➳ Written by GaabyKookie ♡
La vida de SeungCheol es un verdadero desastre pero su mala suerte cambiará cuando al abrir la puerta de su casa se encuentre con una caja y un pequeño gatito en su interior.
☑ Historia JiCheol.
☑ Hybrid!AU. 🐱🎀
☑ Conteni...
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Despertó con el rostro hinchado por haberse quedado dormido llorando, sus ojos dolían, apenas podía abrirlos pero la realidad cayó sobre sus hombros cuando encontró todo tal cual como lo había dejado anoche.
Se sentó en la cama y de pronto un desagradable olor a quemado lo colocó en alerta.
JiHoon.
Se colocó los zapatos y afirmándose en las paredes se dirigió a la cocina lo más rápido que pudo.
Sus ojos se abrieron desmesuradamente y sus labios se separaron ante la imagen frente a él, jamás había visto tanto desorden, es que todo estaba fuera de su lugar; tazas, platos, vasos, cucharones, todo.
JiHoon estaba con una sartén en sus manos, friendo un montón de comida que no tenía lógica alguna.
Lo peor es que estaba completamente desnudo, de nuevo, movió su cola y sus orejas bajaron cuando su mirada se cruzó con la de SeungCheol.
—¿Qué se supone que estás haciendo? —Entró a la cocina y lo primero que pisó fue una cáscara de huevo seguido por una de banana.
Él se había dormido con el estómago vacío porque lo último que compró con el dinero que le quedaba fue la caja de leche que se bebió JiHoon.
No tenía frutas, verduras, huevos, ni nada de lo que el híbrido tenía sobre las encimeras.
—¿De dónde has sacado todo esto? —Habló SeungCheol mirando a su alrededor.
JiHoon se quedó en silencio pensando en alguna mentira para decir pero no se le ocurrió ninguna —Hay una tienda cerca de aquí... —SeungCheol inmediatamente lo miró levantando las cejas —La señora no me estaba mirando, no se ha dado cuenta.
—¿Lo has robado? —Preguntó espantando —¿Estás loco?
—Desperté con hambre y supuse que tú estarías igual —Intentó justificarse —Además no había nada para preparar aquí en la cocina.
Los ojos de SeungCheol no se quedaban quietos, bajaban al cuerpo desnudo del híbrido y era molesto, se sacó la camisa del pijama y se la ofreció —Póntela.
—Debe estar sudada y además es fea —JiHoon negó con la cabeza bajando sus orejitas.
—Sólo póntela por favor —Suspiró cansado y el rubio la aceptó aunque no quería hacerlo.
No fue tan malo como pensaba, tenía el aroma de su dueño, aquel que tranquilizó a su cuerpo toda la noche anterior mientras el cielo lloraba.
—Continua con esto si quieres —SeungCheol miró los platos de comida que estaban supuestamente listos, le podían quitar el apetito aunque no hubiese comido nada por tres semanas, eran espantosos —Yo iré a pagar todo esto.
