SéquelamayoríaaúnsientelamelancolíadelatrágicanoticiadeStan, ylasentiendonenas. Aúnnomemetoenlacabezaqueélyanoestarámásenloscameosqueamábamos tanto oquenuncavoyatenerelhonordeconocerlosialgúndíasemecumplieraelsueñodeiraunacomic-con. Penséen cancelar, de nuevo, lasemanadelsmutporque a mi me parecíaalgodemuymalgustopublicaralgoasíenestosmomentosperonoqueríaquedarmalconloquelesprometíyesporestarazónquecontinuareconloacordadoyterminaréelespecial. Talvezpuedaanimarlasunpoco.
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El joven Peter Parker caminó fuera del elevador, sintiendo los nervios galopar en su interior de pies a cabeza. Aún no podía creer que se hallaba en ése edificio. ¡Su primer día con los súper héroes! Era increíble, sí. Pero también existía una razón mucho más atractiva por la que su cabeza daba vueltas.
Tú, la precoz hermanita de Tony Stark.
—¡Señor Stark! —exclamó con júbilo al encontrar al filántropo ocupado con Happy Hogan.
