La Bella y la Bestia - Shawn Mendes (ADAPTACIÓN) [TERMINADA]

Capítulo 19

Terminé de arreglarme y corrí escaleras abajo. Shawn y Julie reían a carcajadas.

-Me llamas si necesitas algo -le dijo Shawn. Ella asintió-. Ha sido un placer volverte a ver, primita -le dio un fuerte abrazo.

-Lo sé, para todos es un placer verme -alardeó orgullosa y ambos rieron-. Nos vemos en la boda. Nos vemos, Vicky -dijo cuando me vio.

-Nos vemos, Julie -hablé dándole un abrazo-. Y de nuevo, disculpa por mis suposiciones idiotas, y gracias por distraerme esta madrugada cuando no podía dormir -Julie rió-. Y espero verte aún después de la boda.

-Claro que me verás, linda. Y recuerda que yo también actué como idiota -le sonreí.

-Nos vemos en unos días, Jules -le dijo Shawn con una sonrisa. Julie le dio una palmadita en el hombro y salió para subir al auto de su novio.

- ¿Nos vamos? - me preguntó Shawn luego de hacer no sé qué en su teléfono.

-Claro -sonreí.

- ¿No llevarás bolso?

-Puedo llevar mi teléfono en la mano -negó con la cabeza y rió.

-Muévete entonces - dijo colocando una mano sobre mi cintura y dirigiéndonos a la salida.

❧

- ¿Pongo música? - preguntó ya en el auto. Asentí y encendió la radio.

- ¿Por qué dijiste que no habían más habitaciones?

-Sólo se me ocurrió -respondió divertido.

- ¡Qué idea más genial! - dije sarcástica.

-De todos modos, no conseguí lo que quería.

-Ni lo conseguirás, Shawn.

-Como digas, pero te has quedado dos noches a dormir conmigo sin quejarte.

-Es porque tenía miedo -me defendí.

-Sí, claro -bufó -. ¿Y no se te ocurrió recorrer la casa?

-La verdad, no.

-Ese fue tu error -dijo aparcando en su lugar reservado.

¿Cómo llegamos tan rápido?

-Silencio -le dije desabrochando mi cinturón y bajando del auto. Caminé primero que él.

-Dame la mano, Victoria -habló detrás de mí.

-No.

-Recuerda lo que hablamos -dijo serio.

-Okey, ven aquí -dije resignada deteniéndome para que me alcanzara.

-Eres tan difícil -señaló.

-Y tú tan imbécil -contraataqué a lo que besó mi mejilla.

-Y ahora, tienes que amarme -comentó sonriente.

Pero... si ya lo hacía.

❧

-Harás lo mismo que la vez anterior... bueno, sin llamadas y estarás en mi oficina -me explicó cuando bajamos del ascensor.

-Está bien -dije dejando que me guiara.

Varias miradas se posaron sobre el casi nuevo jefe y la chica que llevaba de la mano. Shawn se apoyó en el escritorio de una chica rubia y la miró por un rato, lo que por supuesto, hizo que me hirviera la sangre y me dieran ganas de patearle la entrepierna.

-Hola, Tami -la saludó sonriente.

-Buenos días, señor Mendes -respondió ella educadamente. Quizá no quería meterse en su cama, quizá-. Estos son los documentos -le entregó varias carpetas.