Mis pequeños traviesos.

Capítulo 25.

Min Ho levantó la cabeza al escuchar el balbuceó a su alrededor, así como pasos constantes, viendo a Taemin dando vueltas con un bebé en sus brazos, no necesitó levantarse de la cama para saber quién era, el color de la manta que lo cubría lo dejaba claro, porque al parecer Hae Woo había tomado una manía por comprar cosas rosas para su hija, y de la misma manera Sun Hyun, quien había hecho varios regalos para Rachael pero sus visitas comenzaron a disminuir considerablemente cuando se dio cuenta que nadie lo quería en la casa, y que siempre habría un ceño fruncido para él.

Sabía que no era el mejor comportamiento que podían tener, pero había lastimado a uno de sus hijos y ya ni siquiera el tema del embarazo, sino que Hae Woo parecía haber cambiado demasiado, no sólo porque estaba esforzándose por cuidar de Rachael, sino que era como si hubiesen roto algo dentro de él, y Min Ho se sentía impotente de no poder hacer algo por su hijo, por no haber podido protegerlo de enamorarse de alguien como Sun Hyun, había pensado que si tal vez hubiese cortado el contacto con él como con la mayoría de sus amistades no tan cercanas lo hizo nada habría pasado, aunque la pequeña Rachael era una bendición en su familia de la misma manera que Tae Ho.

—¿Está despierta? —preguntó sentándose.

—Sí, está comiendo —la voz de su esposo sonaba suave cuando también se sentó en la cama —Hae Woo está dormido —Taemin sonrió —la ha cuidado todo el día.

Todo el día que no se había alejado de ella más de lo necesario, incluso velando su sueño, o dándole de comer cuando necesitaba y no queriendo huir bajo la excusa de "no tengo leche, papi ¿puedes darle de comer?" o "le prepararé fórmula porque no tengo leche", eran las excusas que más había usado desde que la bebé nació, y Taemin no había tenido problema para cuidarla, al igual que a su pequeño Tae Ho, había tomado la responsabilidad de los dos bebés aunque a veces sí recibía ayuda de Hae Woo, así como había tenido que enseñarle como cambiar el pañal de su hija, o a como bañarlo, cosas en las que Taemin no tenía problema en hacerlo, no si veía a poco a poco a su hijo ser más apegado a la bebé.

—¿Quieres que cuando termine de comer la duerma yo? —Min Ho se acercó al otro lado de la cama y se posó detrás de su esposo.

—Uh... —Taemin apoyó su espalda en el pecho de Min Ho mientras éste sujetaba su cintura —¿harías eso por mí?

—Sí —besó su mejilla —cuidar a nuestros hijos tú solo no es fácil.

—Tengo la ayuda de Hae Woo.

—Otro bebé.

Taemin sonrió al sentir como su esposo continuaba besando su mejilla así como por la forma en que se refería a Rachael, porque ella se había convertido en su hija en secreto, porque ellos solían llamarla su hija cuando Hae Woo no estaba cerca, no querían que sintiera que su derecho de padre le estaba siendo arrebatado, pero ellos tenían tanto amor para los bebés, como para sus hijos más grandes; simplemente la habían amado desde el primer momento que la tuvieron en sus brazos.

Lee la colocó sobre su pecho y le dio suaves golpecitos en su espalda para sacarle los gases mientras podía sentir los dedos de Min Ho en sus hombros dándole un masaje suave, y casi había estado por darle a la bebé para que la durmiera cuando escuchó el llanto de Tae Ho, su otro hijo que dormía en la habitación que prepararon para él, aunque ahora la compartía con Rachael, y era muy común que cuando el uno se despertaba también lo hiciera el otro por el llanto del otro bebé y era difícil calmar a los dos estando una sola persona, así había empezado Hae Woo a estar más presente en la vida de su hija al darse cuenta de lo complicado que era para su papá el hacerse cargo él solo.