Capítulo 3

2.4K 148 72
                                    


La noche caía sobre la ciudad y no sabía qué hacer. ¿Cómo sería mi primera noche aquí? Eso me aterraba más que estar cerca de Shawn. Me sentía mal al pensar que aún me faltaban meses para ser mayor de edad y poder irme.

— ¿Cenarás? —preguntó Shawn tras la puerta.

—No tengo hambre, gracias —respondí mientras caminaba hacia la puerta con la esperanza de que estuviera ahí y habláramos un poco. Pero por supuesto, no ocurrió. Cuando la abrí él ya no estaba.

°Shawn°

Me retiré de la puerta de su habitación dirigiendome al comedor, yo sí quería cenar.

— ¿Y la pequeña? —preguntó Jane poniendo un plato frente a mí.

—Dijo que no quería cenar. Pero si después baja y te pide algo de comer, no se lo des —le ordené serio.

— ¡Shawn! —me regañó—. Es sólo una niña, acaba de llegar a una casa extraña y quién sabe por qué cosas habrá pasado.

—No por eso tiene que ser una malcriada. Si se acostumbra a hacer lo que quiera en MI casa, luego tendré que afrontar las consecuencias.

—Está bien, sólo no seas tan duro con ella —sugirió caminando hacia la cocina—. Buen provecho.

Cené solo, como siempre lo hacía.
La verdad disfrutaba de mi soledad, no me gustaba mucho estar rodeado de gente. Desde muy joven había aprendido a valerme por mí mismo –más o menos– y me había acostumbrado al silencio.

Cuando terminé con la cena subí a mi habitación y me quité la ropa para quedar en bóxers y dormir cómodo. Me recosté y encendí la televisión, aún no tenía sueño. Pero luego de pasar canal tras canal más de 5 veces, decidí bajar a la cocina por algo de beber.

°Victoria°

Luego de decirle a Shawn que no tenía hambre, mi estomago empezó a rugir, pero no podía bajar, mi orgullo predominaba, así que esperé una hora y bajé hasta la cocina. Cuando entré me encontré con Jane, que estaba guardando unos vasos.

—Hola, cariño —me sonrió tiernamente—, ¿tienes hambre?

Asentí mientras sentía mi estomago rugir de nuevo.

—Lo noto —soltó una risita —. ¿Quieres leche y galletas?

—Sí, por favor —pedí entusiasmada.

Minutos después tenía un gran vaso de leche y un plato de galletas frente a mí.

— ¿Estás aquí, Jane? —escuché a Shawn y volteé a verlo —. ¿No que no tenías hambre? —me preguntó alzando una ceja.

— ¡Shawn, compórtate! —lo riñó Jane.

¡Dios! ¡Estaba en bóxers!

—Cúbrete o algo —le dije mirando para otro lado, tratando de no ver su trasero, especialmente. El trasero de los chicos era mi debilidad.

—Pues no me mires, esta es MI casa y ando como yo quiera.

—Bueno, ya. —volteé a verlo—. Pero en serio, respeta un poco.

—Ajá, como digas —tomó una botella de agua del refrigerador y salió de la cocina.

— ¿Cuál es su problema? —le pregunté a Jane —. ¿Siempre es así?

—Desde que tuvo una pelea con sus padres y lo obligaron a mudarse solo ya no es el mismo chico.

— ¿Qué? ¿Qué pelea?

La Bella y la Bestia - Shawn Mendes (ADAPTACIÓN) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora