§ Histeria §

338 52 23
                                    

Alec estaba apoyado en el mostrador mirando hacia la calle, era de noche y lo estaba esperando a el. Lo esperaba hacía unos cuatro días, pero él no venía nunca ¿Lo había perdido? ¿Había arruinado lo poco bueno que tenía en su vida?

Respiro con pesadez mirando su reloj. Eran las 21:57. A esa hora él salía del estudio y ya estaba ahí para estar con él ¿Por qué ahora no?

Dejo caer su cabeza sobre el mostrador. Si. La cago. Cago todo. Llevo sus manos a cubrir su cabeza, necesitaba ahogarse en todo lo que su pecho le había empezado a decir.

- ¿Siempre te agarro durmiendo? Que tipo vago.

Levantó su cabeza rápido para verlo. Magnus. Estaba lindo, distinto.

- ¿Me das una docena de Macarrones? Si es posible dos de cada color.

- Si claro. ¿No te quedas? - Le pregunto inocente.

- No, tengo planes.

- Mira que bien y... ¿Con quien?

Magnus miró a otro lado como si la pregunta no se hubiera hecho, levantó su mano y se acomodo el pelo. Alec sirvió en silencio cada alfajorcito suave y encantador, lo envolvió en un papel y se lo entregó.

- Gracias. - Magnus le pago y Alec recibió el dinero.

- ¿Magnus? - Le llamo cuando vio que se estaba yendo.

- ¿Si?

- ¿Pasa algo?

- No.. ¿Por?

- No, por nada... Como no viniste....

- Ah, si bueno... Tenia cosas que hacer.

- Bueno pero.. ¿No podías avisar?

- ¿Y por que te avisaría? - Alec se quedó mirándolo sin entender. - No somos nada, no tengo porque avisarte si voy o si vengo o lo que hago ¿No te parece?

Alec se quedó mudo y sintió que tenía ganas de llorar.

Y.

Eso.

Empezó.

A.

Hacer.

Magnus levantó una ceja y puso los ojos en blanco. Se acercó a Alec pasando por detrás del mostrador dejando el paquete a un lado. Le abrazo y este lo abrazo con fuerza.

- ¿Ya te aburrí? - Dijo entre sollozos.

- Eso es imposible Alec...

- ¿Y por que ya no queres estar conmigo?

- No se que mierda esta pasando.

- Alecito, me voy a la mierda... - Dijo Clary que salía de la cocina ya lista para irse. Levantó la cabeza y los vio. Rodó sus ojos y siguió caminando.

- ¿Hola? ¿Vas a ayudar? - Dijo Magnus que aun abrazaba a Alec.

- Si claro. Vamos al depto y hago algo de comer.

- No estoy para el chiste esto es serio. - Clary lo miró extrañada por lo que decía.

- Está hablando en serio - Dijo Alec alejándose del abrazo.

- NUNCA SE CUANDO HABLAN EN SERIO O NO! - Grito Magnus que estaba a punto de tener un ataque de nervios. Lo estaban volviendo loco.

× [ La casa de té ] ×Donde viven las historias. Descúbrelo ahora