Continuamos bailando, esta vez tocaban una música más movida. El sonido de los instrumentos resonar por todos lados era relajante, además de los bailes ridículos que mi amigo hacia titulándolos Bailes de Jack.
Mientras manteníamos la cercanía en nuestros movimientos no pude evitar notar como alguno de sus rasgos infantiles habían desaparecido de su cara. Su mandíbula estaba más marcada, y sus expresiones eran más duras que hace años.
Contuve varias veces suspiros al viajar en esos tiempos que pasábamos juntos caminando por el parque más cercano de la casa de mis padres. En mi recamara mirando televisor o conversando sobre cosas que nos gustaban. Cosas que hablar con otras personas resultaría extraño.
–Mi turno.
Ambos miramos a un lado cuando su voz resonó demasiado cerca de nosotros, que manteníamos nuestros cuerpos juntos haciéndole compas a la melodía calmada que sonaba.
James Anderson es cuadrillo a Jack quien poco a poco sonrió, apreté el lado de su hombro que no se miraba ante los ojos de nuestro intruso.
No me dejes, Jack.
Mire directamente los ojos de mi amigo con insistencia, deseaba que hiciera uno de sus actos de celos cuando no quería compartirme con otras personas. Era divertido ver como hacia comentarios a veces demasiado estúpidos para poder escabullirnos de la situación.
Pero en esta ocasión parecía que algo le divertía por la sonrisa en su rostro y el brillo en su mirada me hizo suspirar con pesar.
–Adelante, caballero. –Se aleja haciéndome bajar mis brazos a mis costados, me sonríe de lado y hace un asentimiento– Nos vemos al rato, Lii. Regrésemela en el mismo estado, por favor.
Lo fulmine con la mirada mientras el abrió la boca mostrando sus dientes, estaba disfrutando esta situación. James le miro con curiosidad sin responder, después tomo el lugar de mí amigo quedando delante. Apreté mis labios en dirección de Jack, quería ir a golpearlo pero él sabía que no podía y que quería hacer.
Antes de marcharse lanzo un beso al aire y se alejó perdiéndose entre la gente.
– ¿Me permites? –Pregunto estirando un poco los brazos.
Asentí.
Una de sus manos rodeo mi cintura mientras que con el otro tomo mi mano dejando nuestros brazos estirados.
Los músicos habían estado tocado música muy linda, te hacía sentir como en otra época. Pero en estos momentos estaba comenzando a detestar que tocaran de nuevo esas baladas despacio. Había disfrutado bailarlas con Jack, pero tener que tener la misma cercanía con James me resultaba en estos momentos un tanto incómodo.
Intente mantener la mirada en un punto sobre su hombro para no tener que enfocarlo, pero su voz me obligo a hacerlo encontrándome con una mirada cargada de algo que no lograba identificar.
– ¿Que recuerdas, Haley?
–No recuerdo nada. –mentí, quise regresar la mirada a un punto vacío pero nuevamente insistiendo en el tema continuo.
– ¿No lo recuerdas? –Meneo la cabeza en negativa, mis ojos se desvían a sus labios cuando se los relame. Una sonrisa burlona se forma en ellos ladeando la boca–Seria muy deshonesto de decirte que me encantaría recordarte, pero dejemos que tu cabecita lo haga sola. ¿Estás de acuerdo, Dickens?
–No creo que allá algo de lo que me gustaría acordarme, James.
Ríe ligeramente.
– ¿Eso crees? –Asiento sin despegar la mirada de la suya, me hace dar media vuelta junto a él. Después suelta mi cintura y con la otra mano sujeta a la mía me hace girar hasta quedar de espaldas a él haciéndome soltar un jadeo ante su inesperado movimiento. – ¿Nada de nada?
ESTÁS LEYENDO
Inesperado.(#1SagaAnderson) (CORRIGIENDO)
RomanceLas voces en mi cabeza no me dejaban descansar, hasta que llegaste tu y calmaste ese mar de dudas, hasta que besaste mis sueños y sujetaste mis temores. Ahora mi temor no eran mis monstruos, era que te fueras y me dejaras de nuevo sola con ellos. SA...