CAMILA.

35- Ángel.

- no quiero más niños todavía con mi bebe estamos bien, así que voy a sacarte una cita con mi ginecóloga para que comiences a planificar, y no pienso aceptar negativas.

--¿Por qué llegaron hasta ahora?- iban hacer las once de la mañana y no hace más de media hora ellos habían llegado.

-sabíamos que necesitan la casa sola, así que con Alan fuimos a la casa que tienen los hermanos aquí en la ciudad.

- pues no paso mucho aquí en la casa, así que tranquila por eso.- espere unos segundos a que su mente captara el mensaje que le estaba enviando.

-¡no lo puedo creer! –chillo dando un pequeño salto- en el baño, CAMILA no lo puedo creerme tu desde cuando eres... eres tan arriesgada-

-cosita bella- comento ángel logro captar la atención de todas las mujeres de la mesa- eso si es un buen hombre- con disimulo gire mi rostro para ver de quien era que hablaba, y los tres hermano Andrade junto con Antón entraron en la cafetería- me pido al de ojos grises- con ese comentario me provoco unas terribles ganas de lanzarme sobre ella por ese simple comentario, con mucho control seguí con mi comida.

A los minutos después ángel abandono la mesa subiendo su falda algunas pulgadas y contoneando las caderas, trae su camino en mi mente y sabía que se dirigía directamente a alix.

Este ya tenía la bandeja con comida y esperaban a Alan, con un mal disimulado  tropiezo ángel se lanzó a sus brazos, el evitando derramar su comida la cogió con un solo brazo y la acomodo bien sobre sus pies para luego pasar de largo, Antón y Adam cogieron en diferente dirección.

-bien echo- susurre con una pequeña sonrisa volviendo mi vista a mi bandeja.

- podemos sentarnos aquí.- fue más una afirmación que una pregunta

-claro Alan, deja los presento- contesto la traicionera de alexia- ellos alix y Alan- dijo señalando a los dos hermanos- ellos son Andrés, sami.- señalo a la pareja.

-hola- dije un poco sonrojada pues alix no dejaba de mirarme.

-¿Cómo se conocen?- fue sami la primera en preguntar mientras los hermanos acercaban sillas.

-son vecinos de Camila- contesto alexia corriendo su silla de mi lado.

- hola amor- mi piel se erizo por el comentario de alix, con su mano giro mi rostro dejando un suave beso.

- que lindos- fue un coro por parte de Alex y sami, mientras que el brazo de alix se colocaba sobre mis hombros para acercare más a su costado.

-esto te va a costar- susurre antes de dejarle un beso en la mejilla, un chillido llamo la atención de todos los de la mesa, pues ángel acababa de llegar y parecía querer matarme.

-ángel ellos son Alan y alix el novio de Camila- señalo a cada uno- chicos ella es ángel la prima de sami.- dijo alexia con la voz cargada de cinismo

-un gusto- respondió Alan y alix dio un simple asentimiento, después de eso ella no dijo nada más, mientras que el resto hablábamos animadamente.

-nos vemos- con un casto beso alix se alejó para su clase, mientras que yo seguía con Andrés.

-¿por qué lo has hecho?- bote mi mochila en el sofá.

-ya te lo dije tú eres mía, y no pienso dejar campo para otro-

-no puedes simplemente seguirle la corriente a alexia- no dejaba de moverme por el lugar.

-en primer lugar ella me la sigue a mí no fue al revés y estoy feliz de que lo hiciera, ángel es una puta que ya me había follado – su respuesta me dejo de piedra.

-tu... ella... - no salió más de mi boca dándole la espalda lo deje en la sala.

Después de darme un muy bien merecido baño volví a la sala donde estaba mi mochila, alix estaba cómodamente en el sofá, en cuanto me acerque a mi mochila este me jalo del brazo para acercarme a él.

-¿Por qué te has enfadado?- apoye mi otra mano en el respaldo para evitar que lograra subirme a horcadas sobre él.

- te has acostado con ella- solté simplemente.

-eso no es una explicación Camila.

-le has dado lo que necesita para joderme la vida, alix, es simplemente eso- roce sus labios al terminar de hablar.

-pero tú eres con la que quiero estar- deje que me jala hasta estar sobre él.

- eso es algo que tú nunca vas a entender.- deje que la tentación me ganara y lo bese.

Sus manos me apretaron más a él, ya lo había probado una vez, otra no le haría daño a nadie, pero nuestro burbuja se rompió al escuchar la puerta abrirse. Nos separamos mas no permitió que me separe de mi lugar, nuestras respiraciones eran agitadas.

-creo que llegamos en un muy mal momento.

-nunca estuve más de acuerdo contigo hermanito.-

- me podrías soltar, por favor- no muy convencido aflojo su agarre sobre mis muslos.

-vamos a ver una película- dijo Alex- se nos unen.

-claro vamos – agarrando a alix de la mano lo obligue a levantarse seguirme escalera arriba- yo no pienso cocinar así que vallan pensando que van a ordenar- declare en cuanto pasamos por frente de la cocina.

-yo pido lasaña, ¿que quieren ustedes? - dijo Alan llamando, me imagino que al restaurante.

-creo que todos comeremos lasaña- dije viendo a alexia a alix.

Diez minutos después ya teníamos cerrado las cortinas y la película escogida y otra media hora más y cada uno tenía su lasaña consigo, deje mi plato a un lado acurrucándome al cuerpo de alix, él también dejo su plato me abrazo, así pasamos el resto de la tarde viendo diferentes películas.

-nunca me imaginé que te gustaran las sobras de las demás- termine de recoger mi comida.

-me vale mierda si ustedes se acostaron en el pasado- busque una mesa pues Andrés se desapareció y ni alexia ni sami estaban por ningún lugar.- y verdaderamente te agradecería si te callas de una buena vez no estoy para aguantar tu jodida voz.- no chisto nada mas pero tampoco se alejó, nos sentamos cada una en un lado opuesto y para mi maravillosa suerte alexia y Alan llegaron, en ese momento la embarazada comenzó a hipar demasiado. La abaniqué hasta que se calmó un poco.

-en la tarde tengo la cita para la segunda ecografía, de paso hablamos sobre tu asunto- comento como si anterior mente se estuviera ahogando.- los ataques de hipo se están haciendo más frecuente no te afanes mucho por eso.- si yo fuera la embarazada ya estuviera montando un completo drama.

-amor- sentí un beso en mi cabeza y luego otro en mis labios.

-hola- dije con una tímida sonrisa.

-y dime alix ¿cuándo vas a volver a las peleas?- cuando realizo la pregunta sus ojos estaban fijo en mi reacción y su tono era cargado de maldad.

- hablando de eso, ¿cuándo vas a volver bebe?- pude ver de reojo como le cambio el rostro a Ángel.

-no puedo por el momento, pero tú serás la primera en saberlo- dejo un piquito y se giró para hablar con su hermano, por mi parte le di la mejor y más grande sonrisa de superioridad.