× [ La casa de té ] ×

§ Toronjil §

Como fue pautado Magnus vino tres veces por semana por dos meses y eso era mucho. Alec lo esperaba con algo rico y con el ritual de la tetera y las preguntas que cada vez eran más subidas de tono.

Coqueteaban y mucho. Pero ninguno de los dos se animaba a dar el paso que era tan esperado por ambos. Respeto o tal vez miedo... Pero ya era claro que lo deseaban.

- Vengo de un examen no me hables, me fue mal. - Dijo Magnus echándose en la mesa de siempre mientras Alec lo esperaba con los brazos cruzados.

- ¿Por eso llegas tarde? - Le cuestiono.

- No jodas Alec... - Le dijo desde su oculto y seguro lugar entre sus brazos sobre la mesa.

- Bueno... Te hice otro tipo de té hoy así que... - Comenzó a echar el líquido en la taza.- Es muy bueno.

- Contame mas. - Dijo con sarcasmo.

- Se llama Toronjil y además de sus excelentes propiedades para la mejora de la digestión.. - continuó, ignorando la cara que ponía Magnus que salía de su escondite, intentó no reír para poder seguir hablando.- ..es considerado un gran relajante. Y eso siempre es algo bueno para cuando estás estresado.

- Alec... ¿Entendes de sarcasmo? - Le pregunto mirando como ponía la taza junto con su platito delante de él.

- Claro. Pero elijo ignorar.

- Que oportuno! Y a la vez injusto.. ¿No te parece?

- Nop. - Dijo llevando la taza a sus labios e inclinándola para beber de ella.

- Cuando te pones así me gustaría irme a la mierda.

- Bueno... Claramente te fue mal. - Alec dejó su taza en el platillo.

- No, solamente no estoy para juegos. ¿Podes entender eso?

Alec lo miró como si estuviera siendo ofendido de la peor manera posible. Magnus entendió con esa mirada que la estaba cagando olímpicamente e intentó hablar pero...

- Me parece que lo mejor va a ser que te vayas.

- ¿Por qué? ¿Por qué no aguantas que no te siga el juego?

- No me gusta como me hablas.

- ¿Cómo te estoy hablando?

Alec no le respondió y se levantó dejando la servilleta sobre la mesa. Dio apenas unos pasos y Magnus ya estaba de pie agarrándole el brazo.

- Perdóname... Estoy muy nervioso, es un examen muy importante para mi.

- Voy a buscar mis cosas y después nos vamos a mi casa.

- Está bien... - Dijo Magnus algo aliviado porque no estaba enojado pero extrañado por lo que decía.

- Tomate el té mientras. - Le sugirió y se retiró.

Magnus se quedó parado sin saber que decir y como le había dicho Alec, se volvió a sentar en el mismo lugar y a tomar la infusión. 

Tenía una mezcla de sensaciones muy extrañas en su interior, algo de pánico mezclado con la urgencia de salir corriendo. Es decir, por cómo le mandaba Alec le parecía raro... pero prefirió dedicarse a tomar el té e ignorarlas.

Error.

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{ A partir de este capítulo la historia pasa a ser privada. 

Saludos y gracias por entender }

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