when it comes to you ; midoriya izuku

7

El rubio cenizo se fue de ahí hechando fuego, literalmente.
Cualquier persona que veía, le gritaba. Bakugou juró vengarse.
Denki, Eijiro, Iida e Izuku comenzaron a elogiar a Sumire, mientras que Todoroki se limitaba a asentir. Esto era algo que nunca le había pasado a Sumire, por lo que estaba extremadamente feliz. Amane simplemente se fue de ahí, sentía que no encajaba y lamentablemente Sumire no lo notó.
Ahora Sumire tenía más amigos y su felicidad era gigantesca. Eijiro le pidió su número y se lo pasó.
Midoriya observaba todo, se sentía feliz de que Sumire haya hecho amigos, pero algo le preocupaba.

—Sumire— la llamó el rubio —¿Que te parece si nos ayudas a entrenar?— sonrió.

—¿Yo?— la pelinegra se señaló.

—¿Acaso hay otra Sumire aquí?— Eijiro y Denki rieron.

—Oh, eh...— Sumire miró a Midoriya y éste asintió —Esta bien—

Aún quedaban unos minutos antes de que los chicos deban entrar a clases así que aprovecharon para hablar con ella, incluso Todoroki de vez en cuando se unía a la plática.
Denki y Sumire se llevaron bastante bien, tenían uno que otro gusto musical similar. De pronto, ellos dos se sumieron en su mundo y comenzaron a hablar muy animadamente. Hablaron sobre sus canciones favoritas de una banda, su integrante favorito...

—Es ella, ¿No?— preguntó Iida mirando a Izuku —La villana de la que me hablaste el otro día— Iida estaba extremadamente serio.

Izuku no sabía que decir.

—No puedes relacionarte con una villana— dijo Iida acomodando sus lentes.

A Izuku pareció molestarle este comentario por parte de Iida.

—¿Por qué no? Ella no es tan mala como crees— decía Izuku, intentando no levantar la voz.

—Solo te está usando, terminará traicionandote— Iida se mantenía inexpresivo, mirando a Sumire.

—Ella es diferente, solo mírala, ya nos habría matado si fuera una verdadera villana— Izuku sonrió al ver a Sumire, quién platicaba animadamente con Denki e Eijiro.

—Es solo una pantalla— Iida se dio medía vuelta y se dirigió hacia su salón —Abre los ojos antes de que sea tarde— dijo el peliazul antes de irse.

—Ella es diferente... Lo sé— Izuku seguía mirando a Sumire.

Denki, Eijiro e incluso Todoroki se despidieron de Sumire.

—Nos adelantaremos— dijo Todoroki hacia Midoriya. El chico de cabellos verdes asintió.

Izuku se dirigió hacia Sumire.

—¡No puedo creerlo!— Sumire estaba realmente feliz —¡Les caí bien!— Sumire sacó su móvil y le enseño a Midoriya sus contactos —¡Mira! ¡Incluso Todoroki me dió su número!— Izuku se sentía feliz por ella —¡Sigo sin creerlo! ¡Eijiro me invitó a entrenar con el!— Sumire abrazó a Izuku —Gracias... De verdad muchas gracias— Izuku no tardó en corresponder el abrazo.

—A-Aoyama-san...— dijo llamando la atención de la chica, aún abrazados —¿Quieres ir... A entrenar conmigo?— Izuku estaba demasiado rojo.

—Claro, te daré una paliza, pero déjate de formalidades— dijo Sumire deshaciendo el abrazo y golpeando el brazo de Midoriya —Ahora ve a clases, te veo luego— Sumire se despidió con un gesto de la mano, se fue en dirección contraria a Izuku.

Los dos estaban felices; Sumire por conocer personas y hacer amigos e Izuku por ver a Sumire tan feliz.
Midoriya Izuku tenía algo muy en claro, y eso era que Sumire no es como dice Iida, el confía en ella y ella en el.
Y ya no estaba en los planes de Sumire traicionar a Midoriya, como se supone que debía hacer, ahora el problema de Sumire es Kurogiri y Shigaraki.
El móvil de Sumire comenzó a sonar, miró que era una llamada de Kurogiri... Para variar... Rodó los ojos y contestó.