Hidden | h.s (Español)

treinta y uno

Cuando me despierto por la mañana, estoy tirada por el sofá con una manta cubriéndome. Recuerdos de la noche anterior me vienen a la mente; cómo Harry y yo decidimos ser amigos y nos quedamos dormidos juntos en el sofá. Seguramente se haya ido en cuando se ha despertado.

Escucho una voz roncha que murmura a mi alrededor.

"Sí, he visto la puta nota." Dice Harry. Debe de estar hablando por teléfono. Hay una pausa. "Mira, ella no tiene nada que ver con esto, así que dejadla en paz." Mi corazón se acelera rápidamente.

"¡Ella no es parte de esto! ¿Qué tengo que hacer para que la dejéis en paz de una vez?"

Una pausa.

"No le he contado una mierda, ¿puedes escucharme de una vez?" Su voz se eleva ligeramente.

Suspira. "Mierda" Maldice entre dientes.

Hay una pequeña pausa. "De acuerdo, estaré ahí para las tres."

Asumo que cuelga el teléfono cuando empieza a soltar una sarta de maldiciones mientras se tira del pelo por la preocupación.

¿Qué nota? ¿Qué va a hacer hoy a las tres? Tengo que averiguarlo, pero sé que podría poner nuestra nueva amistad en juego si decido entrometerme. Me quedo pensando un rato antes de quedarme dormida otra vez.

Después de lo que parecen unos pocos minutos después, el olor a huevos y bacon recién hechos me despierta, lentamente me reincorporo mirando la hora en la televisión.

10:42 A.M.

"Ah, estás despierta." Harry me sonríe desde la cocina, donde está cocinando algunas tiras de bacon en la sartén. Lleva una camiseta vaquera y sus habituales pantalones oscuros. Varios collares cuelgan de su cuello, sus mejillas están teñidas de rosa.

"Justo a tiempo." Dice, sirviendo el desayuno en un plato. "Pensaba que estabas en modo hibernación."

No estoy acostumbrada a este lado tan bueno de Harry, así que me toma un poco de tiempo contestar. "Podrías haberme despertado." Digo, levantándome del sofá. Miro mi ropa y me doy cuenta de que sigo llevando los mismos pantalones y cardigan de ayer. Suspiro.

"He ido a tu casa y te he traído alguna ropa nueva." Dice Harry en cuanto me siento a tomar el desayuno. "He pensado que querrías cambiarte."

Miro hacia abajo y hay unos pantalones y una camiseta perfectamente doblados. Los cojo y sonrío tímidamente.

"Gracias." Digo ahogando una risilla. ¿Harry ha ido a mi apartamento para traerme ropa limpia? ¿Quién es esta persona y qué ha hecho con Harry?

Harry levanta una ceja mirándome. "¿Qué te divierte?"

"Nada." Digo sacudiendo la cabeza. "Voy a cambiarme." Me encierro en el baño y me miro en el espejo.

Rápidamente me cambio a unos vaqueros y una camiseta azul de manga larga. Mi pelo cae en unas ondas suaves y salgo del baño.

Recuerdo la llamada telefónica que he escuchado esta mañana.

No puede saber que la he escuchado.

"Entonces." Digo mientras Harry me ofrece un plato con el desayuno. "¿Qué vas a hacer hoy?"

Harry se encoje de hombros. "No mucho." Dice. "¿Y tú?"

"Tengo que ir al supermercado." Le digo. En realidad, es verdad. Me estoy quedando sin comida y necesitaré algo para esta semana.

"Suena divertido." Dice, cogiendo su móvil y deslizando su dedo por la pantalla.

Asiento y continúo comiendo. Quiero saber a dónde irá esta tarde. Me está comiendo viva.

Ayudo a Harry a lavar los platos cuando termino. Cuando acaba se inclina sobre la encimera y cruza los brazos sobre el pecho.

"Gracias por dejar que me quede aquí." Digo en voz baja.

Él asiente. "En parte soy responsable de todo lo que ha pasado..." Las esquinas de su boca se inclinan hacia abajo.

"No, no lo eres." Digo. "No te culpes."

Harry no dice nada cuando me acerco a la puerta, llevo la ropa que utilicé ayer en mis brazos.

"Supongo que nos veremos en el trabajo." Le digo a Harry.

Él vuelve a asentir y me medio sonríe. Abro mi apartamento y doy un respingo al entrar.

Todo, absolutamente todo, está de vuelta a su lugar. Los cojines están perfectamente colocados en el sofá, y los platos están en las vitrinas. Voy a mi habitación. La cama está hecha y las fotos están de nuevo en la mesa. La foto en la que salimos Aaron y yo tiene una raja en el centro, separándonos. Frunzo el ceño. Debería comprar un nuevo marco.

Pongo mi ropa en su sitio y vuelvo al salón. Harry habrá ordenado todo cuando vino a por mi ropa. Diviso un trozo de papel en la encimera de la cocina.

Rosie,

Siento el desastre del otro día. He supuesto que necesitarías algo de ayuda con la limpieza.

–Harry

Agradezco tanto el gesto que apenas me doy cuenta de que me ha llamado 'Rosie'. Doblo la nota y la guardo en el bolsillo de mi pantalón.

Recojo mis cosas y salgo del apartamento, asegurándome de cerrar con llave. Busco mi coche y me dirijo a la tienda. Me paso todo el camino pensando en cómo me quedé dormida al lado de Harry anoche.

¿Se enfadaría Aaron? Quiero decir, no pasó nada. Simplemente me quedé dormida y él también. No es para tanto, ¿no?

No es para tanto, pero has besado a Harry, me dice mi mente. Él te besó, y tú le devolviste el beso.

Trago saliva. ¿Debería contárselo a Aaron? ¿Se enfadaría conmigo y me dejaría?

Decido no contárselo por ahora. Con todo el drama que tengo ahora mismo en mi vida, no quiero hacer frente a un Aaron enfadado.

Aparco mi coche en Safeway y comienzo a andar hacia la tienda, sacando mi móvil para mirar la lista de la compra. Voy andando por los diferentes pasillos, echando todo lo que necesito de los estantes al carro.

Estoy decidiendo qué sabor de helado comprar, cuando escucho mi nombre.

"¡Rose!"

Me giro para encontrarme con los cálidos ojos marrones de Liam. Me sonríe.

"Hola." Le saludo sonriéndole también.

"Me alegro de verte." Me dice. "Eligiendo sabor por lo que veo."

Sonrío. "Sí." Digo. "¿Qué me sugieres?"

"Me gustan todos." Dice encogiéndose de hombros.

Me rio. "Mi favorito es el de menta con trocitos de chocolate."

"Ese es bueno."

Cuando conocí a Liam mencionó que era amigo de Harry. Quizá pueda averiguar algo de él a través de Liam.

"Liam." Digo. "¿Desde hace cuando os conocéis tú y Harry?"

Liam me mira de reojo, pensando. "Más o menos hará un año y medio."

"Oh." Hago una pausa. "Y... ¿De qué conoce a Niall?" Estoy segura de que Liam conoce a Niall porque la otra noche estaban jugando juntos al póquer. Y Niall obviamente trabaja con Harry en lo que sea que estén metidos al margen de Crystal.

Liam levanta una ceja. "Se conocieron a través de un amigo en común." Dice.

"Hmm." Asiento. Liam debe pensar que me he vuelto loca por hacer tantas preguntas de repente. "Tenía curiosidad."

"No pasa nada." Liam vuelve a sonreírme. "Bueno, me tengo que ir. Nos vemos, Rose."

"Adiós." Le sonrío de vuelta antes de que se gire y continue su camino. Me fijo en que no ha comprado nada.

Miro la hora. Son las dos en punto. Lo que sea que va a hacer Harry, es en una hora.

Me muevo rápido para pagar la compra.