Hidden | h.s (Español)

doce

Siento como Harry me mira desde su escritorio, sus ojos verdes, están más oscuros de lo normal. Está mordiendo la parte superior de un boli.

Intento concentrarme en mi trabajo. Todavía estoy enfadada con él por lo que me dijo anoche. Sé que él no me quiere, pero no tendría que haberse puesto así conmigo. Intento apartar la pelea de mi cabeza, no me importa lo que Harry piense de mí.

¿Verdad?

Son las dos en punto, la hora del almuerzo se acaba de terminar. He comido con Perrie, Zayn y Lana como todos los días. Ojalá Zayn le pida salir pronto a Perrie, me hace gracia cuando coquetean entre ellos, él es muy descarado. Me vuelvo a mi mesa y sigo con el trabajo de esta mañana.

Una bolita de papel procedente de la mesa de Lana, cae en mi mesa y lo leo.

'¿Por qué Styles no para de mirarte?'

Miro a Lana, que me levanta una ceja. Me encojo de hombros y tiro el papel a la basura. Sinceramente, no sé por qué me está mirando tanto. Yo estoy haciendo lo imposible por pasar de él.

Un teléfono suena en la sección de RRHH, todo está tan silencioso que el sonido llega hasta aquí. Obviamente, silencioso a excepción de Harry, que sigue mordiendo su boli como si le fuera la vida en ello.

Rodeo un error en mi manuscrito, suspirando. De pronto, una fuerte vibración suena en el escritorio de Harry. Miro de reojo cómo coge el móvil y lee la pantalla.

"Mierda." Susurra. Se levanta rápidamente, cogiendo su abrigo y metiendo sus cosas en su maletín. No mira a nadie mientras se dirige hacia la oficina del Sr. Greenman, dando un pequeño golpe al cerrar.

"¿A qué viene eso?" le pregunto a Zayn.

Zayn se encoge de hombros sin mirarme.

Harry sale minutos después con mucha prisa de la oficina del Sr. Greenman y abandona la planta.

La curiosidad crece dentro de mí. Él sabe un montón de cosas mías gracias a mi currículo, ¿no debería de saber yo también algo sobre él? Aprieto mis labios y recojo mis cosas. Cuando acabo, me dirijo a la oficina del Sr. Greenman.

"Buenos días, Rose." Me saluda. 

"Hola." Le digo yo. "Me preguntaba si puedo salir un poco antes hoy. Tengo una cita médica." Me sorprendo por lo fácil que me resulta mentirle.

"Por supuesto. No hay ningún problema." Me dice.

"Gracias."

Me doy la vuelta y cojo el ascensor tan rápido como puedo antes de que comience a preguntarme a mi misma qué diablos estoy haciendo.

Cuando llego al vestíbulo, mis ojos buscan a Harry. Le veo andando fuera y rápidamente le sigo, asegurándome de que no me vea. Si me llega a ver, mi mini misión fracasará.

Pasa de largo el parking y tuerce en la esquina calle abajo. Camino detrás de algunas personas, sin quitar mis ojos en él. Se mete en un pequeño callejón en medio de la calle, mirando cauteloso a su alrededor. Me escondo detrás de un hombre muy alto cuando mira hacia donde estoy yo. Una vez continúa con su camino, me doy prisa metiéndome al callejón y escondiéndome detrás de un coche aparcado.

Harry anda hacia un chico rubio. Éste tiene múltiples cicatrices en su cara, una de ellas en su barbilla y la otra le cruza gran parte de la frente. Casi me estremezco por cómo se ve.

Un chico moreno con ojos de color azul oscuro, está a su lado con los brazos cruzados.

Harry mete sus manos en los bolsillos, su expresión es dura.

"He recibido tu mensaje." Le dice.

"Bien." Dice el chico con cicatrices.

"No sé de qué va esto, Alec." Dice Harry. "He estado repasando los números–"

"Los números se han reducido Styles, de eso se trata." Interrumpe el chico de las cicatrices, Alec.

"Yo no puedo contrar los números." Dice Harry.

"No." Dice Alec de acuerdo. "Pero puedes monitorizarlos para que no bajen."

"He estado intentando convencer a Crystal." Dice Harry. "Para la semana que viene estará todo solucionado."

"Ya hemos pasado por esto antes." Dice Alec. "Nosotros vamos primero, después preocúpate por Crystal, ¿escuchas?"

"No volverá a pasar." Responde Harry.

"Estamos perdiendo dinero muy rápido. Si eres tan inteligente como dices, será mejor que pongas más interés y refuerces tu puto juego." Dice Alec.

Harry tensa su mandíbula. Me resulta raro ver a Harry escuchar a alguien, cuando él suele ser desafiante y desobediente. La forma en la que se ve, mirando al suelo, le hace parecer tan sumiso...

Alec y el otro chico se giran y comienzan a andar hacia mi dirección. Mierda, el coche en el que me he escondido debe de ser el suyo. Mi corazón se acelera y corro a la velocidad de un rayo, me quedo quieta en la acera sacando mi móvil y fingiendo haber estado ahí todo el rato.

El coche negro sale de la calle, alejándose a toda velocidad.

Harry sale del callejón un momento después, y me giro. Si me ve, estoy perdida.

Espero unos minutos y me doy la vuelta lentamente. Harry se ha ido. Suspiro de alivio y comienzo a andar de vuelta a Crystal para llegar mi coche.

¿Qué ha sido ese encuentro? ¿Por qué Harry ha actuado tan raro? ¿Y qué eran esos números?

Odio sentirme como una puta cotilla, pero la curiosidad me estalla en el pecho y eso puede conmigo.

Esos hombres tenían un aspecto tan... Serio. ¿Qué pasa si no es un juego? ¿Y si Harry está metido en algún lío peligroso?

Finalmente llego a Crystal y voy hacia mi coche. El de Harry ya no está ahí.