Today I'm speaking my mind
- Deshelia ha desaparecido.
Aquellas palabras a Optimus le sonaron peor que una sentencia. Sin poder controlarse más, sus rodillas cedieron y tuvo que volver a sentarse. Frente a él, Ratchet lo miraba con la misma preocupación que empañaba los ópticos zafiro del Prime.
- ¿Có-cómo que ha desaparecido? ¿Cómo es posible?- susurró el Prime.
- He mirado en todas partes, Optimus. En todas las oficinas, almacenes, en cada esquina. No está en el Ala Médica.
- La Ciudadela es grande- trató de autoconvencerse Optimus-. ¿Puede haber salido del Ala Médica sin que lo notaras?
Ratchet negó.
- Solo hay una salida del Ala Médica, Optimus. Me la hubiera cruzado por los pasillos con toda probabilidad y aunque no fuera así, la hubieran visto salir los demás. Pero no. Deshelia no ha salido del Ala Médica pero tampoco está dentro.
- Eso es imposible. Tiene que estar allí- dijo Optimus, poniéndose de pie, dispuesto a registrar la Ciudadela metro a metro si hacía falta. No pararía hasta encontrar a su hija.
- Mira las cámaras de seguridad- dijo entonces Ratchet-. Tiene que verse algo en ellas.
Optimus asintió y pronto las imágenes se desplegaron sobre la enorme holomesa. Una por una, revisaron las cámaras de seguridad del Ala Médica. Pero ni rastro de Deshelia.
Optimus sentía que se moría. Aquello no era posible. ¿Dónde estaba su pequeña sparkling?
Ratchet entretanto, no dejaba de recriminarse no haberla seguido en el mismo momento que la vio romper las pinzas. Él era el encargado de controlarla en cuanto ella ponía un pie dentro del Ala Médica. Le había fallado a su amigo y líder, el viejo médico de campo no podía sentirse más culpable.
Y eso sin contar su propia preocupación por la joven femme. Conocía a Deshelia desde que era una sparkling. Por el gran Solus Prime, él había sido su médico asignado cuando la habían activado. Él había controlado y monitorizado sus signos vitales cuando Deshelia apenas hacía otra cosa que berrear y beber Energon. Él había vivido junto a Optimus y a Elita One la preocupación ante la primera infección de la pequeña, él le había soldado una herida abierta que se había hecho con un escombro.
Y sólo Primus sabía el cálido sentimiento que le había invadido la spark cuando la pequeña sparkling lo había llamado "ío Rache".
Con el tiempo, Deshelia había dejado de llamarlo así, sobre todo cuando la femme se había distanciado tanto de él como de Optimus cuando el Prime le dejó claro que no le permitiría luchar. Ratchet había apoyado a Optimus, desde luego, porque él también quería apartar a la joven youngling del peligro.
Pero aunque jamás lo reconocería ante nadie, ni siquiera ante sí mismo, el médico añoraba ser su "tío Ratchet".
Así que se inclinó junto a Optimus, ambos frente a las imágenes de las cámaras de seguridad. Ratchet le indicó a Optimus la hora aproximada a la que Deshelia se había marchado y el Prime programó el vídeo.
Cuando la cinta comenzó a correr, Prime vio a su hija en la sala, limpiando y reparando instrumental sin prestar atención a nada a su alrededor. Contuvo por dos tornillos un respingo cuando oyó el chasquido de las pinzas de titanio cuando Deshelia las partió.
La vio abandonar la sala sin decir media palabra y la siguió por las diferentes cámaras. La sincronización era perfecta, según desaparecía en una pantalla, aparecía en la siguiente.
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Transformers Prime: Hija de la Guerra
FanfictionLa guerra por Cybertron ha comenzado. Dos bandos han sido creados: Autobots y Decepticons. Una nueva Generación ha surgido. La Generación de la Guerra. Más fuertes, rápidos, inteligentes, pero también más arrogantes, crueles, sádicos. Muchos...