My Little Sky [MLS]

Capítulo 10: eso significa que nada bueno se aproxima

2 semanas después...

Desde que mamá había muerto, mi mayor deseo era estar en un sueño, uno en donde sabía que tarde o temprano despertaría y encontraría a mamá a mi lado con su hermosa sonrisa que transmitía paz y tranquilidad.

Se acercaría a abrazarme cálidamente diciéndome que todo había sido una pesadilla, que se quedaría siempre a mi lado y que todo estaba bien. Luego vendría papá y no luciría perdido sin saber como ser un padre y a pesar de que nuestra relación no era la mejor, no estaría rota del todo.

Aunque lo deseará con todas mis fuerzas, nunca saldría de ésta pesadilla, mamá nunca regresaría solamente para abrazarme y decirme que todo estaba bien, que ella se encontraba allí.

Mi vida nunca sería la misma, ésta era mi nueva vida y debía acostumbrarme a ella, por más que no quisiera, tenía que hacerlo porque las cosas habían dejado de ser lo mismo hacía mucho tiempo.

Desde que mamá se había ido, pensaba que vivía constantemente en una pesadilla, hasta que vi a Sky y por primera vez sentía que me encontraba en un sueño, en dónde se presentaba ante mí un ángel, una chica con una belleza capaz de dejarte sin habla y unos ojos que podían pasar por copias de un cielo despejado.

Habían pasado dos semanas exactamente desde la fiesta de la victoria.

Esa noche había sido perfecta, después de que pasamos media hora debajo del agua, en donde las gotas de lluvia empapaban mi rostro y toda mi ropa hasta convertirla en una segunda capa de piel, Sky había comenzado a estornudar y por más que rogó por quedarse más tiempo, no iba a permitir que se enfermara.

Después de eso, Ty decidió llevarse a una Sky empapada de los pies a la cabeza y a un Alex que ni siquiera recordaba su propio nombre y se encontraba dormido en el asiento de atrás del auto.

A pesar de que intenté comunicarme con los chicos después de la fiesta, no volvía a saber de los Donnovan, parecía que un agujero se había abierto en la tierra y se los había tragado.

Nadie podía decirme qué había pasado para que faltarán dos semanas y por más que amenacé a los gemelos, no pude sacarles información para saber el por qué de su ausencia.

☁☁☁

Sí algo tenían en común todas las escuelas era que a una cierta hora todos los pasillos se encontraban abarrotados de estudiantes.

Para mi mala suerte, había llegado justo en el momento en que por los pasillos no podías caminar e intentarlo era en vano porque una vez que entrabas entre las capas de chicos, era imposible salir.

Cuando logré llegar ileso a mi casillero, percibí el movimiento de una cabellera castaña. Mi corazón comenzó a bombear fuertemente, tanto que provocaba un leve dolor en mi pecho, era como sí recién encontraba un propósito para latir.

Mis ojos no me estaban traicionado, en verdad se encontraba a un pasillo de mí.

Se encontraba de espaldas a mí, pero sólo con ver su cabello podía saber que se trataba de Sky.

Mi Bonita, al fin mi Bonita había regresado.

Mis pies parecían tener vida propia, porque antes de evitarlo ya me encontraba a su lado sujetándola del codo para darla vuelta y que su cuerpo chocara con el mío en un abrazo.

Y a pesar de que había soñado y pensado muchos escenarios, en los cuáles uno era muy parecido al que estaba viviendo, ninguna sensación reconfortante me invadió, ni siquiera tranquilidad, me sentía como si no la tuviera cerca.

- Disculpa, ¿Qué haces abrazando a mi novia? - preguntó una voz bastante enfadada.

Alce la vista para encontrarme con la mirada de un chico que parecía estar aguantando para no golpearme, enarque una ceja listo para decirle que Sky no tenía ningún novio y bajé la mirada buscando apoyo en Sky, pero al cruzar con su mirada algo andaba mal.