Capítulo 16.

3.2K 218 79
                                        

Anne y el Doctor volvieron a la habitación, provocando que Harry y yo nos separemos. Pude ver a Harry soltar por primera vez, una lágrima y mi corazón se estrujo dentro de mi pecho. Mis ojos se cristalizaron también. Me separé un poco para darle espacio y él limpió sus ojos de inmediato, borrando todo rastro de llanto.

— Esto es todo por hoy, Harry. Ya pueden irse.— habla el Doctor. 

Lentamente nos levantamos y caminamos cabizbajos a la salida. Harry se abraza de su madre y sale junto a ella. Yo les sigo de cerca.

No sé qué decir para animarlo, debería decir algo pero no encuentro palabras en este momento.

Lo siento distante en el camino a casa, sé que no está pasando por su mejor día pero su indiferencia hacia mí me lastima. Me siento como si no estuviera presente, me hace sentirme inútil.

Muerdo mi labio con fuerza, presionandolo contra mis dientes y mis dedos juegan entre sí, con incomodidad. Maldición, quiero hacer o decir algo, pero temo arruinar más el momento. ¿Qué digo? Ya le he hecho saber que cuenta conmigo y que estaré aquí para él, no necesito repetirselo. Suelto un suspiro, rendida, no sé qué más hacer y estoy segura que Harry no tiene ganas de escucharme, quizá solo quiere llegar a su casa, tirarse en su cama y dormir toda la tarde, no saber más del mundo por un raro. Al menos eso es lo que yo haría.

Giro mi cabeza hacía la ventanilla, rendida a no decir nada más cuando algo cálido cubre mi mano. Lentamente vuelvo mi mirada, Harry ha puesto su mano sobre la mía, no me mira, pero la mantiene allí. Doy vuelta a mi mano para entrelazar nuestros dedos, y noto como en su mejilla aparece apenas visible un hoyuelo, con una casi inexistente sonrisa. Al menos sé que sabe que estoy aquí, y estaré pase lo que pase.

Antes de salir del auto le doy un beso en la mejilla y entonces bajo, quedándome al borde de la banqueta, despidiendome de ambos con un movimiento de mano. El coche se aleja y yo entro a mi casa.

Trato de no pensar mucho en los acontecimientos de hoy, solo fue el primer día, y no lo hizo tan mal, aunque yo no soy quién para dar un diagnóstico, pero me preocupó un poco el rostro del Doctor. Igual envío un mensaje a Harry, corto pero inspirador.

"Lo sacaste de google?" "Bromeo, te lo agradezco :)"

Sonrío y dejo mi teléfono a un lado. Mamá llega tarde hoy, así que no la esperamos para cenar, y cada quién come en su habitación. Me tiro boca arriba en mi cama y suspiro. Me pregunto cuando será la próxima sesión, y si Harry querrá que lo acompañe. Mi teléfono vibra y la pantalla parpadea. Estiro perezosamente mi mano para tomar el aparato y mirarlo, arrugo mi frente y le bajo el brillo que cala en mis ojos. Abro el mensaje que he recibido del nombre de "Idiota" y leo por encima.

Mis ojos se abren y de golpe me siento en la cama.

— ¿¡Qué!?— no puedo evitar gritar en mi cuarto.

Vuelvo a releer el mensaje y casi no lo creo. Estúpido, habíamos quedado en que el viernes, estoy feliz por él pero imbécil, yo quería espiarlos con Harry desde detrás de un árbol. Al segundo, me llegó un mensaje de Alice, rápidamente abrí el mensaje. Dios, ahora sí lo creo, por un momento se me había cruzado por la cabeza que Ian estaba tratando de hacerme una broma. Le contesto primero a Alice, y después le envío una respuesta a Ian. Emocionada por mis amigos, voy a los mensajes de Harry, y le envío varios seguidos para que responda rápido. Después de varios "Harry, Harry, Harry, Harry, Harry" Finalmente me responde.

"Cielos, Grace, déjame terminar de ducharme" me río antes de responderle.

"No, esto es importante. EN SERIO"

"No me hables en mayúsculas, interrumpes mi música."

"Harry, maldita sea, cierra la llave un segundo. Esto es MUY IMPORTANTE."

M U T E |H.S.|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora