M U T E |H.S.|

Capítulo 31.

(FINAL) 

Nuestro beso por supuesto calló todos nuestros miedos y dudas, yo lo amo y él a mi. Mi corazón latió con fuerza y con alegría golpeó contra mi pecho. Las manos de Harry se enredaron en mi cabello, como si no quisiera despegarse de mi, nunca. Me sostuve con una mano apoyada en la cama y la otra en el hombro de Harry. Pude sentir una lágrima escapándose entre nuestros labios, pero no quise alejarme de él. Harry suspiró y se separó unos centímetros para tomar aire, aproveché para tomar aire yo también, abrí mis ojos y lo miré, estaba allí, tratando de secarse la última lágrima, llevé lentamente mi mano hasta su mejilla y lo hice mirarme. 

—¿Sabes lo fácil que todo esto hubiera sido si tan solo nos hubiéramos dejado las cosas claras desde el principio? Y... ¿Sabes también lo mucho que me hirió que creyeras que yo iba a estar mejor sin ti? — le suelto, porque realmente hirió mi orgullo que pasara por su cabeza que yo realmente iba a desligarme y dejarlo en este estado, que iba a aprovechar la "oportunidad" para largarme lejos de él.

Él relame sus labios y y me mira con tristeza. Su mano acaricia mi mejilla mientras parece haber una guerra en su interior. No dice nada ni hace esfuerzo por moverse y hacerme saber algo. 

Finalmente me siento tranquila. Esperaba que acabara todo esto, es demasiado ridículo y me doy cuenta que tal vez, yo tampoco actué de la manera en la que debía. Ambos fuimos unos inmaduros, estábamos sufriendo por el otro pero teníamos orgullo, finalmente yo me aguanté el mío y vine a verlo, y aunque al principio creí que no había servido de nada, creo que terminamos bien. 

  — ¿Qué crees que va a pasar ahora, entonces?— le pregunto.  

Harry me mira pensativo por unos segundos hasta que suspira y aleja sus manos de mi cabello.

-¿Tú qué quieres que suceda?- 

Esta vez, yo me quedo pensativa. Yo sé lo que quiero.

— Quiero estar contigo.— le susurro, completamente segura de mis palabras. 

Lo quiero, no es un secreto, lo  amo, lo sé. Se lo había dicho antes, cuando él podía escucharme pero no responderme, los recuerdos de esos días danzaron en mi cabeza, no me importaba, todo lo que tuvimos que pasar solo significaba que debíamos luchar por nosotros, y lo hacemos, lo estamos haciendo. En ese momento me hago una promesa; Por más difícil que sea la batalla, no voy a abandonar. 

Harry se acerca a mis labios y deja un beso dulce en la comisura de mis labios. Lo miro cuando se aleja. 

-Quédate.- señala. Yo sonrío y asiento mientras acaricio su mejilla. 

  — Me quedaré el tiempo que tú quieras... Que espero que sea mucho porque no pienso irme pronto.— me río. 

-¿A dónde iremos en nuestro próximo viaje?- sonríe cambiando de tema. 

Me río y muerdo mi labio, no puedo evitar que mis ojos se llenen de lágrimas al recordar la angustia y la presión en mi pecho después del accidente. Sufrí tanto, no quiero volver a sentirme del modo en que lo hice durante ese tiempo, es doloroso.

Harry acaricia mi mejilla y me mira con ternura, su mano es cálida en mi mejilla fría, su pulgar da caricias circulares y sus ojos me observan con profundidad, parece estudiar cada detalle de mi rostro, lo que me hace sentir calor en mis mejillas. 

— No me voy a rendir con nosotros, Harry.— le susurro. Él encuentra mis ojos y me mira fijamente, puedo ver como su rostro se ilumina y me muestra una sonrisa sincera. 

-No quiero que lo hagas.

Sin perder más tiempo, me lanzo a sus labios de nuevo, mi corazón corre deprisa y feliz, mi estómago sufre estremecimientos, esa sensación ha vuelto, la que me hace sentir segura, a salvo.