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Un mes, un maldito mes había pasado desde que me alejé de Suga, un mes en donde conocí por primera vez la verdadera cara de Hoseok, un mes desde que mi vida cambió por completo.

Mi transformación había sido dolorosa, tan así que Hoseok no tuvo oportunidad y golpeó de mi las veces que fueran necesarias para no matarlo, para no escaparme y matar lo que se cruzara en mi camino, en donde vivíamos era muy tranquilo y Hoseok lo menos que quería era ocasionar problemas por mi culpa. Él tenía razón, me estaba convirtiendo en un Suga 2.0, y eso no me tenía para nada contenta.


-Tienes que aprender a controlar tu sed, por dios Katie, ya lo hemos ensayado demasiadas veces, ¿cómo es que aún no puedes controlarte?.-Fueron las mismas palabras que Hoseok me decía cada vez que intentaba liberarme, y que cuando lo hacía, mordía de él.-Me dejo morder solo porque te quiero y no quiero convertirte en un monstruo.


Pero era cierto, me estaba convirtiendo en un monstruo y no quería, me sentía fatal.


-Si consigo plasma, ¿te quedarás tranquila?.-Me miró a los ojos, inmediatamente asintió, sonrió y me dejó ahí, tirada como siempre lo hacía.

Al rato después llegaba con 10 bolsas de plasma y me regalaba una al día, para controlarme, pero es que era tan inevitable convertirme cada vez que bebía sangre que ni él podía conmigo, fue tanta la ayuda que necesitaba que tuvo que ir al pueblo a escondidas para pedirle ayuda al Conde.

(...)


La mismas palabras que me decía Hoseok me las dijo el Conde, ya estaba aburrida del mismo discurso pero no podían hacer más con mi situación. Estaba exhausta.


Pero un día tuvieron que ponerme a prueba para poder confiar en mi.

Necesitaban saber si podía alimentarme de plasma, sangre humana o de animales, obviamente no había probado la sangre animal, pero estaba nerviosa, no quería transformarme, no me gustaba como me veía.


-Te tendremos que amarrar a una silla, ni tú, ni el Conde, ni yo sabemos como vas a reaccionar ante la sangre animal.-Dijo Hoseok.


Asentí desanimada, no quería más.


Pero fue un fracaso, la sangre animal me dio nauseas, quería vomitar, quería salir corriendo de allí e irme bien lejos, pero las cadenas me impidieron a zafarme.


-Fue un fracaso, eres un fracaso.-Bufó Hoseok.- Conde, ya no sé que hacer con ella.


Me sentí fatal, de un momento a otro Hoseok cambió por completo, me trataba mal, me llamó inútil varias veces, me trató de zorra y eso que ni siquiera habíamos tenido algo más allá que unas miradas seductoras. 


-No tienes que porqué llamarme zorra o inútil, ¿te he tratado mal para que me llames así?.-Me defendí, de un momento a otro la Katie dura y agresiva se escondió y salió a la luz una Katie sensible y de cristal.


-Estoy harto de todo esto, me arrepiento haberme ofrecido para ayudarte a salir de esta, a escapar de ese enfermo de Suga, ya no puedo más, me largo.- Hoseok en un cerrar y abrir de ojos fue a su habitación y al volver ya tenía lo necesario para irse.-Espero que tu sola resuelvas esto, ya no me llames más porque no volveré.


-Hey Hoseok, ¿por qué ese cambio tan repentino?.-Preguntó el Conde.-Tú no eres así, vamos, ella te necesita, y ahora más que nunca.


-Me importa una mierda todo, me cansé, mi familia me necesita.-Caminó hasta la puerta.-Me cansé de esperarte Katie.


-Te iba a dar una oportunidad y ahora me abandonas.-Susurré para mi misma cabizbaja.


-Pues te tardaste mucho, no soy de fierro tampoco, también siento al igual que tú y al igual que el Conde, hasta nunca Katie.


Y esa fue la última vez que supe de Hoseok.


Tanto yo como el Conde estábamos confundidos por su cambio tan repentino, de su partida tan inesperada, lo estaba empezando a aceptar, me atraía mucho Hoseok y eso era un milagro para mi, ya que eso me daba por entender de que había olvidado a Suga.

|Esclava de un VAMPIRO| SUGA | BTS | TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora