Mi novia neko [Yuri]

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Mei.

Duele. Duele mucho el hecho de que ella me ignore, siento que mi corazón se oprime cuando deliberadamente lo hace.

Planee algo que haría ella me vuelva a hablar. Básicamente, me quedaría hasta el final de la escuela y la obligaré a decirme el porqué no me habla.

—¡Esta decidido!
Dije en voz alta alzando la mano izquierda.
Me estaba preparando para ir al día siguiente a la escuela. Mañana la enfrentaré.

—Aunque...— dije posando mi mano en mi mentón. — estoy segura de que está molesta por eso que hicimos. La cagué, la cagué mucho. — dije golpeando la pared.

Fuí al comedor a cenar algo o si acaso tomar un poco de agua... O ese era mi plan, hasta que alguien tocó a mi puerta.

—¿Quién es?— me acerque lentamente a la puerta.
—S-soy yo— me quedé en shock. Conocía ese vocecita. Era ella, era Flor.

Abrí la puerta y ella se veía demasiado nerviosa.

—Pasa— me apresure a decir. —¿Quieres agua o algún jugo?— también estaba nerviosa.
—N-no... Ehh... Vine solo para verte— estaba roja— Pe-pero si quiere me voy.— agachó la vista.
—No, está bien. De hecho en la escuela quería con todas mis ganas hablarte, pero me ignoras...—solté una lágrima—¿Porqué me ignoras?— me derrumbé allí mismo— me duele, me duele sentir algo que es casi imposible— lloré.
—No sé qué decirte, tal vez es algo pronto a parte no se podrá por que ambas somos mujeres. Es imposible. Perdón— me abrazó y se fue. Así como se fueron mis sentimientos por ella.

Esa noche no pude dormir, me sentía terrible y no pude dormir.

A la mañana siguiente tenía ojeras y mi ojos estaba súper hinchados. Aún tenía la conversación que tuve con ella en la cabeza. Me contenía de llorar en la escuela y me pone incómoda que me veas así. Creo que ella nunca sentirá lo mismo que yo.

***

Terminaron las primeras clases y llegó la hora del descanso, me fuí a un lugar solitario no quería ver a nadie; una vez más brotaron lágrimas.

—Demonios— grité a viva voz.
Tal vez, ella ya te ha novio o gusta de alguien más, pero ese pensamiento hace que no pecho arda.

—Hola, preciosa— levanté mi cabeza
—¿Quién eres?—sorbi mi nariz.
—Me llamo Ana— no quitaba de su rostro esa sonrisa socarrona que me produce náuseas. —Quiero que seamos amigas—
—Gracias, pero paso— me levanté del sitio y empecé a caminar hacia el salón.

Este día es tan malo.

Este día no es mí día.

Hola, amiguitos ¿Cómo están?  Disculpen la tardanza, pero estuve ocupado el fin de semana pero, hoy toca capítulo y el próximo sábado tampoco subiré capítulo, posiblemente lo suba el jueves o el viernes o el lunes;)

Que tengan un buena muy buena semana:)