§ Sin principio ni final §

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¿Cómo se supera una situación así? Estaban ambos en la puerta del departamento, Alec tenía que entrar a trabajar y Magnus tenía que irse a su casa. Se miraban y acariciaban las manos mientras se grababan en sus mentes los rostros de cada uno.

Alec se acercó y le dejó repetidos besos en el cuello, adoraba esto. Adoraba como lo trataba, adoraba como le hacia sentir y no estaba bromeando se estaba enamorando de él. Le estaba gustando demasiado la idea de estar así.

¿Acaso era tan estúpido de sentir estas cosas por como le chupaba el pene? Se abrazó a su cintura y Alec se acercó a él para seguir marcándole ahora el hombro. No le molestaba para nada, le encantaba su boca, su lengua y sus putos dientes que le mordían.

Estiró su cabeza hacia el otro costado como si se tratara de algo planeado entre ambos. Alec le acariciaba el cuerpo como si quisiera grabárselo en su mente y tal vez eso estaba haciendo, como el que se estaba grabando todos los sonidos que hacía.

Le estaba succionando el otro lado de su cuello y marcándolo de una manera que le dolía pero a la vez le daba un placer tan extraño. Podía sentir cómo se iban formando los moretones, uno al lado del otro, como una cadena que iba desde detrás de su oreja hasta su hombro.

Tal vez lo disfrutaba tanto porque su pene erecto estaba rozándose sobre el suyo, por fuera de las ropas y de los jeans que estaban algo caídos.

- Quiero tocarte... - Le susurro y los dientes se clavaron con fuerza en su cuello. Pudo asegurar que estaba succionándole la sangre.

- Tócame... - Le susurro en el oído.

Y eso hizo Magnus, le acaricio su pene con una necesidad obscena, quería tocarlo y sentarse sobre él con fuerza. Le dolía la necesidad de cabalgarlo.

- Quiero chupártela.. - Le susurro y Alec se separó para mirarlo a los ojos, dio unos pasos atrás contra la otra pared del pasillo y lo miro provocativo.

Magnus entendió que era un sí y enseguida se puso de rodillas y lo tomo como si fuera lo único que existía en el mundo. No era un pene enorme, la realidad es que el la tenia mas grande pero mierda que era hermoso.

Le entraba perfecto en su boca y se la chupo hasta perder noción del tiempo. Tal vez habían pasado cinco minutos o tal vez diez, tenía pre semen en su boca. Cuando sintió las manos que le sostenían para que no se moviera más y el movimiento vino de Alec, entendió que ya estaba por acabar.

Perdió de nuevo la noción del tiempo, le estaba cogiendo la boca como si se tratara de sexo duro, podía sentir las lágrimas desbordar sus ojos. Lo miro y no lo estaba mirando, estaba mirando el techo con la boca abierta, jadeando en silencio lo mucho que lo estaba disfrutando.

Una ultima movida y acabo dentro de su boca.

Fue bastante semen, y se lo trago todo. Lo miro con felicidad y Alec lo miró de igual manera. Ambos agitados. Ambos empezando a sentir algo extraño crecer en sus corazones... En sus entrepiernas.

- Te digo que si! - Dijo Izzy cuando se metía de espaldas en el pasillo, mirando hacia afuera a quien le hablaba, a Clary.

- No creo que quieran hacer esas cosas, ya sabes como son. - Le dijo la colorada.

Magnus se levantó enseguida guardándose sus partes al igual que lo hacia Alec y por alguna razón Alec lo abrazo y cubrió contra la pared para que no lo vean. Hubo un silencio fuerte y ambas siguieron caminando. Sin decir nada.

- ¿Qué fue eso? - Dijo Magnus.

- Nada.. - Susurro Alec.

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