—¿Mocosa has escuchado lo que hemos estado diciendo?— decía Tomura con cierto fastidio.
—Ajá— respondió la pelinegra quién estaba sentada cómodamente en el sofá.
—Bueno, entonces no te molestará el hecho de que al fin tendrás una amiga— esto le interesó a Sumire, así que miró curiosa a Kurogiri —Se llama Himiko Toga— en eso, la puerta se abrió, dejando ver a un chico pelinegro acompañado de una rubia.
—Son ellos— Sumire miró hacia la puerta y no pudo evitar pensar que el chico pelinegro era interesante.
—¡Whoa! ¡Así que ella será mi compañera!— la rubia se acercó a Sumire y la abrazó —Me pregunto cómo te verás llena de sangre...— las mejillas de la rubia se tornaron de un color rosado y sonreía, se separó de Sumire —¡Soy Himiko Toga!—
—Genial, otra loca...— Sumire rodó los ojos —Sumire— notó que el chico pelinegro no dejaba de verla, cosa que le incómodo mucho —¿Y tú qué me vez?— el pelinegro sonrió.
—¡Sumi-chan! ¡Eres tan linda! ¿Puedo llamarte así no? Después de todo, seremos amigas— Himiko Toga se acercó a Sumire —¿Por qué traes ese cubre bocas? Por cierto, El es Dabi, es un amargado—
—No me interesaba saber sus nombres pero bueno, ya qué— Sumire se cruzó de brazos.
—Sumi-chan, eres una amargada como Dabi— Shigaraki y Dabi comenzaron a discutir —Oigan, así no es divertido, debe haber sangre— Toga se alejó de Sumire para acercarse a Dabi.
—Kurogiri, ella está loca— Sumire miró a Kurogiri, quién no decía nada —Bueno, supongo que me iré, no fue un gusto conocerlos— decía inexpresiva y dirigiéndose a su habitación.
Una vez ahí, se quitó el cubre bocas y miró su reflejo en la ventana. Soltó un suspiro y comenzó a quitarse la sudadera, cepillo su cabello y procedió a quitarse la playera.
—Asi que tú eres Kysen— la pelinegra volteó alarmada, encontrándose con el tal Dabi en su habitación, entró en pánico e intento cubrirse con su playera —¿No deberías traer puesto el cubre bocas?— Sumire chasqueó la lengua.
—Y a ti que te importa— Sumire se puso de nuevo la playera, se colocó el cubre bocas e intento salir de su habitación.
—Me caes bien— decía Dabi mientras impedía que la pelinegra se fuera —Demasiado bien diría yo— Dabi acercó su rostro a el de Sumire y acarició su mejilla —Te pareces a mí— era verdad, ambos tenían el cabello negro, ojos azules y cicatrices.
—Que bien— Sumire quitó bruscamente la mano de Dabi y salió de su habitación hacía la cocina por un vaso de agua, y para su mala suerte, Dabi venía detrás de ella —¿No tienes algo mejor que hacer?— decía sin siquiera voltear, simplemente escuchó una risa por parte de Dabi.
La pelinegra se sirvió el vaso de agua y se sentó en la mesa, Dabi se sentó justo enfrente de ella, lo que causó que Sumire rodara los ojos, se quitó el cubre bocas y tomó un poco de agua.
—¿Y cuál es tu quirk?— decía sin quitarle la vista a el vaso con agua.
Una llama azul salió de la mano izquierda de Dabi.
"Que lindo quirk" pensó.
—A pesar de tener este quirk soy débil— decía Dabi mientras el fuego desaparecía.
—Solo necesitas entrenar, eso es todo— Sumire volvió a tomar agua hasta acabarse esta y llevó el vaso al lavabo.
Nuevamente, Dabi la seguía. Y el encontró la oportunidad de acorralarla.
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when it comes to you ; midoriya izuku
Fanfiction« Cuando se trata de ti, no hay crímen. Tomemos nuestras almas y entrelacémoslas. Mírame hablar con el corazón. » [ Terminado. ✓ ]