Mis pequeños traviesos.

Capítulo 17.

Taemin había estado encerrado gran parte del día en el taller, saliendo sólo para preparar el almuerzo y recibir a sus hijos cuando estos llegaran, así fue la última semana, y más de una vez tuvo a su esposo en la puerta del taller recordándole que la era hora de cenar o que no debería exigirse demasiado porque eso podría ser malo para el bebé, además de que Min Ho le había dicho que necesitaban una cita médica para saber que todo estaba en orden con el embarazado, una cita que Taemin se había negado a hacer diciendo que no creía que fuera necesario hacerlo antes de la siguiente cita agenda.

Otra de las cosas que sucedió durante esa semana y que no era común para la familia, fue que Hae Woo siempre permaneciera en casa, ya que el adolescente así sus padres le dijeran que no tenía permiso para salir lo hacía si él quería, él era así todo el tiempo, o bueno, había sido de esa manera hasta una semana atrás, antes de que le dijera a Taemin que estaba embarazado, porque ahora estaba gran parte del día encerrado en su habitación, saliendo sólo para los momentos necesarios de ir al instituto, o bajar a comer, aunque seguía evitando los momentos en donde estaba toda la familia reunida ya que todavía no se creía preparado para enfrentar a su papá Min Ho, temía que éste descubriera su secreto.

Taemin escuchó como Hyung Su y Na Na gritaban mientras mantenían una partida de algún videojuego, mientras Se Hee le ayudaba a Min Ho en la cocina, porque ese había sido otro de los días que estuvo encerrado en el taller, y su esposo se había hecho cargo de la cena, aunque fue escucharlo como hacía la llamada a un restaurante cercano con servicio a domicilio, a lo que Taemin no se opuso y sólo subió a bañarse después de haber saludado a su esposo y a sus hijos, aunque sabía que en la planta inferior faltaba alguien más, quien ahora vivía dentro de su propia recámara.

Tomó un baño rápido antes de estar afuera de su habitación otra vez, dirigiéndose a la de su hijo, mientras todavía podía escuchar a Hyung Su y Na Na pelear verbalmente sobre algo de que el joven hubiera hecho trampa, así como la risa de Se Hee y Min Ho por algo que no entendía llegaba desde el piso inferior. Taemin golpeó suavemente la puerta de su hijo susurrándole que era él, porque como su hijo evadía a Min Ho era bastante evidente, él creía entenderlo, mucho más cuando llegaba a recordarse años atrás él teniendo miedo de que su padre se enterara del embarazo, pero ellos eran diferentes. Min Ho no iba a azotarlo porque se hubiera embarazado, aunque tampoco podría asegurar que iba a estar feliz, porque ni siquiera Taemin lo estuvo, porque durante esa semana desde que se enteró sólo estaba intentando comprender a su hijo, y darle su tiempo para decirles todo acerca del bebé que esperaba, porque el castaño quería también saber quién era el padre del bebé.

La voz de Hae Woo permitiéndole entrar en la habitación fue débil, pero Taemin comenzaba a acostumbrarse a escucharlo así después de esa última semana.

Al entrar en la habitación pudo ver a Hae Woo sentado en el silla que le pertenecía a su escritorio, estaba junto a la ventana que se mantenía abierta un poco para permitir una suave brisa entrar a la recámara. Hae Woo abrazaba sus piernas mientras apoyaba su mejilla sobre las rodillas viendo hacia la calle. ¿En dónde había quedado su niño rebelde? Fue lo que Taemin no pudo evitar preguntarse al ver a su hijo de esa manera, porque parecía que con el paso de los días Hae Woo iba apagándose, aunque ya no lloraba como cuando se enteró de su embarazo, porque el mismo día que Taemin lo hizo, el adolescente también lo había hecho, acababa de hacerse la prueba de embarazo cuando fue descubierto por su papá mientras vomitaba.

—Bebé, ¿cómo estás? —preguntó Taemin acercándose.

—Bien.

Las respuestas del adolescente eran cortas y en las dos únicas veces que Taemin intentó saber quién era el papá del bebé de su hijo, el adolescente se había quedado en silencio, haciéndole asumir que sería así todo el tiempo que él se lo preguntase, y por eso tenía que esperar a que Hae Woo fuera quien estuviera preparado para decírselo. Taemin se apoyó en el escritorio mientras veía a Hae Woo y antes de que comenzara a hablar el timbre de la casa sonó, recordándole a Taemin que Min Ho había pedido la comida de esa noche.