Capítulo 38

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Megan

Siento un movimiento, por lo tanto empiezo a levantar mis párpados. Y veo a Nicolás vistiendose con una camisa gris. Luego pantalones de vestir, al igual que un saco

—¿A dónde vas? —pregunto— ¿a tu boda secreta?

Se da vuelta rápidamente

— buenos días, no sabía que estabas despierta. —me da un pequeño beso— tengo que ir a trabajar

— ¿Tu? ¿Trabajando? —le sonrió de lado burlandome

— Si, yo trabajo.

— Entonces, en donde trabaja mi Christian Grey

— En una empresa

— Estoy hablando en serio —dije riendo, luego pensé en seguirle el juego— ¿en la empresa Grey?

— No, En la empresa Smith. —toma un suspiro— No quiero esconderte cosas Ojitos. Trabajo con mi padre —Entonces me quedo callada, no digo absolutamente nada— ¿No dirás nada?

— Esas cosas ya las hablaste con tu madre, y si no le haces caso a ella. Menos a mí

— Creeme es por una buena razón

— Solo, no dejes que te manipule. Cambiando de tema, tengo una pregunta ¿Cómo es que mi suegra estaba aquí en Inglaterra?

— Ella vino a verme. Siempre lo hace

Me dió tanta ternura

— ¿hasta qué hora trabajarás?

— Llegaré tarde. Invita a alguien si quieres

— Ok, de todas formas, yo también trabajo.

Me levanto y empiezo a vestirme. Cuando termino, me doy vuelta y lo veo mirarme, me sonríe, me derrito, y le devuelvo la sonrisa.
Me dirijo al espejo que hay en la pieza y me siento, me hago una trenza de lado y dejó dos pequeños mechones a los lados de mi cara. Me hecho perfume y me pongo un poco de rubor. Si, Macarena me ha enseñado algo de maquillaje

Siento un beso en la mejilla y que dos brazos me envuelven en un cálido abrazo. Miro por el espejo, su cara está hundida en mi cuello. ¿Cómo puede ser tan tierno, tan juguetón, tan divertido, tan sexi, tan perfecto, todo al mismo tiempo?

Luego sus ojos azules se encuentran con los míos a través del espejo.

— Y pensar que de todas las mujeres de este planeta, yo tengo a la más hermosa.

Me sonrojo y sonrió mirando al piso

— me encanta ver el efecto que tengo en ti. —vuelve a hundir su cara en mi cuello— e igual tú perfume de vainilla.

— se me está acabando —dije

— en mi cajón tienes uno

— ¿Y qué haces tú con uno de esos perfumes?

— no iba a soportar todo un año sin algo que te recuerde. Y tú olor es único. —suspira— bueno, vamos, te llevo.

Subimos al auto y empezó a conducir hacia el instituto donde daba clases. Hoy, gracias al señor, voy a dar clases a los niños.

Luego me surgió una duda

— ¿Oye, como me encontraste en el instituto?

— Bueno, resulta que esa noche que te embriagaste con mi mamá. Le comentaste que Sebastián te había invitado a citas pero no funcionó porque pensabas en mi —un rubor llego a mi cara— le dijiste la dirección de su casa y todo. También le dijiste que te iba a mandar a otro lado. En un momento me dijo que te fuiste al baño y cuando fue a verte porque no volvías, estabas dormida. Agarró su coche y se dirigió a la casa de Sebastián para que te dijera que tendrías que venir para Inglaterra, le dijo el instituto y todo. Cuando volvió, tu salias del baño y... Siguieron hablando normal.

— Que suegra traviesa tengo —dije roja como un tomate.

Llegamos, me despido y bajo del auto. Cuándo iba dos pasos escucho su voz.

— Y ojo con ese tal Eric o Erick, como sea. Se pronuncia igual.

— Tranquilo, ya te engañe con un tal Lucas en el otro instituto. —recorde al pequeño que dijo que estaremos juntos.

— ¿Que?

Me fui al salón de pequeños y empecé a dar clases. Les hice haces juegos y dibujos.

(...)

Faltaban que pasarán a buscar a dos hermanitos y ya podría irme.
Escucho la puerta y lo veo entrar.

— ¡Mateo! —grito y lo abrazo. Lo extrañe tanto. Detrás veo entrar a Macarena y Thomás de la mano

— ¿Cómo estás Megan? Lucas te manda saludos. Y dice que ya mide 2 cm más.

La puerta se abre y son los padres de los pequeños.

Nos fuimos a casa de Nicolas y empezamos a hablar.

— Quiero ir a tomar un helado. —dice Mateo

— Yo te llevo, vamos —dijo Macarena— ahora vuelvo

— hay un kiosco aquí a la vuelta —le informo

Se van por la puerta y vuelvo la mirada a Thomás, está raro.

— ¿Estás bien? —le pregunto

— En realidad, no

— ¿Que sucede?

— Es Macarena. Megan, yo la amo. Pero en todo este año y medio como novios no me deja tocarla

— ¿No han tenido relaciones sexuales?

— No, cada vez que estamos en eso frena y no quiere. No sé qué le ocurre, pero comienza a Sollozar.

— Deberías hablar con ella

— lo intento creeme, pero no quiere. Dice que le trae recuerdos.

Llega Macarena y seguimos hablando todos.
Le preste a Nicogan Smitson y Megolas Jhonsmit (Los osos) a Mateo

Llega Nicolás y saluda.
Lo veo angustiado.

— ¿Estás bien? —le dije

— No, estoy tan cerca. Y no puedo

— ¿Que sucede amigo? —le pregunta Thomás

— Descubrí que mi padre a Robado empresas ¿Si? Y eso es delito. Por lo que tiene que ir a la cárcel. Pero su aliado, el padrastro de Macarena —siento como Macarena se tensa— lo tiene muy bien ocultado. Estaría necesitando algo para meterlo a él también a la cárcel. Estoy seguro que ese loco algo se tuvo que a ver mandado.

— Yo te voy a ayudar —dice Macarena al borde del llanto— Ese loco, Abuso de mi a los 14 Años.

*************†**************
Tan tan tannnn

¿Se lo esperaban?

En fin, perdón por tardar en actualizar.
Tengo un AÑO muy agotador.
2018 empezo con todo.

Y hoy tengo prueba de inglés y Matemáticas.

VOTEN, COMENTEN Y RECOMIENDEN.

besos desde Argentina 💞😘

Enamorándome de mi vecinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora