¿Qué quieres de mí?

Capítulo 35 : La despedida de Carina y Un Christian afectado

Abie y yo observamos a Carina hacerse la maleta con  un nudo en la garganta mientras ella sigue llorando y suelta de vez en cuando dolorosos gemidos que me llegan al alma,  se por lo que está pasando, yo misma lo pasé cuando paso lo de Eric,  solo que él se besó con otra y estaba drogado pero Christian se ha acostado con otra y estaba más que fresco.  Ha intentado por todos los medios que Carina le perdone pero al igual que Abie y yo,  Carina es una mujer de armas tomar y por mucho que la duela le ha repito ochenta veces que desaparezca de su vida. Ahora le odia,  pero cuando se vaya y no le vea va a ser cuando peor lo va a pasar.  Encima a todo eso súmale el alejarte de todos tus amigos ... La hemos intentado convencer de que se quedara,  bueno la han intentado yo no he participado,  no por nada,  quiero mucho a Carina y es una amiga pero sé lo que es querer desaparecer por que no soportas el dolor. Nos mira y se tapa la boca,  coge una mochila y se la cuelga en la espalda,  luego coge la maleta y vuelve a derrumbarse,  Abie y yo la abrazamos haciéndola que llore aún más y a nosotras también se nos escapan algunas lágrimas.
-Os voy a echar de menos -Dice con la voz entrecortada - cuidaros mucho,  os veo en verano.
-Carina...-Dice Abie , ella lo está pasando peor y lo entiendo,  lleva dos años compartiendo habitación con esta Castaña tirando a rubia con ojos color miel -cuídate y por favor recupérate y no lo pienses mucho.
-Soy fuerte-Dice fingiendo una sonrisa-seguro que lo supero -pero en seguida se pone a llorar - ¿Por qué ha sido tan estúpido? ...
-Ya esta Carina -susurro y la doy un beso en la cabeza -Lo peor que puedes hacer es pensar en ello,  sé que es dificil pero con el tiempo verás que los supera.
-¿Tú con Eric lo pasaste así? , es como si mi corazón se hubiera roto en millones de cachitos y me faltara el aire -asiento -pues menuda mierda...
-Lo és Carina por eso tienes que ser fuerte,  yo sé que puedes.
-Me tengo que ir,  no quiero hacer esperar a mi padre,  cuidaros y por favor llamadme de vez en cuando para contarme los  cotilleos -asentimos - Os quiero.
-Y nosotras a tí también Carina -Nos volvemos a abrazar y ella respira hondo
-Voy a echar de menos todo esto -y con una última mirada sale de la habitación,  Abie y yo nos miramos.
-Se ha ido -susurra y se sienta en su cama - La feliz y dulce Carina se ha ido.
-Y ahora nos la van a sustituir por otra-aprieto los puños al pensar quien será nuestra nueva compañera,  seguro que ni de lejos es como Carina y solo hay una culpable en todo esto,  salgo de la habitación.
-¡BROOKE PARA! -grita Abie pero yo salgo corriendo a la planta tres,  llamo a la puerta y me abre la persona deseada,  estampo mi puño en su cara. 
-¿¡Pero estas loca!?-Dice llevándose la mano a la nariz que chorrea sangre.
-Da gracias a dios que no te la he roto,  puta,  que es lo que eres,  ¿Te gusta eso de ir tirándote al novio de las demás?  -no me contesta y la agarro del cuello metiéndola en la habitación,  Angee y Charleen pegan un gritito.
-Brooke no merece la pena-Dice Abie agarrándome el hombro y veo como a Caitlin empieza faltarle el aire. 
-Se ha ido por su maldita culpa,  por no saber mantener sus piernas y su boca cerrada.
-Lo-lo siento -Dice sin aire y yo la suelto,  cae al suelo de rodilla y respirando con dificultad,  la agarro del pelo y la levanto la cabeza.
-Andate con ojo Caitlin, no soy una persona con la que debes jugar y tu amiga Angee lo sabe bastante bien.
-Ya basta Brooke -me dice Eric y yo le aparto, me arrodillo hasta quedar a su altura. 
-Has entrado en mi lista negra y quien entra no sale -la doy un cabezazo y salgo de la habitación con lágrimas en los ojos.
-¡Brooke!  -me gritan pero yo les ignoro,  ellos ni están en mi siguiente paso.
-¿Se puede saber a dónde vas? -Dice Eric enfadado
-A cortarle la polla a ese cabrón -Hay un silencio sepulcral y yo sonrío con maldad,  me aparto de Eric y camino decidida a la habitación de Christian- Soy yo Christian ábreme -digo inocente y la puerta se abre,  levanto el puño pero en seguida lo bajo.
-Brooke no me apetece discutir ahora -le miro,  tiene la cara roja e hinchada de haber estado llorando y me siento mal , no debería ha sido un cabrón con mi amiga pero todos necesitamos apoyo.
-Y-yo...¿Quieres hablar? -Digo y me mira atónito asiente conteniendo las lágrimas y yo entro en la habitación -Ya veo que muy bien no estas,  ¿Porqué lo hiciste? - me siento en la cama apoyándome en el cabecero y él se pone a mi lado.
-No lo sé,  no sé que cojones se me pasó ese momento por mi maldita cabeza,  por favor Brooke creeme amo a Carina como no he amado nunca a ninguna chica,  bueno en verdad es que nunca he amado a una chica solo a Carina,  pero Caitlin se presentó en mi habitación y se lanzó,  al principio me resistí te lo juro pero los hombres pensamos con el pene y al final consiguió tenerme donde quería,  te lo juro que cuando ví entrar a Carina mi corazón se rompió,  no sé como pudé hacerlo , no he podido dormir , me voy a arrepentir toda mi vida. Ella lleva razón se entregó a mí,  confío en mí,  me ha ayudado y yo se lo he pagado de la manera más estúpida y rastrera de este mundo. Y ahora se a ido la he perdido para siempre y no puedo evitar pensar que ahí fuera va a conocer otro,  otro que la cuide mejor,  otro que la ame mejor,  otro que la haga sentirse especial y no la engañe,  otro mejor que yo,  no sé que vió en mí -le miro y le abrazo,  se apoya en mi pecho y yo le acaricio el pelo -La quería y la quiero de verdad,  la he perdido por esa puta.
-¡BROOKE NO! -Grita Eric abriendo la puerta con Abie y Marcus y en seguida abre los ojos -¿Qué esta pasando aquí ? , ¿Has perdido a tú novia e intentas tirarte a la mía? 
-Yo...
-Basta Eric,  Christian lo está pasando también mal y todo el mundo se merece el apoyo de las persona sea culpable o no -me mira enfadado y se da la vuelta
-V-vamos... con él -Dice Abie y Marcus mira mal a Christian.
-No les hagas caso,  son los dos unos protectores de mierda -se ríe un poco - Christian solo te puedo decir una cosa:  Dala tiempo,  el tiempo es lo único que va a hacer que cicatrice su herida y una vez sané ella será quien te busqué para hablar de lo sucedido,  pero eso sí,  pueden pasar meses e incluso un año ya más no creo.
-Me puedo morir un año sin ella -Susurra -pero si tiempo es lo que necesita tiempo la voy a dar -asiento -Gracias Brooke,  necesitaba hablar con alguien.
-Seguramente dentro de un rato venga yo a que me consueles,  voy a tener una gorda con Eric verás -Se ríe.
-Te espero con los brazos abiertos -me da un beso en la mejilla y yo salgo de la habitación,  veo a Abie esperándome.
-Hola -Digo y sonríe -¿Está muy enfadado?  -asiente
-Un pelín y tú hermano también -resoplo - están en nuestra habitación.
-Enfrentarme a uno vale,  ¿pero a los dos?  , Abie cava mi tumba y por favor las rosas rojas nada de rosas ni blancas -Se ríe
-Tranquila hoy he perdido a una amiga no quiero perder a otra,  yo te protejo -nos empezamos a reír y abro la puerta de la habitación.
-Hola -canturreo.
-¿¡Se puede saber que hacía Christian en tu pecho y por que estaba acariciándole el pelo!?-me grita Eric y yo cierro la puerta manteniendo la calma.
-Necesita un abrazo y se lo e dado -digo con indiferencia,  Marcus se acerca a mi aleteando la nariz y suelta un bufido.
-¿Le has dado un abrazo al chico que a roto el corazón de tu amiga de una menara cruel y rastrera?
-¡Ya basta! -Grito haciendo que se sobresalten -Sois los dos estúpidos tú -digo señalando a Eric-por celoso y tú -digo señalando a mi hermano-por protector,  ¡todo el mundo necesita saber que tiene el apoyo de alguien! , ¿O es que a vosotros os gusta sentiros solos cuando estáis destrozados? , de tí Marcus me lo esperaba,  pero de tí Eric...  sabiendo lo que se siente... o bueno a lo mejor no.
-No vayas por ese camino que luego acabas haciéndote daño tú -Oigo la puerta cerrarse y me giro,  no veo ni a Marcus ni Abie, ¡Perfecto!
-¿Yo daño por qué? -le digo - a lo mejor eres tú el que acaba haciéndose daño,  a lo mejor eres tú quien se ha metido en terreno peligroso,  a lo mejor eres tú quien se está arrepintiendo.
-¿De qué hablas ahora? -se acerca a mi demasiado y pongo las manos en su pecho para separarle -Sabes que yo no te haría lo que te ha echo Christian.
-Porque a lo mejor no ha llegado la que te caliente los cascos,  pero puede que llegue,  mírame a la cara y dime que no has mirado a otras con deseo -vale el tema se nos está yendo de la manos. 
-¡Pues claro que no! , yo seré un celoso pero tú tampoco te quedas corta.
-¡Tú te has acostado con media población femenina!  , ¡yo con nadie! , ¿y hasta cuando va a durar el que te canses de esperar ? -me sujeta las manos y me las baja pegándose más a mí,  pega su frente con la mía y comienza un batalla de ojos azules oscuros con ojos azules cristalinos
-Voy a seguir esperando lo que haga falta. -Dice y sin dejarme responder besa.
Lleva sus manos a mi culo y con un leve empujoncito me sube encima suya,  yo intento resistirme,  pero al final decido abandonarme por ese voraz beso que hace que mi cuerpo entero arda y mis labios se hinchen ante tal intensidad,  me pega al armario con sus manos descontroladas acariciando mi cuerpo,  ¡todas las discusiones acaban igual! ,¿y a quien quiero engañar?  ,¡me encanta! , gimo al notar como una de sus manos se cuela por mi camiseta y baja su boca a mi cuello,  enredo mis manos en su pelo mientras el acaricia mis pechos y da pequeños mordisquitos por mi cuello haciendo que de pequeño grititos de placer, mis manos bajan acariciando sus hombros y sus brazos y cuando llegan al borde de la camiseta las meto por dentro. Gime al sentir mi contacto y me deshago de ella contemplando su torso desnudo,  agacho mi cabeza y paso mi lengua por él haciéndole suspirar y desabrocho el botón de su pantalón,  ¿En serio lo quiero hacer ahora? , ¡ Por supuesto qu....
-¡BROOKE ,ERIC!  , ¿OS ESTÁIS MATANDO?-grita Abie,  por supuesto que no,  me baja y se pone la camiseta.
-Siempre igual...  -refunfuño y abro la puerta.
-iba a llamar a la policía ya -sonrío -¿hemos interrumpido algo?
-Sí -dice Eric serio
-No -digo yo a la vez sonrojándome
-Eso es que sí,  a si que hermanita ya no me muevo de aquí.