la trajeron salimos al jardín para sentarnos en la enorme mesa que allí había y disfrutar de la cena.

-Entonces, Nat, somos cuñados.
-¿Qué dices, Louis? En serio, se te va
-En realidad tiene razón, amor- me dijo Liam- al yo estar contigo y el con Hel, sois familia.
-¡¿EN SERIO?! Entonces lo nuestro se ha acabado.

La cara de Liam al decir eso fue todo un cuadro.

-Es broma, amor- le dije antes de darle un beso.
-Más te vale, o mataré a Tomlinson.
-Liam, a mi novio no le vas a hacer nada.-dijo Hel
-Haya paz-intervino María- parecéis niños de preescolar.

Dejamos de pelear y acabamos de cenar. Prendimos una hoguera para poder estar allí más rato cuando fuera más tarde y María y Harry entraron a por unas mantas para poder taparnos. Nos sentamos todos alrededor del fuego y estuvimos contando historias y anécdotas que habíamos vivido a lo largo de los años, que nos ayudaban a conocernos más entre nosotros.

-Tengo sueño- dijo María bostezando.
-Apóyate en mi hombro y duerme, anda.
-No quiero molestarte, Harry
-No me molestas, te lo digo por algo.

Sin pensárselo dos veces, María se recostó en el hombro de su mejor amigo, quedándose dormida en escasos minutos. Sigo pensando que algún día no tardando demasiado estos dos van a acabar juntos, pero son demasiado tontos como para darse cuenta de las cosas. Un día de estos, mi amiga va a acabar con Luke y Harry se va a lamentar por lo tonto que está siendo. Pero bueno, como se dice; si dos personas están destinadas a estar juntas, pase lo que pase, acabarán juntas.

-Chicos, yo también tengo sueño- dijo Harry- me voy a la cama y me llevo a María conmigo.
-Buenas noches, Harry

Cogió a María como si de una princesa se tratase y desaparecieron por la puerta que comunicaba el jardín y el salón. Apoyé yo también mi cabeza en el hombro de Liam, el cual miró hacia mi con una sonrisa.

-¿Pasa algo, Nat?
-Para nada, simplemente estoy un poco cansada.-dije mientras miraba hacia el lugar por el que habían desaparecido María y Harry.
-¿En qué piensas?
-En que María y Harry van a acabar juntos no tardando demasiado.
-¿En serio piensas eso?
-Si, ¿por qué?
-Esta tarde, cuando estábamos en el agua, estuve hablando lo mismo con los chicos y Harry no paraba de decir que dejásemos de decir tonterías, que eran mejores amigos y ya, pero yo se que ambos quieren ser algo más que eso pero son demasiado tontos para admitirlo.
-Pienso exactamente lo mismo, pero añadiéndole que tu hermana va a acabar con otro chico antes de que Harry le diga lo que siente.

Seguimos allí un rato más hasta que decidimos subir todos a dormir. Nos fuimos a las habitaciones tal y como estábamos repartidos: Harry y María, Louis y Hel, Liam y yo, Blanca y Bea y Niall y Louis. Nos dimos las buenas noches en el pasillo y entramos cada uno en nuestra habitación. Liam y yo nos pusimos el pijama y nos metimos en la cama.

-Liam, ¿puedes abrazarme?
-Claro.-dijo mientras me abrazaba y entrelazaba nuestras piernas.
-Dios, estás congelada.
-Lo se, y me duele mucho la cabeza.

Acercó sus labios a mi frente y notó que estaba ardiendo.

-Amor, creo que tienes fiebre. Dame un minuto que bajo a prepararte algo.
-Vale, aquí te espero.

Salió de la habitación y no tardó en volver con una taza llena de chocolate caliente y un jarabe para la fiebre.

-Tómatelo ahora que está calentito, no dejes que se enfríe. Yo voy al baño vengo ahora.
-Ya estoy aquí. Traje una toalla húmeda para ponértela en la frente y que ayude a bajarte la fiebre.
-Gracias Liam.
-Nat, eres mi novia. Malo sería que no me preocupase por ti.
-Tienes razón, pero aún así, gracias.
-Gracias a ti por aparecer en mi vida y permitirme el honor de ser mi novia. Te quiero, Nat.
-Te quiero Liam.

Me acabé el chocolate y me tomé la pastilla. Nos tumbamos en la cama de nuevo y Liam puso la toalla en mi frente. Me dio un beso en la mejilla y poco a poco ambos fuimos cayendo en los brazos de Morfeo.
Después de despertarme por lo menos 8 veces en toda la noche, pude ver el sol entrando por la ventana iluminando toda la habitación. Miré a Liam y seguía dormido con su angelical cara. Me levanté y fui al baño que había en la habitación. Me di una ducha rápida y me enrollé en una toalla. Salí a la habitación y me dirigí al armario tras ver que Liam seguía en la cama.

-No es por nada, pero como sigas así mucho tiempo más, no me voy a poder controlar.
-Oh, vamos, cállate.
-Entonces ponte rápido la ropa porque soy lento para levantarme pero te juro que ahora mismo correría una maratón detrás de ti.

Me vestí rápidamente y fui hasta la cama. Me senté al lado de Liam y le di un beso en los labios.

-¿Cómo estás hoy?
-Mucho mejor.
-Me alegro mucho, amor.
-Gracias. ¿Bajamos a desayunar?
-Por supuesto.

Bajamos a la cocina y allí estaban Harry y María.

-Buenos días.-Me acerqué a María y le di un abrazo.
-¿Y esta efusividad?
-No se, supongo que estoy feliz. Estoy en una casa preciosa, con un lago, todos mis amigos están conmigo, por no mencionar a mi recién estrenado y perfecto novio. No puede ser mejor.
-Venga ya, Nat hahaha
-Que es en serio, jooo.
-Anda, no seas tonta.

En ese momento un teléfono empezó a sonar. Fui a buscarlo y resultó ser el de María. Miré la pantalla y no pude evitar poner los ojos en blanco.

-María, te reclaman.
-¿Quién es?
-Adivínalo.

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Buenas.

Esta tarde dije que no iba a subir, pero gracias a ciertas personas que hacen que sonría, me vino la inspiración y pude escribir aunque el capítulo ha quedado un poco caca, por lo que os pido perdón.

Esta semana os voy a pedir 7 votos ya que he subido tarde pero espero que los superéis bastante (una de ciega en algo que no va a pasar bc me ignoráis. Lo se...)

Dicho esto. Hasta el finde 😘😱