EPÍLOGO.

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                                                                     ┐
Toctoc.
¿Quién es?
Jeon Jungkook, un mequetrefe es.

Querido Min,

no creo necesaria tu respuesta a esta carta. Ni siquiera sé si te dejan recibirlas, así que puede incluso no llegarte.

Mañana regreso a Busán con mi papá. Mis abuelos nos esperarán allá. No los he visto por un largo tiempo y estoy muy nervioso.
Mi madre solía frotarme la frente para tranqulizarme, y aunque he probado, no funciona si eres tú mismo quién lo hace.

Jungyeon está ocupada siendo Presidente del Comité y no quiero preocuparla con mis nervios tontos. Se puso a llorar cuando le conté que me iba, sabiendo que nos veremos en vacaciones. Tiene nuevos amigos, son divertidos, de los que salen en los fines de semana y hacen caras graciosas. Pero a ella no les agrada, me lo ha dicho. Creo que extraña pasar tiempo con Taehyung y Hoseok.

Ellos dos pierden su esencia por separado. Parece que se odian, pero cada vez que se cruzan por el pasillo siento que  en sus miradas sigue habiendo amor... y mucha tensión. Aun si no se hablan o Hoseok tenga a ese chico rubio de pareja, algo quedó. Deben hartarte cuando van a visitarte. Parece que les gusta recordarle a la gente por qué rompieron y echarle la culpa al otro.

Me he cruzado con el hermano de Jimin un par de veces en el supermercado, dice que él es feliz en Daegu, acompañando a tus abuelos y estando contigo todo el tiempo.

Cuando paso por la biblioteca los recuerdo juntos en aquella mesa. Creo debí entender que no podía cambiar nada, en ese entonces.

He golpeado a bastantes sujetos después de lo ocurrido. Probablemente ya lo sepas por Jungyeon, Hoseok o Taehyung. Es injusto que por los pasillos las personas cuenten la historia desde el final, cuando... casi te perdimos. Pero comienzo a creer que a la gente no le importa lo demás.

Y puede que yo te dé asco porque no he ido a visitarte. Lo comprendería.

Estoy intentando superarte y creo que voy por buen camino.

Ya no sueño con tenerte en mis brazos, dejé de llorar cuando mi padre pone Asleep y trato de no masturbarme pensando en ti.

Creo que verte me haría comenzar de nuevo, y estoy harto de esto. De empacar todo mis recuerdos y arrastralos por el país como si no significaran algo para mí. Es hora de dejarte ir, completamente. Necesito borrarte, en cuerpo y alma para encontrar mi felicidad.

Deseáme suerte en este viaje, Min.

Sé que en una semana te darán de alta. Siento no estar en la fiesta que te harán, espero que puedas comprender las razones.

Por mi lado, estaré pensando en mi último año en mi nueva preparatoria y hacer al menos un amigo. Leí en un libro que si haces uno el primer día, nada puede salir tan mal.

Si te hubiera hablado mi primer día, ¿crees que todo sería diferente?

Intento no pensar en ello. ¿Tú alguna vez lo has pensado? Es tan intrigante como terrible no saberlo.

Trataré de esquivar todo respecto a ti cuando esté en Busán y olvidar todo lo que pasó en Seúl.

Quiero que sepas que sigo sin arrepentirme de nada, así que espero que tú tampoco, porque si algo saqué de todo esto es que es amor cuando comienza a doler, tanto, que absorbe por completo tus sentidos y pensamientos.

Tú fuiste ese dolor sumergente, y te prometo que ese trozo de corazón que te llevaste siempre, siempre, pertenecerá a ti.

Con amor,
delegado, tucán, o cualquier apodo estúpido con el que trataste de sentirte menos inferior con respecto a mí.

Con amor, delegado, tucán, o cualquier apodo estúpido con el que trataste de sentirte menos inferior con respecto a mí

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LA LOCURA DE MIN YOONGIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora