Caminaba por la carretera solitaria bajo la madrugada oscura.
Él no se dio cuenta del momento en que me fuí y lo agradezco.
Me puse toda esa ropa floja de la que me pienso deshacer apenas pueda.
En realidad no sabía a dónde iba, porque mi casa no era un lugar al que quería llegar.
Pensé en todo lo que hice mal, todas las personas que murieron, aquellos que perdieron su trabajo o los que aún pagan las cosas que yo tomaba con facilidades.
Pensé en el sexo con Jef.
Pensé en la muerte de Kendall.
La rubia preciosa.
El besándola.
Yo viéndolos.
No se en que momento empeze a llorar.
La habitación francesas en la que dormi tantas veces, aún puedo oler la humedad en las paredes y la pintura vieja que se caía a pedazos.
Recordé las palabras decepcionadas de mi padre.
La prisión donde estuve un par de días.
El agua helada, la tela sucia y la cama dura.
La comida asquerosa.
Aquella noche, en la que aún conservaba mi personalidad.
El aire fresco, las luces fuertes, mi cara contra el concreto.
El forcejeo con la policía, Tony Stark alejándolo de mi.
El calor de su cuerpo abrazado a el mío.
Sus ojos tristes, una mirada como despedida.
Peter siendo mi arañita.
Aquella arma apuntando su cabeza, el miedo que tenía de que jalaran el gatillo.
Mi antiguo departamento, yo en la bañera, flofi con sus dulces sonidos.
La única amiga que tuve.
Una pelirroja deslumbrante.
Papá abrazandome.
La primera vez que me puse el antifaz.
El cuerpo sin vida de Brus.
Dormir en las calles frías de una ciudad.
Las últimas palabras de mi madre.
La noticia de mi papá sin vida.
Pensé que lo mejor sería no volver a verlo.
Iba a buscarlo para verlo por última vez y después a desaparecer.
Pero cada que me acercaba más pensaba en ofrecerle disculpas, recordarle todo lo que hice por él, pedirle que me dejara estar con el de nuevo, estaba dispuesta a aceptar cualquier negociación por poder acariciar nuevamente su rostro, sin importar si era de noche y a escondidas.
Llamé a su puerta, abrió su tía.
Le pedí hablar con él.
"Aún está dormido cariño"
Insistí.
"En verdad es muy importante"
Aquella mujer me dejó entrar y que tomara asiento en la sala.
- ¿Eres su compañera? ¿Qué tal estuvo el baile?
- Un poco aburrido...
- Debiste verlo, ¿Conoces a Gwen? La novia de Peter, alguien entró a su casa y destrozó todo, su familia salió por unos días y la dejaron quedarse por el baile y le vino a pasar esto.
Dijo la mujer mientras caminaba a una de las puertas, la abrió con sutileza y lo llamo con voz baja.
¿Han oído que la curiosidad mato al gato?
Camine hasta ella y detrás de su hombro vi esa imagen.
Peter estaba acostado con Gwen quién dormía abrazada a su torso.
Nada sexual pero eso mismo, el hecho de que la quisiera sin una gota de indecencia fue lo que me dolió.
Cuando reaccione tenía la mirada de Peter y de su tía puesta en mi.
"Te pedí que esperaras en la sala" dijo algo molesta.
Peter de inmediato se puso de pie y cubrió a Gwen.
- Creo que no es un buen momento...
Fue todo lo que salió de mi boca y camine para salir del lugar.
Caminé hasta el final de la calle donde me detuve a reposar todo lo que acababa de vivir.
Mi arrepentimiento se iba acabando, poco a poco me llene de rabia.
Estaba destrozada.
Comenzé a correr a mi antiguo departamento, ese donde vivia sola.
Cuando estuve adentro lo observé, recordé lo feliz que fuí.
Parecía una casita de muñecas.
Se mantenía limpio y exactamente igual que cuando me fui.
Y me dio por romper todo.
El lugar se llenó de mis lamentos y de cristales rotos, de cualquier mueble haciendo eco, hasta que llegue a mi habitación.
Aquella en donde yo descansaba después de pasar noches tan mágicas.
Los malditos recuerdos.
Los suspiros enamorados.
Quería desaparecer todo y que con ello se fuera ese sentimiento.
Observaba el caos desde la calle, un edificio en llamas, solo quedaban cenizas de lo que sea que una vez sentí.
Pero como en cualquier escena del crimen, el estaba presente, a unos metros de mi viendo como sonreía mientras disfrutaban mi obra de arte.
Lo sigue fue rápido, ya estábamos sobre un techo, el sin su máscara.
Juntos.
- ¿Quién te hizo eso?.- tocó mi pómulo
- ¿Quieres que te lo recuerde?
Se quedó en silencio.
- ¿Fue el golpe de ayer?.- podía ver en su mirada que deseaba que la respuesta fuera "no".
- Si, fue tu golpe.
- Murieron siete personas.- señaló el humo que ahora estaba bajo control de los bomberos.- 3 de ellas eran niños.
Sonreí.
- 7 de un tiro, un nuevo récord.
- Felicia ¿Que te hice?
Reí irónica.
- ¿Puedo hacer algo para ayudarte?.- insistió
- Estuve pensando, Peter. Estuve equivocada todo este tiempo. Tu novia no tiene la culpa.- su expresión se relajo.- busque asesinarla tantas veces cuando a quien debí buscar matar, es a ti.
- Felicia, porfavor regresa.- suplicaba por qué la chica del pasado llegará a flote.
- ¡ELLA NO VA A VOLVER! y ahora, antes de irme quiero que me escuches, porque voy a desahogarme, voy a olvidarte spider-man, un día no voy a recordr tu mirada ni el sonido de tu voz. Te lo haz buscado tú al no querer mas nada, terminaste una historia sin avisarle a una de tus protagonistas. ¿Cuántas veces no hubieron tipos que buscaron acostarse conmigo o tener algo serio mientras yo no estaba aquí? Y nunca acepte porque quería guardar aquel último beso en mis labios hasta que te volviera a ver.
Nadie borrará tus besos Peter Parker.
Porque... yo sé que aún me amas, estoy segura.
- No Felicia, déjame explicarte... Lamento mucho ser el culpable de que hayas perdido toda bondad...
- y te juro que a partir de ahora me vas a recordar a cada instante.- las lágrima salieron sin control.- y es que yo daría todo por otra oportunidad contigo... Desde el inicio, desde que éramos amigos y volver a enamorarte.
Y Peter, perdón, perdón si un día te dije que tenías la culpa...
- Felicia...
- pero ya no puedo hacer nada más que esperar el momento en que te quite la vida...
- Felicia.- se acerco y tomo mi rostro.
- porque es la única solución, espero que contigo muerto pueda tener un poco más de descanso, o dime, ¿tendré que pelear también contra tus fantasmas?
Y se abrazó a mi cuerpo, sentía su pecho subir y bajar a gran velocidad mientras su llanto caía en mi cuello.
Pero no me moleste ni en abrazarlo.
Ya es demasiado retorcido tener que matar a quien amas.
Ya es demasiado retorcido estar muerta en vida..
