No puedo vivir sin ti.

Inesperado.

Ikatteiru.

— ¿Como te va Ika? ¿Hay alguna novedad?

— No, ninguna hermana, Beifong recibió el mensaje del integrante que mandamos.

—Muy bien, pues por mi lado creo que ya logré separar a esos tortolos que me daban asco.

— ¿Al avatar y a su esposa?

— ¡No! Estoy hablando del consejal y de la chief.

—¡El embajador Sokka y la chief Toph tenían una relación!

—Si, y yo ya me encargue de separarlos.

—Muy bien hecho hermana. Ya me voy, es hora de ir a trabajar, Beifong me dijo que debería de llegar temprano. Nos vemos después hermana.

—Nos vemos...

Antes de salir, me puse el perfume que tanto me gustaba que nos había regalado mamá a mi hermana y a mi.

Salí con mi armadura puesta, lucía tan reluciente, a decir verdad me encanta el uniforme de la comisaría. Lastima que solo durare muy poco tiempo usándola.

La estrategia va de acuerdo al plan y el jefe estará muy orgulloso de mí y de mi hermana cuando le llevemos a Beifong ante él.

Espero que mi hermana se cuide mucho o si no la van a descubrir. Cuidate mucho Ikari.

Katara.

Estaba en la habitacion, me estaba dando una ducha muy larga ya que no tenía nada que hacer. Más al rato pensábamos ir Aang y yo a visitar a Zuko en la nación del fuego para ver qué tal le va.

Por ahora, ya habíamos desayunado y estaba el pleno sol, Aang había salido a buscar a Sokka, dijo que tenía unos planes por hacer y después se iba a pasar con los Alcólitos del aire para seguir aprendiendo de la cultura de los nómadas aire.

Cerré los ojos un momento intentando relajarme sonriendo por lo de anoche. Aang y yo tuvimos una noche muy divertida y agitada (7u7).

Era mi primera vez, así es que me seguía doliendo la espalda y la entrepierna. Más al rato pienso ir a visitar a Toph, dependiendo de cómo me sienta.

Ya llevaba 30 minutos en la bañera, así es que decidí salirme. Me puse mi ropa típica de la tribu agua y me empecé a cepillar el pelo. Me siento feliz por lo ocurrido anoche, siempre me eh preguntado ¿Que se sentiría ser mamá? Había ayudado muchas veces a los partos en la tribu agua y después de que nacían, las mamás estrechaban muy fuerte contra su pecho a los bebés.

Cerré los ojos por segunda vez pensando e imaginando a mi, a Aang y a un hermoso niño o niña, sería un poco egoísta de mi parte pero siempre me gustó la idea de que nuestro hijo fuera un maestro agua, aún que se que también ayudaría mucho al mundo traer maestros aire al mundo.

Empecé a tararear una pequeña melodía que gran-gran me había enseñado y aún que ella ya no esté aquí, siempre la llevaré en el corazón.

Lleve mi mano al cuello solo para darme cuenta del hermoso collar que Aang me había regalado cuando nos comprometimos.

De pronto sentí unas nauceas tremendas de vomitar, lo cual hizo que corriera al baño vomitando mi desayuno.
Al acabar, fui y me recosté en la cama, ¿Que me pasaba?

No le tome tanta importancia y empecé a aguardar algunas cosas para ir rumbo al departamento de Toph.

Sokka.

Seguía deprimido por mi ruptura con Toph, pero sabía que lo mejor era darle tiempo para que se recuperara.

Ahorita estaba en el trabajo atendiendo unas cosas con la consejal Izumi, hasta que llegó Aang.

— Buenos días Sokka, buenos días consejal Izumi.

—Buenos días avatar Aang— respondió Izumi con emoción.

—Hola, ahorita voy— le respondí desganado, se me había olvidado la reunión con Aang sobre la operación "Templo del aire de la isla" el nombre se lo había dado yo.

—Oh, si quiere me puedo ir ahora, podemos discutir en otro momento si gusta— Izumi era muy comprensiva y agradecí internamente por eso.

—Gracias Izumi— le sonreí amablemente.

—No hay de que, nos vemos avatar Aang, nos vemos consejal Sokka— se fue y solo quedamos Aang y yo. Suspiré pesadamente y me crucé de brazos tras el escritorio.

—¿Que te pasa? Te ves apagado— pregunto mi amigo el calvito, ¿estaría bien decirle?

—Estoy bien, continuemos con los planes— saque un rollo muy grande de uno de los cajones donde estaba el boceto de la isla y las medidas exactas que tenía que llevar.

—¡Genial, lo terminaste!— Aang estaba que se moría de alegría y eso me hacía feliz a mi también —empezare a construirlo pasado mañana, necesitaré tu ayuda y la de Toph, ¿Crees que puedas contactarla por mi, por favor?—

No necesite mirarme en un espejo para sentir mis mejillas arder un poco y de pronto regreso la tristeza.

—Ammm cl....claro, es decir si— fingí una pequeña sonrisa, todo esto es por mi amigo y mi hermana. Nada más.

—Muchas gracias Sokka sabia que podía contar contigo. Muy bien, me retiro, me tengo que reunir con los Alcólitos del aire. Que te parece, vernos pasado mañana en el muelle  a las 10.

—Esta bien, no te preocupes, ahí estaremos.

—Gracias, nos vemos— hizo una leve inclinación, a lo cual yo le respondí.

Y de nuevo me quedo solo.
Y ¿porque estoy nervioso? Solo es decirle a Toph que Aang nos necesita para construir una isla.

Odio estar tan confundido.
Iba saliendo de las oficinas, cuando me encontré a alguien muy familiar.

—Hola consejal Sokka, se ve muy deprimido ¿quiere ir mi casa? Ahí puedo hacer que se sienta más feliz— era Ikari, la señorita a la que Toph le salvó la vida. Acaso se nota tanto mi tristeza. Todo el mundo pregunta por ella.

—Gracias por la oferta pero debo responder no, tengo más cosas que hacer— y segui caminando pasando aún lado de con ella y me llego ese mismo olor. Rosas.

Me voltie tan bruscamente que creo que me torci el cuello.

—¡Tu!— según lo que me dijo Toph, me había besado con alguien, y yo recuerdo un olor a rosas, ella tiene un perfume de rosas que no es común aquí en Ciudad República.

Me acerqué a ella furioso, ella causó mi ruptura con la mujer que amo. La agarré de los hombros sin tener compacion alguna.

—¿Que? ¿Acaso quieres más besos míos?— se empezó a burlar de mi.

Pero esto no se acaba así.

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Holi.

Qué tal están hoy, yo estoy un poco sad por no sé que :'v pero no lo se.

Quiero preguntarles algo ¿De dónde son? Yo soy de México ajua>:v

Okay me retiro, espero que les guste el capítulo, voten y comenten.

Adioooos.