No puedo creer como pasa el tiempo tan rápido, ya hace un año que vivimos aquí en México y el tiempo se me a pasado volando, al igual que las vacaciones.
Tengo que aprovechar mi última semana de vacaciones. Realmente es tan trágico tener que esperar todo un ciclo escolar las vacaciones, para que cuando las tengas, se te vayan como agua en las manos. Pero en fin; así es esto.
Mi mamá me ha casi obligado a ponerme un vestido hoy y es que iremos a una playa que esta a unas 2 o 3 horas de donde vivimos. No vamos de vacaciones, en realidad vamos a una boda de un amigo de mi papá.
Vamos un poco tarde y como era de esperarse, es por mi culpa y no es precisamente porque me tarde mucho areglandome lo que sucedió fue que me desperté tarde, muy pero muy tarde.
Me metí a bañar y en menos de 10 minutos ya estoy afuera, me puse el vestido que me compro mi mamá que a pesar que no me gustan los vestidos tengo que admitir que este si es de mi gusto. Es de negro, a la rodilla, un poco entallado de la parte de arriba y sin tirantes. Me siento un poco incomoda porque lo siento muy corto y además no tiene tirantes y siento que en cualquier momento se me va a caer el vestido, pero dice mi mamá que solo es falta de costumbre.
También me puse unas zapatillas un poco altas, un poco de rímel, delineador negro, llevo el cabello suelto y ¡listo!. Cuando me propongo arreglarme hasta parezco otra, pero realmente nunca me arreglo, al menos de que este obligada o amenazada por mi mamá. En este caso estoy amenazada con no salir a ningún lado si no me pongo el vestido y me arreglo.
—¡Jenifer! ¡baja ya! ¡ya se nos esta haciendo tarde! — grito mi mamá como por décima vez.
—Ya tranquila, ya estoy bajando — conteste bajando las escaleras.
—Vámonos ya que aun tenemos que pasar por tu amiga.
Nos subimos a la camioneta que se compro apenas hace una semana papá y nos fuimos por Elena.
Invité a Elena a la boda, toda la semana pasada hemos estado juntas, unos días salimos a pasear y otros solo nos quedamos en mi casa platicando o viendo películas. Nos hemos hecho buenas amigas.
Llegamos a casa de Elena y después de que su mamá nos dijera unas veinte mil veces "Me cuidan a mi hija, por favor" nos subimos a la camioneta y ahora si ya nos vamos.
La camioneta tiene siete asientos, dos adelante, dos en medio y tres atrás. Taylor va manejando, mis papás van en los dos de en medio y Elena y yo en los de atras
—Wow Jeni, te vez... hermosa— susurró
—Tu no te quedas atrás Elena.
Todo el camino me la pase durmiendo en el hombro de Elena y como era de esperarse fue todo un show para desepertarme.
—Jenifer, ya llegamos, despierta — dijo Taylor
—No, otro ratito más — susurré adormilada.
—Anda Jeni, despierta— susurró Elena.
—Jenifer si no...
—Espera, no grites, yo la despierto — interrumpió Elena
—No vas a poder, mirala , parece piedra.
Elena solo le guiño el ojo. Me fue recostando lentamente en el asiento, se sentó en mis piernas y me besó.
—¡No! ¡mis papás! — grité al sentir sus labios en los mios.
—Vez, te dije que yo la despertaba — dijo Elena entre risas.
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Fuck! ¿Y ahora...?
Любовные романыJenifer es una hija modelo, es todo lo que sus papás desean. A su corta edad, piensa que su vida no es muy divertida porque ella es muy tímida y poco social pero mas que timida es como muy reservada ante algunas cosas porque eso le han indicado sus...